La inflación acabó con la economía familiar
Hoy día los trabajadores venezolanos se han visto obligados a sobrevivir ante la peor crisis económica de la historia, responsabilidad directa de un régimen que sistemáticamente se ha encargado de destruir la economía, el aparato productivo interno, y en consecuencia la calidad de vida de los trabajadores, aunque en su discurso responsabilice a la guerra económica, el imperio y la derecha fascista.
Cifras de la comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional indican que la hiperinflación podría superar 13.000% en 2018, lo que significa la destrucción de salarios, pensiones, jubilación y la capacidad de ahorro (José Guerra, 2018). A partir del 1 Marzo el sueldo mínimo pasó de Bs. 248.510 a Bs. 392.646 y el bono de alimentación ascendió de Bs. 549.000 a Bs. 915.000. Este lo que ubica el ingreso mínimo total en Bs. 1.307.646 (2$), lo que representa un aumento de 58% para el sueldo mínimo y de 67% para el ticket de alimentación. Esto es lo que gana un trabajador venezolano en jornadas de 8 horas diarias durante un mes.
Ahora bien, el CENDAS establece el precio de la Canasta Alimentaria Familiar para marzo 2018 en 52.043.223,28 bolívares, 14 millones más que el mes de marzo. Lo que quiere decir que hoy en Venezuela se requieren 132.5 salarios mínimos (392.646,46 bolívares) para poder adquirir la canasta, referida a una familia de cinco miembros: 1.734.774,10 bolívares diarios, 4.4 salarios mínimos diarios. Lo anterior refleja que, si medimos la pobreza en función del ingreso familiar, los trabajadores venezolanos hoy viven en condición de pobreza, la cual alcanzó, según ENCOVI, 82% en 2016. Adicionalmente, existe un incremento sostenido del precio de los alimentos (67% en promedio) y la escasez de por lo menos 19 de los 58 rubros que contiene la canasta básica familiar (harina de maíz, pasta, arroz, leche, granos, entre otros).
CONSECUENCIAS: 9,6 millones de venezolanos que no pueden satisfacer sus necesidades diarias nutrientes. Caritas, indica que para Octubre 2016 8,7 % de niños con desnutrición grave, en 2017 diagnosticaron 15,6 % niños con igual desnutrición, duplicándose en solo un año, lo que hace a los niños más vulnerables ante las enfermedades y deja daños irreparables. La situación descrita es crítica e insostenible, afectando a TODOS los trabajadores: transportistas sin repuestos para sus unidades, usuarios sin servicio de transporte, profesionales de la salud sin medicinas para atender a sus pacientes, profesionales del Agro sin semillas ni fertilizantes, Médicos Veterinarios sin medicinas para garantizar la sanidad animal, docentes que no pueden llegar a sus centros de trabajo porque el salario no cubre el gasto del pasaje…POCO QUE CELEBRAR Y MUCHAS RAZONES PARA PROTESTAR.