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¿Qué implica para Venezuela el retorno de Lula al poder en Brasil?

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Tiempo de lectura: 4 min.

Un viejo conocido retornará a la presidencia en Brasil a partir de enero de 2023. Luis Inácio Lula Da Silva, de 77 años, quien ganó la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el pasado 31 octubre, volverá al poder gracias a la que se considera una resurrección política que era impensada hasta hace tres años, cuando el líder del Partido de los Trabajadores (PT) salió de la cárcel en noviembre de 2019 luego de pasar 580 días tras las rejas, condenado por cargos de corrupción.

Lula se impuso a Jair Bolsonaro, el gobernante de ultraderecha que aspiraba a la reelección, al obtener 50,9% de los votos válidos (60.345.999 voluntades) frente a 49,1% (58.206.354 voluntades).

La victoria de Lula en las elecciones más reñidas de Brasil desde el retorno de la democracia en 1985 completó una configuración del mapa geopolítico de la región en la que predominan gobiernos de tendencia socialista izquierdista, como en Argentina, Chile, Colombia, Perú y Bolivia.

En Venezuela, un país conocido por Lula quien durante sus mandatos consecutivos como presidente de Brasil, de 2003 a 2010, fue uno de los principales aliados del entonces presidente Hugo Chávez, está por verse cómo se desarrollará la nueva etapa de relaciones que defina la administración del líder sindical carioca.

Contexto diferente

El gobernante Nicolás Maduro adelantó que en conversación telefónica con Lula, tras su victoria electoral, acordaron retomar la agenda binacional de cooperación, una relación signada, entre otras cosas, por el paso de la constructora brasileña Odebrecht y el mecanismo de corrupción de esa empresa en territorio venezolano.

Un contexto político venezolano distinto, en el que destacan investigaciones por crímenes de lesa humanidad y señalamientos contra el propio Maduro, entre otros aspectos geopolíticos y regionales, condicionarán la relación entre Lula y el gobernante venezolano, de acuerdo con los internacionalistas Luis Peche y Félix Arellano consultados por El Pitazo.

En agosto, en la dinámica electoral de Brasil, al referirse a Venezuela, el político carioca dijo que unas elecciones libres y la alternancia en el poder son lo más deseable para el país.

«Tenemos que tratar a Venezuela con respeto, siempre queriendo que Venezuela sea lo más democrática posible», dijo Lula el 22 de agosto citado por la agencia de noticias Reuters.

Designaciones y señales

La aspiración de Lula para volver a la presidencia contó con el apoyo de diversas personalidades políticas y culturales de Brasil, como el respaldo que manifestó el político socialdemócrata Fernando Enrique Cardoso, expresidente brasileño.

De acuerdo con Arellano, las designaciones y nombramientos de Lula para su próximo gabinete serán un factor que debe considerarse para tratar de anticipar la orientación que tendrá su administración.

El analista internacional considera que Lula será más cauto y menos radical con respecto a su relación con el oficialismo en Venezuela y en particular con Maduro, pues entre otros elementos, la presencia de su compañero de fórmula y vicepresidente, Geraldo Alckmin, un político de centro y exgobernador de Sao Paulo, obligan a Lula a ser prudente.

«Visualizo a Lula con una postura cercana a la de Petro, sin un apoyo absoluto y mecánico, obligado a ser prudente porque no es el Lula del pasado aunque lo ayudó el pasado», refirió Arellano vía telefónica.

Peche, por su parte, considera que la postura de Lula ante el conflicto político venezolano será similar a la manifestada hasta ahora por el mandatario argentino Alberto Fernández.

«Puede llegar a ser una posición que ha sido más de solidaridad y de apoyo, tomando en cuenta que Lula ya tuvo dos periodos en el poder, en lo cuales formó parte de una coalición como el Foro de Sao Paulo. No creo que haya una denuncia de un nivel como el de Boric, quien sí ha exigido mejoras en cuanto a derechos humanos», agregó el internacionalista vía telefónica.

Arellano vaticina como probable que Lula designe un embajador de renombre para los asuntos vinculados con Venezuela para así «bajar las aguas en Miraflores sin ir mucho más allá».

Acercamiento entre naciones

Las relaciones diplomáticas entre Brasil y Venezuela, que no están rotas, comenzaron a deteriorase con el mandatario Michel Temer, quien en 2017 impulsó la salida de Venezuela del Mercosur. A esa situación se le sumó, en 2019, el reconocimiento de Bolsonaro al líder opositor Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela.

«No va a haber un show con grandes declaraciones, como en el pasado, porque a Lula no le conviene en lo interno ni en lo externo», dijo Arellano.

La situación de los DD. HH. en Venezuela y la relación de Brasil con Estados Unidos serán determinantes en el condicionamiento de la relación entre Lula y Maduro, según Arellano.

La victoria de Lula no solo fue motivo para que el oficialismo en Venezuela manifestara sus expectativas, la oposición que constituye la Plataforma Unitaria Democrática solicitó a la que será la nueva administración brasileña que mantenga la consistencia en las políticas de apoyo y solidaridad a los migrantes venezolanos que, de acuerdo con los últimos cálculos de la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V), totalizan 365.387 venezolanos en suelo brasilero.

2 de noviembre 2022

El Pitazo

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