Aunque no era de su competencia, organizar a la oposición venezolana para que se haga mas efectiva en una Plataforma Unitaria y poder presentarse unificada a las elecciones presidenciales del 2024 resuelve dos problemas graves de nuestro país. El primero, que le permite una estrategia constructiva de retirada de los asuntos internos de política nacional. Y segundo, le permite levantar las sanciones al petróleo y otros minerales para que Venezuela pueda competir por capital para atraer inversiones en el mundo. A diferencia de Rusia y China, donde EEUU interviene, los resultados son productivos. Donde Rusia interviene, las sociedades colapsan al estilo Siria. Igual donde China interviene como en África no hay avances en las sociedades. EEUU tiene un enfoque mucho mas de generar prosperidad donde interviene, aunque en algunos casos se duda de las motivaciones por las que interviene. El enfoque Biden para levantar las sanciones a Venezuela ha sido brillante. Haber impulsado la Plataforma Unitaria le quita el monopolio a los sectores políticos de la oposición beneficiados por las sanciones y a la vez le genera un impulso democrático al país. Creo que es clave que el gobierno del Presidente Biden pronto anuncie el levantamiento de sanciones petroleras y eso nos permite hacer un ejercicio de los beneficios una vez que Pdvsa aumente la producción y las ventas de petróleo a precios de mercado.
Beneficios de aliviar las sanciones a Pdvsa y otras empresas del Estado:
Aunque no hay información oficial, podemos hacer un ejercicio de hoy y estimar que Venezuela exporta unos 400.000 barriles diarios a una tasa descuento a China que llega a $70 por barril. Esto representa unos $10.080.000.000 en facturación por año. Si se liberan las sanciones que impiden a Pdvsa vender petróleo a los países occidentales, podríamos decir que la exportación subirá en 2 ó 3 años a 2.500.000. Si el precio del petróleo baja de $85 a $70 por barril en el año 2025, ahí Pdvsa estaría facturando $63.000.000.000. Como las nuevas exportaciones estarían en manos de empresas mixtas occidentales, esto generaría aumentos en ingresos a trabajadores petroleros de 6 veces e igual ocurriría con el número de personas empleadas por la industria. De estos ingresos adicionales para el año 2025, el Fisco recibiría sus regalías e impuestos y contaría con por lo menos $25,000,000 de nuevos ingresos petroleros o superávit en la entrada de capitales. Si reestructura la deuda externa para salir del default, la entrada de capitales para invertir en otros sectores de la economía sería elevada, pudiéramos hablar de unos $15.000 millones en inversión directa extranjera. El efecto multiplicador sería aún mayor si se permite aliviar las sanciones a otros sectores de la economía donde operan las empresas del estado como minería y en ellas entra el capital privado. Estaríamos hablando de un aumento en el superávit de balanza de pagos de más de $30.000 millones por año. Y este aliviar de las sanciones a las empresas del estado no solo aumenta la facturación del país a mediano plazo sino que también de forma inmediata ya que implicaría la traída de inversión para recuperar esas empresas. También las empresas del estado con capital privado estarían siendo operadas mas eficiente y transparentemente que en la actualidad.
Si además consideramos el beneficio para EEUU y Europa, el aumento de producción de petróleo y de gas por parte de Venezuela ayudaría a bajar el costo de los combustibles en esos países y habría más capacidad de aguante del occidente para enfrentar la guerra de Rusia contra Ucrania.
Los números anteriores son muy conservadores si los contrastamos con el potencial que Venezuela tiene para crecer y aportar exportaciones al mundo. Según el Atlas de Recursos Naturales (www.worldatlas.com/articles/countries-with-the-most-natural-resources.html), Venezuela tiene un inventario de USD 14,3 trillones en recursos naturales comercializables productor y exportador líder de numerosos minerales, incluidos petróleo, mineral de hierro, oro, carbón y bauxita, sin considerar su capacidad gasífera, agrícola, turística, manufacturera, logística, financiera y tecnológica.
Venezuela y sus lideres políticos nacionales e internacionales han avanzado en apoyar a que Venezuela fortalezca su democracia y atraiga mas capitales del exterior de los mercados nacionales e internacionales. Venezuela necesita $3 trillones en inversiones en los próximos 10 años para desarrollar su potencial económico y expandir su PIB anual a USD 1 Trillón por año, basado en recursos naturales, agrarios y demás sectores de la economía.
Este proceso democrático que la Administración Biden ha impulsado en Venezuela aumenta la transparencia en negocios del estado venezolano ya que hoy solo negocia con Rusia, China y otros países y no con empresas petroleras occidentales auditadas; y al entrar empresas de Europa y EEUU a producir petróleo y minerales en Venezuela generan más competencia (mayor % del PIB venezolano en manos de occidente) y no deja el territorio libre a Rusia y China. También esta estrategia de permitir agilizar el juego democrático en Venezuela ayuda al Presidente Maduro a fortalecer la posición de Venezuela ante su batalla por mantener el Esequibo dentro del territorio nacional.
El presidente Biden ha sido muy responsable en Venezuela, y negociando con el presidente Maduro y la oposición venezolana han logrado avanzar para crear condiciones para levantar las sanciones al petróleo venezolano y generar mas oportunidades de desarrollo al pueblo.
Twitter: @alejandrojsucre