Las noticias falsas en la pandemia (5)
Por estos días han circulado, a través de las redes sociales imágenes y notas falsas relacionados con la pandemia del coronavirus Covid-19. Las llamadas “fake news” bajo la apariencia de supuestas informaciones creadas con la finalidad de generar empatía, o rechazo, a través de los contenidos expuestos, terminan provocando una visión distorsionada de los hechos y de la realidad. Esos mensajes apuntan a las emociones más que a la racionalidad.
Las llamadas noticias falsas, para intentar decirlo en términos médicos, se apoyan en un cuadro clínico de “incontinencia digital” que muchos usuarios de las redes sociales padecen, usando las técnicas de la teoría del rumor, lo cual facilita la propagación vertiginosa de la “fake news”, casi con la misma velocidad que lo hace el virus mismo.
Es así como a muchos, por ejemplo, han reenviado la imagen con supuestas centurias de Nostradamus en las que aparentemente predice la pandemia. Muchos tal vez, dieron crédito a la falsa nota informativa de la supuesta cuarenta de un club de damas de compañía en España con los avergonzados clientes dentro. Otros quizás replicaron la inexistente declaración del político venezolano Claudio Fermín señalando que: “como el virus es de origen chino seguramente durará muy poco”.
Pero no hay duda que resultan preocupantes los contenidos basados en vídeos, audios y cadenas de supuestos médicos en inexistentes hospitales, referidas a ciertas medidas que erróneamente sugieren adoptar: tales como los baños de agua tibia, la ingesta de limón, el ejercicio de la contención de la respiración por 10 segundos o tomar sorbos de agua cada 15 minutos. Y la verdad es que ninguna de estas recomendaciones provoca daños excepto que se desatiendan las que efectivamente instruye la OMS para combatir la pandemia.
¡Amanecerá y veremos!
Estrategias ante la pandemia (6)
En las redes sociales se difunden teorías contrapuestas en torno a una eventual conspiración que explica la naturaleza de la pandemia a la luz del cristal geopolítico con que se mire, y también análisis en los cuales se evalúan estrategias, políticas públicas, tratamientos, recursos y el comportamiento social ante la expansión del coronavirus Covid-19.
Los primeros casos de infección relacionados con el mercado de Wuhan se conocieron a finales de diciembre pero no fue hasta un mes después, en el marco de la celebración del Año Nuevo Chino, que las autoridades dejaron de perseguir a integrantes de la comunidad médica que alertaba sobre el surgimiento inusuales enfermos en la localidad y de amedrentar a periodistas que reportaban sobre los desvanecimientos de ciudadanos en las calles, así como del fallecimientos de personas. Entonces se impuso la férrea cuarentana, los despistajes masivos, el control social, la disposición de medicamentos eficaces, la construcción vertiginosa de grandes hospitales y el empleo de la robótica para la atención de pacientes infectados.
Cuando el virus estaba en plena expansión algunos países asumieron una política basada en campañas educativas, exhortación a la ciudadanía con políticas restrictivas progresivas como el Reino Unido, aunque finalmente cambiaron la estrategia. En varias naciones de la Comunidad Europa, entre ellos Italia y España. se han dictado medidas de aislamiento social, que no siempre se cumplieron, bien por la poca disposición de la población a acatarlas o por la incapacidad de las autoridades para imponerlas. Corea del Sur ha recurrido al uso de aplicaciones telefónicas para monitorear a la población, practicar evaluaciones tempranas y controlar a los pacientes que presentan síntomas de la enfermedad. Israel ha empleado inteligencia artificial para establecer cercos epidemiológicos sectoriales y comunitarios en lugar de inmovilizar a toda la población. La implementación de medidas responde también al avance de la pandemia aunque países como México que suspendió las clases todavía no restringen las actividades comerciales y administrativas.
En Venezuela se adoptó, como política preventiva, la estrategia de la cuarentena con vigilancia de las autoridades militares y policiales para el control el cumplimiento de la medida. La idea es reducir drásticamente la movilidad social con la finalidad de minimizar las posibilidades de eventuales los contactos interpersonales que reduzcan los riesgos de propagación del virus. En nuestro país la pandemia nos alcanza en medio de las escasez de agua, interrupciones del servicio eléctrico y de una severa crisis de suministro de combustible que si bien tiene incidencia sobre la cuarentena, también amenaza con influir en la paralización de actividades esenciales en medio de la emergencia.
El éxito de la lucha contra la pandemia que causa estragos en la comunidad internacional parece apuntar a la adopción de prácticas sanitarias individuales y colectivas, medidas de restricción de la movilidad social, el uso de herramientas de la tecnología para la detección temprana de contagios en personas sintomáticas o asintomáticas, la ampliación de la capacidad resolutiva en servicios de cuidados intermedios o intensivos y la disponibilidad de tratamientos médicos mientras la comunidad científica y las potencias mundiales libran la batalla por la vacuna contra el virus que azota a la población. ¡Amanecerá y veremos!
@ADIGIAMPAOLO
#CronicasDeCuarentena