La realidad pone al descubierto las verdades en salud que el gobierno quiere ocultar.
La dramática situación que vivimos los venezolanos por el deterioro de la calidad de vida por la escasez de alimentos, aumento de la pobreza, inflación, problemas en la provisión y la calidad del agua, en la recolección de desechos sólidos, entre muchos otros), ha menoscabado la salud de los ciudadanos. Para empeorar las cosas, los servicios de salud viven el peor de los momentos de su historia en lo que es conocido como la “crisis humanitaria de la salud”, con escasez de medicamentos en las farmacias.
Para comenzar a solucionar cualquier problema, el primer paso es reconocer su existencia. A modo de ejemplo señalaremos la epidemia de Zika que se está extendiendo en América latina, tal como lo han advertido tanto la Organización Mundial, como la Oficina Panamericana de la Salud, OMS y OPS, respectivamente. Sobre esta enfermedad, resaltaremos la conducta de las autoridades de los dos (02) países vecinos con quienes tenemos fronteras: Colombia y Brasil. En el primero, el propio Presidente Santos declaró que: “Los estimativos son que tendremos en Colombia 600 mil casos de Zika en el transcurso de esta epidemia. –De esos 600 mil casos se calcula que las consecuencias serán 500 casos de niños recién nacidos con microcefalia y 500 casos de personas con el Guillain-Barré”. El gobierno de Brasil propuso: “desplegar a 220.000 soldados por un día en el próximo mes para crear conciencia sobre el virus Zika”, mientras que la Presidenta, Dilma Roseff, anunció en la reciente cumbre del Celac: “una estrategia regional de combate al virus zika”, y anunció una reunión de ministros de Salud del Mercosur el próximo martes en Montevideo. En otras palabras, esos gobiernos, al igual que el resto de América Latina, han reconocido la enfermedad, y están actuando para tratar de contenerla.
En nuestro caso, las autoridades no informan, por ejemplo no publican el Boletín Epidemiológico, ni dan explicaciones sobre prevención y las actividades de control de las enfermedades. El silencio es grotesco. En el caso de Aragua han llegado a informar que estamos en “zona de seguridad y éxito”, repitiendo el guión de la epidemia de Chicungunya, que la negaron aunque todo el mundo tuvo la enfermedad o la padecieron personas cercanas, con muertes que fueron ocultadas. Hoy sabemos de muchos casos sugestivos de Syka clínicamente.
Igual ocurre con la escasez de medicamentos, tanto que el ex-Ministro Henry Ventura afirmó que: “En Venezuela no hay escasez de medicamentos”, cuando todos los que van a las farmacias no consiguen ni marcas ni genéricos; mientras, los pacientes nos informan que no los consiguen y, por si quedara alguna duda, muchos Visitadores Médicos quedaron sin empleo porque no hay fármacos que mercadear. Ahora la nueva Ministra de salud culpa al pueblo de la escasez de medicinas porque para ella no hay escasez de insumos; lo que existe es un "uso no racional del medicamento", sin saber que si fuera cierto lo afirmado por ella de que: “Los venezolanos somos los que consumimos en el mundo el mayor número de medicamentos per cápita”, eso sería por falta de políticas públicas para hacerlo racional y por no ejercer el Ministerio de Salud el rol rector que le corresponde.
En definitiva, es parte de una lamentable “política de estado” la de pretender esconder los problemas o la del “yo no fui”, creyendo que eso desaparece las dificultades. Por eso niegan las muertes por falta de quimio y radio terapia, ocultan la falta de medicamentos e insumos en los hospitales, ni mencionan el incumplimiento de los programas preventivos, se hacen los locos con el retraso en el pago de sueldos y salarios, así como del retraso de las obras de infraestructura anunciados con bombos y platillos. Es la misma política que negaba la inseguridad y afirmaba que solo es una “sensación”, de la que afirma que los presos en las cárceles no tienen armas y son centros de estudios, o el estribillo, solo es eso, de la guerra económica. Después se preguntan por las razones por la que fueron derrotados el 6-D.
Por lo anterior, porque la crisis humanitaria de la salud es totalmente cierta, por lo tanto muchos seguirán enfermando y muriendo, le solicitamos al gobierno que la reconozcan y juntos trabajemos por recuperar la salud y salvar la vida del muchos integrantes del pueblo venezolano.