Marco de referencia
Estamos en el año 2016 e indicadores de toda índole, económicos, políticos, sociales, históricos, y hasta domésticos, destacan la existencia de una gran crisis en la agricultura venezolana, manifestada por la escasez o carestía de los alimentos básicos para cubrir las necesidades mínimas de la población.
Las razones para esa escasez o carestía de alimentos son:
- Tenemos una precaria soberanía alimentaria porque la producción interna de alimentos es sumamente escasa.
- La seguridad alimentaria se hace cada vez más crítica, al no importarse y distribuirse en forma oportuna los alimentos necesarios para cubrir los requerimientos de la población.
- Los programas con los cultivos bandera fracasaron.
La crisis de la agricultura venezolana deriva de una actitud ignorante e indolente manifestada por los gobernantes del socialismo del siglo XXI, por lo tanto ¡¡tiene que ser recuperada!!
Recuperación es:
- Retomar lo que antes se tenía
- Volver a poner en servicio lo que han dejado inservible
- Trabajar para compensar lo que no se hizo
- Volver a un estado de normalidad después de pasar por esa difícil situación.
Todo ello necesario debido a
Indolencia por desinterés de la situación del “campo” venezolano, promoviendo:
- Inseguridad personal y jurídica
- Destrucción o mal uso de los recursos naturales suelos y agua
- Deterioro de la infraestructura de apoyo a la agricultura
- Inutilidad de maquinarias y equipos agrícolas por falta de repuestos y de otros recursos para su mantenimiento
- -Insuficiencia de los insumos básicos para una eficiente producción de los cultivos.
Ignorancia porque es imposible definir acertadas políticas agrícolas si las personas en esas funciones son analfabetas en agricultura y en las ciencias agronómicas.
Algunos ejemplos de esa ignorancia:
- deterioro de los centros de enseñanza e investigación agrícola por los mezquinos aportes presupuestarios a los mismos
- asalto a la infraestructura de esos centros como son estaciones experimentales, invasión del Colegio del Mundo Unido en Ciudad Bolivia, estado Barinas, y amenaza de invasión de la Escuela Agronómica Salesiana en ese mismo estado Barinas.
- destrucción de empresas dedicadas a apoyar la agricultura por medio del suministro de insumos y labores de asistencia técnica
- destrucción de unidades de producción agrícola confiscadas
Unido a todo eso hay que señalar la destrucción de empresas dedicadas a apoyar la agricultura por medio del suministro de insumos y labores de asistencia técnica; y la destrucción de unidades de producción agrícola confiscadas, que al ser pisoteadas por ese Caballo de Atila, su producción ha caído a niveles alarmantes o ha llegado a cero.
La agricultura venezolana, a pesar de su importancia, por muchos años no ha sido considerada prioritaria y la ha devorado nuestra riqueza petrolera. Hoy, cuando la crisis agrícola llega a su máxima expresión, cuando el hambre y la escasez de divisas invaden los estómagos de los venezolanos, no se puede seguir aplazando su recuperación.
Por encima de todas las palabras que se puedan escribir, por encima de todas las recomendaciones que se puedan expresar, por encima de todas las cifras que algunas personas utilizan para señalar la mala alimentación de los venezolanos porque las calorías que ingieren son insuficientes, muchos venezolanos tenemos la esperanza que a nuestra agricultura se le dé la importancia que realmente tiene.
Los problemas que en este documento se considera que están afectando a la agricultura venezolana son:
- La inseguridad personal y jurídica
- El mal uso de los recursos suelo y agua
- El estado actual de la infraestructura de apoyo a la agricultura
- La disponibilidad de maquinarias y equipos agrícolas
- El suministro de insumos básicos para la producción agrícola
- La situación de las instituciones de educación agrícola
- La necesidad de un servicio de extensión agrícola y de asistencia técnica
- La investigación para impulsar la producción agrícola
- La urgencia de propiciar algunos programas de producción comercial en rubros seleccionados: cereales, oleaginosas y azúcar.
He decidido escribir este documento por la certeza y la certidumbre que me dan 50 años de graduado de Ingeniero Agrónomo, los cuales he dedicado al conocimiento de la agricultura venezolana en sus diferentes regiones, estando en posiciones de docencia, de investigación, de extensión agrícola, de asistencia técnica, y como agricultor. Es un escrito orientado hacia la producción vegetal ya que áreas como zootecnia, ciencias forestales, acuicultura y otras, tienen que ser abordadas por los especialistas respectivos.
Por supuesto, éste es un trabajo incompleto, existirán contribuciones adicionales por personas versadas en el arte de la agricultura, o surgirán otras materias de interés que aquí no han sido consideradas, pero este documento es un aporte para la recuperación de nuestra agricultura post socialismo del siglo XXI, que puede servir como papel de trabajo para corregir o ampliar significativamente las diferentes materias presentadas.
Junio 2016