Trump en sus dos papeles

En su empeño narcisista de jugar todos los roles protagónicos del mundo de hoy, el presidente Trump podría estar representado al mismo tiempo dos papeles contradictorios. 

Como hizo N. Chamberlain al creer en las disposiciones de Hitler para la paz en septiembre de 1938, cuando firmó el Acuerdo de Múnich, D. Trump pudiese estar creyendo en las de Putin de hoy. Se trata del rol de Trump como “Pacificador mundial”.

En su segundo rol, Trump juega hoy al ominoso papel que jugó Hitler en agosto de 1939, cuando su canciller Riventropp firmó con el canciller soviético Molotov, el acuerdo para repartirse Polonia. 

Por más que América se haga “de nuevo grande” con la paz pactada por Trump y Putin, no puede ocultarse que ellos dos quieren repartirse Ucrania.

Zelensky y su responsabilidad

Hay varios “polos” en el ejercicio de las responsabilidades de un líder nacional. La sobrevivencia de la nación es uno importantísimo, por supuesto.

Sin embargo, cabe preguntarse si se garantiza la sobrevivencia de la nación dando nacimiento a una era en la que ella es forzada al vasallaje.

Creo que no es opción para Zelensky entregar su país a Putin y Trump para comprar la supervivencia de su patria, porque como lo hacían Stalin y Hitler hace 86 años, Putin y Trump quieren esquilmar y someter a Ucrania sin ninguna reserva. 

Creo que Trump está tan equivocado como estuvo Neville Chamberlain, y estoy convencido de que él y Putin reviven el imperialismo de finales del Siglo XIX.

El mundo parece vivir de nuevo el riesgo de una guerra mundial, porque dos líderes mesiánicos y narcisos sin escrúpulos, quieren resolver su pequeño trato, pero mañana estará cada uno viendo cómo amplía las posibilidades de éxito de su imperio.