Apreciación de la situación política # 154
Al día de hoy han pasado 12 días desde la mañana del 30A cuando el Presidente encargado acompañado con militares y el fundador del partido Voluntad Popular, liberado esa madrugada de su estatus de casa por cárcel por funcionarios del SEBIN, anunciaba al país el inicio de la fase final de la Operación Libertad donde integrantes del alto mando militar y otros funcionarios de alto rango lo reconocerían como Presidente constitucional encargado y, en consecuencia, desconocerían, finalmente, al régimen usurpador.
Ese mismo día se convocó a la sorprendida población a salir a la calle para apoyar el movimiento que desalojaría a los usurpadores del poder. Pero, como ya se sabe, eso no ocurrió y aún para el primero de mayo, la esperada disidencia militar no se produjo, antes, por el contrario, el régimen, ya recuperado de la sorpresa del día anterior, arremetió contra los manifestantes como en sus mejores tiempo para demostrar quien estaba a cargo. Es bueno destacar que la represión la hizo mayormente funcionarios de la policía nacional bolivariana y los colectivos armados y protegidos por esta misma policía y de algunas unidades de la GNB.
Fracasada la operación libertadora, el miércoles 02M, al Presidente encargado no le quedó más argumento que se seguir con su convocatorias a la calle ahora por la represión, heridos y fallecidos y posteriormente por el allanamiento de la inmunidad parlamentaria de varios diputados incluyendo la detención arbitraria del primer vicepresidente de la Asamblea Nacional. La última convocatoria pautada para el pasado sábado 11M lució bastante disminuida en cuanto a participación popular comparada con las anteriores. Es evidente que el fracaso de la operación libertad tuvo sus consecuencias en la motivación de la población opositora.
Pero ¿Realmente fue un fracaso la operación libertad? ¿Es un fracaso del PE y de los que lo apoyaron, incluyendo a los funcionarios del país del norte que no negaron su participación? Depende del cristal con que se mire, como dice el dicho.
Por la información de los medios de comunicación se hizo evidente que hubo conversaciones y acuerdos con funcionarios de alto rango que desconocería al régimen usurpador el 30A o el 01M, eso aún no se ha aclarado, pero eran los días acordados. El hecho que no se produjeran los desconocimientos al régimen en apoyo al PE, es un hecho que no se puede adjudicar al PE y su equipo, sino al incumplimiento de la palabra empeñada de los comprometidos. Algunos han expresado que fue un exceso de “candidez” de los primeros, pero eso también es discutible.
Por un lado se puede argumentar que fue una jugada maestra del régimen para identificar nuevos sediciosos dentro de sus filas lo que justificaría las nuevas detenciones y persecuciones que se produjeron en los últimos días, lo que no es una forma de actuar nueva para regímenes usurpadores como el actual. Pero por otro lado, también es una forma de convencer a la comunidad internacional de que intentar establecer negociaciones con estos personeros usurpadores del poder para llegar a un acuerdo que permita establecer un gobierno de transición democrático, es una suposición que hay que descartar. Quizás es por eso que tanto el Grupo de Lima y el grupo de contacto de la Unión Europea se han mostrado desconcertados en sus propuestas de buscar la vía de negociaciones como forma de lograr restablecer un gobierno democrático en nuestro país.
Desde este punto de vista, no es que se descarte la negociación como método para lograr el cambio político, sino que no es lo mismo negociar con políticos que ejercen el poder autoritariamente por razones ideológicas, que negociar con delincuentes que ejercen el poder para beneficio propio o de las bandas que representan y cuya única negociación posible es saber cuales son la garantías de no terminar presos o en una corte internacional una vez que entreguen el poder. Esta condición debe hacer reflexionar a los representantes de la comunidad internacional y convencerlos que hay que buscar otras opciones de la mesa, de esas que no les gustan a una mayoría de ellos.
Por los momentos ya el PE comisionó a su embajador en el país del norte para iniciar conversaciones con el jefe militar del comando sur, otra opción sobre la mesa que ya le fue ofrecida.
@lesterllopezo 12/05/19