La oposición venezolana debe ocuparse de presentar una alternativa democrática a los venezolanos. Un programa económico moderno, no el mismo ladrillo obsoleto de préstamos con el FMI, y apoyar a los venezolanos a luchar contra la corrupción del gasto fiscal. Estar presente en cada pueblo para conocer sus necesidades y enfocarse en buscar soluciones a los problemas de los venezolanos. No tanto estar tanto en Washington y visitar más a los pueblos de Venezuela. Aunque el oficialismo trate de sacarla del juego democrático, la oposición siempre debe permanecer en el. Lo mismo aplica al oficialismo, no debe estar tanto en alineación con China y Rusia y debe alinearse más respondiendo a las necesidades del pueblo. La oposición debe luchar abiertamente, no en contra de todo lo que haga el presidente Maduro, sino porque sea bueno para Venezuela. Para que Venezuela y Guyana lleguen a acuerdos para compartir las reservas de petróleo, para que Biden libere a la economía de las sanciones económicas, para apoyar el proceso de inversiones que adelanta Maduro en empresas del estado que frenarán la corrupción y presentar un candidato en el 2024 con testigos en cada mesa que sea un puente hacia la transparencia en el manejo de recursos, la paz y la prosperidad. No a la revancha.
En ningún momento la oposición debió recurrir a marchas a Miraflores, ni solicitar sanciones a los EE.UU. que impidan la actividad petrolera. Los controles de cambio y de precios trajo una ruina económica junto a la corrupción en la década del 2010-208, pero la oposición no debió tratar de sacar provecho del malestar social para eliminar al presidente Maduro vía marchas Miraflores y humillarlo. Debió presentar alternativas a los controles en la economía y con paciencia esperar a las elecciones. Para que el oficialismo reconozca los votos de la población hay que evitar amenazas y criminalizar ofreciendo juicios expeditos como lo hizo Ramos Allup al instalar la AN del 2015. Aunque el oficialismo sabotee los resultados como ocurrió en la elección de la AN del 2015 con Delta Amacuro, la oposición debe mantenerse dentro de la Constitución. El juego todo o nada es destructivo para los venezolanos. Tampoco, para enfrentar la corrupción la oposición tenía que matar la economía con sanciones al petróleo. Con trabajo político paciente de largo aliento y siendo demócratas ejemplares se vencen los obstáculos.
Hoy la oposición tiene una nueva oportunidad. La oposición toda debe apoyar con fuerza y con sus electores a Venezuela en el rescate del Esequibo y Citgo. No debe permanecer callada como lo está, ni dejar eso en manos de jueces designados por intereses transnacionales como Poncio Pilates. Hoy deben hacer marchas para defender el Esequibo y a CITGO. Esas marchas saldrán al aire en CNN, Fox y en los medios de todo el mundo para pedir que nos respeten el Esequibo y CITGO. También la oposición hoy debe pedir a EE.UU. que levante las sanciones que impiden reestructurar deudas de la nación y entre otras cosas rescatar Citgo. 
Lo que sucede con CITGO y el Esequibo hoy es un crimen contra los venezolanos, no contra el presidente Maduro. La oposición venezolana toda debe luchar por los intereses de Venezuela y no solo complacer a EE.UU.. EE.UU es una gran potencia con quien debemos aliarnos, pero no entregar nuestros derechos. Aunque algunos de la oposición vivan en ese país con fondos congelados en las cuentas de nuestra nación, la oposición ganará respeto en EE.UU. y en Venezuela si hoy defienden al Esequibo y a CITGO. El presidente Biden busca negociar con el presidente Maduro o hacer leña del árbol caído cuando permite asomar que CITGO sea rematada y el Esequibo arrebatada. EE.UU. es un país que edifica a otras naciones por lo que no podemos conformarnos con la situación actual y debemos todos protestar ante el atropello con que hoy amenaza a Venezuela en el tema CITGO, Esequibo y sanciones petroleras. 
Un juez de Delaware otorgó el lunes a un gran grupo de acreedores de Venezuela derechos para participar en una próxima subasta de Citgo, informa Reuters. El analista Leopoldo Puchi bien reflexiona: “ que los juicios se han desarrollado sin que a Venezuela se le permitiera estar presente y ejercer su derecho a la defensa, a ser escuchada y a presentar pruebas. Si a una de las partes se le niegan estos derechos fundamentales en un juicio, se debe considerar su nulidad, de acuerdo con los principios básicos de justicia. Asimismo, ha estado prohibido que los acreedores lleguen a acuerdos de conciliación con Venezuela. Un alto cargo de Defensa de EEUU visita Guyana en medio de la disputa con Venezuela. La oposición venezolana debe pronunciarse ante estos hechos que merman los derechos y el futuro de Venezuela.

X: @alejandrojsucre

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