El uso indiscriminado de las etiquetas de izquierda y derecha ayudó a vaciarlas de significado. Hoy puede suceder lo mismo con conceptos como autoritarismo, tiranía o dictadura.
Del resquebrajamiento de certezas en las últimas décadas ha surgido un espíritu reaccionario que trasciende las viejas etiquetas de izquierda y derecha.