Muchas empresas consultoras en materia electoral construyen sus afirmaciones sobre la base de una dialéctica. Se atreven a explicar que el oficialismo, ante la aguda crisis económica y social, todavía tiene algunas fortalezas a nivel presidencial.
Entre ellas, la que se deriva del poder del Estado. Pero, a su vez, esta reflejaría ciertas fisuras: se le agotó su tiempo, están a nivel vulnerable, y su capital político estaría respaldado por 3.500.000 votos.
En su momento, los partidos opuestos al gobierno de Nicolás Maduro anunciaron la refundación de la llamada Plataforma Unitaria, como identifican al bloque que enfrenta al madurismo. Orientados, además, a la organización y la realización de la elección primaria de 2023 para seleccionar a un candidato unitario que se presente en la elección presidencial de 2024.
En el complejo escenario político electoral de Venezuela se evidencian estrategias recurrentes que buscan bloquear no sólo el evento de la primaria sino la unidad opositora.
Por ejemplo, la solicitud de impugnación del proceso de primaria de la oposición, por parte de Luis Ratti, un empresario vinculado con el chavismo, ha despertado sospechas y generado diversos debates.
Criterio compartido por la politóloga Ruth Guerrero, quien señala que es probable que se presenten más acciones destinadas a socavar la posible unidad opositora.
«El gobierno y sus aliados están obligados a intentar destruir el instrumento democrático de las primarias, que cuenta con el respaldo de la mayoría de los venezolanos, para elegir a un candidato único. Las inhabilitaciones y el discurso de financiamiento de supuestos candidatos buscan desunir y cuestionar el proceso”, advirtió.
La renuncia de la mayoría de los rectores tomó por sorpresa a más de uno, justo cuando la primaria opositora esperaba su respuesta y apoyo técnico para escoger a su abanderado presidencial.
Son muchos los análisis de esta acción del gobierno de Maduro, visiblemente orquestada entre el sector oficialista de la directiva del CNE y la AN.
Para el politólogo y experto electoral Jesús Castellanos Vásquez «una nueva designación del CNE es un proceso abiertamente inconstitucional e ilegal, pues se irrespeta el lapso de mandato de las autoridades del CNE de siete años».
La decisión de la Comisión Nacional de Primaria de celebrar esta elección de manera autogestionada fue bien recibida por los diversos factores políticos que forman parte del proceso de primaria.
No obstante, el camino estará dinamitado y marcado por dificultades y desafíos. Una primaria exitosa es una mala noticia para el gobierno del presidente Nicolás Maduro que, anticipa, hará lo que esté a su alcance para desequilibrar esta consulta.
Es evidente que Maduro quiere arruinar el proceso de primaria. Públicamente, viene diciendo que la primaria de la oposición no llegará a su final.
Se revela antes de tiempo que le tiene miedo a la primaria. Maduro no quiere que los ciudadanos participen y por eso tiene una estrategia para implosionarla.
La revolución de Maduro es minoría. Esa realidad sería su derrota segura, si el voto se moviera en avalancha. Allí el gran nudo crítico para asegurar su reelección… aun poniendo un espanta votos en el nuevo CNE.
IG: @Hercon44
Correo: hernándezhercon@gmail.com
Síguenos en Twitter: @Hercon44 / @Herconsultores
23dejunio 2023