El comentario de la semana
Ningún municipio de Aragua puede mostrar con mayor contundencia la incapacidad política del PSUV para gobernar el país. Desde que perdiera la Alcaldía, que no el Concejo Municipal, el partido “del gobierno” decidió castigar a sus habitantes mediante un cerco a la gestión del alcalde Delsón Guarate y su equipo, que se ha traducido en la imposibilidad para la recolección de basura como su expresión más visible.
El nombramiento del candidato derrotado como “protector del municipio” supuestamente encargado de velar por las mejores condiciones de vida para sus habitantes, además de mostrar el carácter antidemocrático de ese partido, ratifica que este desgobierno es militarista, lo que ya es traducido por la gente como “mandón” pero incapaz de resolver los problemas que les afecta.
En un momento en el que el país busca una salida pacífica y democrática a la grave crisis por la que atravesamos, a los radicales del PSUV en Aragua, que aparentemente son cada día más una minoría inclusive dentro de ese partido, no se les ocurre otra estrategia para obstaculizar los intentos de solución pacífica que se están proponiendo, que detener y mantener detenido al alcalde Guarate con bases legales muy cuestionables y ahora desconocer la ley que rige al poder municipal, “destituyéndolo” e imponiéndole al municipio como alcalde al presidente de la Cámara Municipal, cuando la responsabilidad han debido asignársela legalmente a un director del equipo ejecutivo del municipio.
Nadie, ni ellos mismos, creen en la validez de la decisión tomada en una reunión de 6 de los 9 miembros del Concejo Municipal, efectuada fuera de su lugar de sesión ordinario y adornada apropiadamente para la “piñata” realizada, pero no les importa, tienen la mayoría de los poderes, inclusive el del ejercicio de la violencia, pretendiendo demostrar que son fuertes y que lo serán para siempre.
La realidad es otra, en números gruesos el 80% del país quiere un cambio de gobierno y eso lo dicen las encuestadores reconocidas e inclusive las que no lo son tanto, pero sobre todo, eso es lo que cada quien expresa y detecta en el entorno donde vive.
El atropello continuado cometido contra los habitantes del Municipio Mario Briceño I. ha sido rechazado por propios y extraños, y ese rechazo se concretará el 26, 27 y 28 del mes de octubre, cuando la inmensa mayoría de los votantes del municipio y de los otros 17 del estado Aragua, conjuntamente con el resto del país, ratifiquemos nuestra solicitud de RR16 de una manera tan contundente que obligue al gobierno a abrir las puertas a una salida democrática, pacífica y electoral que permita reconstruir nuestro país mediante el esfuerzo de todos.
Para llegar allí se requiere movilización tanto conjunta como individual y esta última, puede ser la más efectiva si nos convencemos y convencemos a otros de que es indispensable cambiar de gobierno nacional si en realidad queremos comenzar a vivir en un país distinto, en el que el respeto a las leyes sea el garante de la convivencia ciudadana.
Hacia allá vamos y es una tarea que tenemos que asumir por pequeña que parezca nuestra contribución personal. Mientras tanto, ¡todos somos Mario Briceño!