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El dólar: precio, oferta, demanda e inflación

Opinión
Artículos de opinión
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A finales de la Segunda Guerra Mundial, el dólar de los Estados Unidos de Norte América sustituyó a la libra esterlina como moneda del comercio mundial y conjuntamente con el oro surge como respaldo del resto de las monedas del mundo. Desde entonces se acepta sin discusión el dólar de los EE.UU. y el oro como sustento de las monedas de los países.

En nuestro caso, el único organismo con autorización para emitir dinero es el Banco Central de Venezuela -BCV-, que hasta que llegó Chávez era autónomo e independiente para evitar que nuestro signo monetario tuviera atado a las vicisitudes de la administración ejecutiva y de la política partidista. Pero como hemos dicho, Chávez transformó el ente emisor en una oficina más de Miraflores y esto es tal vez la raíz de los inmensos males de nuestra economía y finanzas, amén de la disparatada y desacertada administración. Si existiese un BCV independiente y autónomo a lo mejor las cosas fueran distintas.

No se debe emitir dinero sin respaldo, es una locura, debe estar afianzado por el dólar o por el oro y tomando muy en cuenta la producción nacional y los precios. Como el BCV está pintado en la pared, solo recibe órdenes del Presidente usurpador y éste cuando se le ocurre ordena tirar billetes y monedas a la calle en la cantidad que le parece, sin ningún respeto a la relación que debe existir con el dólar, el oro, la producción y los precios del mercado, es decir, como algunos lo han calificado, " dinero electrónico" sin respaldo alguno, es lo que se conoce como dinero inorgánico. El dinero inorgánico es abono altamente fertilizante donde florece la inflación (bien señalada como el cáncer de la economía) y este régimen aún no lo entiende a pesar de ser las primeras lecciones de economía y finanzas. Emitir dinero a la bartola para crear sensación de abundancia es una barbaridad cuyas terribles consecuencias se dejan sentir muy profundamente en la encomia del país. Sino se respetan las leyes de la economía y particularmente las monetarias de seguro se cae en un abismo como en el que estamos. Salir de él es posible, necesario y urgente pero será con ajustes y reajustes que generalmente exigen alta cuota de comprensión a todos por los amargos que son .

Algunas normas de la ciencia económica y del mercado están contenidas en la elemental "Ley de la oferta y la demanda". Ella indica que la oferta es inversamente proporcional a los precios, es decir, a mayor oferta menor precio y a menor oferta mayor precio, mientras que la demanda es directamente proporcional, a mayor demanda mayor precio y a menor bajos precios. Como se puede deducir la producción de bienes, la productividad y la competitividad en precio y calidad tienen una alta relevancia en esta relación y por ello, hasta hoy, es el mecanismo de controlar con eficacia la inflación. Si tenemos alta producción, productividad y somos competitivos, tanto que se satisfaga el reclamo interno y si es posible existan excedentes para exportar, la inflación se mantiene controlada y se aleja, además los precios en el mercado se estabilizan adecuadamente. Este tema el régimen lo ha manejado desastrosamente mal.

El dinero es un bien y como tal está sujeto a las leyes de la economía y muy particularmente a las monetarias. Hemos visto en los últimos días un crecimiento brutal del costo del dólar, ¿por qué?

Entre otras variables pienso por la bajísima producción de petróleo (menos de 500.000 barriles diarios) y el descenso estrepitoso de su precio, pero también por el cerco y persecución al narcotráfico que tienen montado los EE.UU. y sus aliados en los límites de nuestras costas y en el espacio aéreo. Estas circunstancias han producido que haya menos "verdes" en circulación y como hemos dicho que a menor oferta mayor precio, ahí puede estar la explicación, al lado de otras barbaridades cometidas. Esto se agudiza porque nadie tiene confianza en el bolívar (lo pulverizaron) y no existe ningún incentivo al ahorro (en tiempo de inflación nadie ahorra en moneda local) y entonces la manera de más o menos cuidar lo que se tiene es comprando divisas, en este caso dólares, para mantener en alguna medida la capacidad adquisitiva y ser previsivo, es decir, aumenta la demanda y el precio sube. Se dan las dos variables para el aumento del dólar, menor oferta y mayor demanda. A lo anterior se le suma, para mayor incidencia, el descenso registrado este mes de las remesas que venezolanos en el exterior envían a sus familiares y amigos residenciados en el país que colabora en la contracción de la oferta.

Se requiere de urgencia replantear todo el país pero de manera muy particular el manejo del dinero, la política monetaria, sus instituciones y gobernanza, el funcionamiento y competencias del BCV y todo ello pasa por un nuevo gobierno distinto y mejor.

Dijo el Papa Pío Xl en su encíclica Cuadragésimo Anno "Dominio ejercido de la manera más tiránica por aquellos que, teniendo en sus manos el dinero se apoderan también de las finanzas...". Este régimen dispone del dinero, aunque ahora menos, de la renta petrolera y se apoderaron hace tiempo de las finanzas y manejan el BCV a su antojo que siempre es equivocado, es su caja chica o grande.

Lo que hemos señalado es muy importante, aunque no es todo el problema. Nuestra problemática no es solamente económica-financiera, es también con mucha intensidad social, cultural, política y moral. Estamos en presencia de una grave crisis integral que afecta negativamente al hombre, a todos los hombres y al país. Esta dolorosa situación reclama la UNIÓN de nosotros y de las organizaciones de toda naturaleza para superarla cuanto antes que debe ser YA. El tiempo que inexorablemente transcurre sin la unión nuestra se lo damos al régimen para que continúe con el deterioro de la nación.

YA ESTÁ BUENO YA.