Observando, estudiando y analizando, tomando muy en cuenta los diversos estudios sobre la opinión pública, me permito expresar opinión de como veo la situación actual.
Un grupo de Senadores de los Estados Unidos le recomendó al Presidente Biden que en el lamentable caso venezolano aplicara sanciones personales que pueden ser de mayores efectos que las generales o nacionales.
En mis muchas notas críticas a este régimen me encargo de señalar errores, violaciones y barbaridades inconcebibles y algunos que me leen me han dicho que los errores que señalo también fueron cometidos en el pasado, a ellos les he dicho lo que hoy reitero: los errores de ayer nunca pueden justificar los de hoy.
El gobierno de los EE.UU. se pasea últimamente, al lado de las sanciones a la República, efectuar otras pero dirigidas a individualidades (personales) que algunos estiman más efectivas que las generales.
La Constitución nacional y la ley establecen claramente, como requisito para que el Presidente en ejercicio opte por su reelección, que antes de inscribirse ante el Consejo Nacional Electoral se separe de sus funciones, por lo menos hasta el día que se declare electo el nuevo Presidente.
Después de la flagrante violación de nuestra Constitución por parte de este régimen, de la monstruosidad cometida en los últimos días y de pretender manejarnos a su antojo, debemos indefectiblemente atender y desenvolvernos con mucha inteligencia en la realidad y en ella las circunstancias se deben tomar muy en cuenta y todo parece, obligan.
Tenemos la tendencia de no aceptar y menos recibir a quien rectifica y se viene para nuestro lado, generalmente lo vemos con sospecha y mucho cuidado, cuando no lo rechazamos de plano.