Pasar al contenido principal

La locura de los billetes

Opinión
Artículos de opinión
Artículos de opinión
Tiempo de lectura: 3 min.

Visión y Análisis

Aprovechando el momento no puedo dejar de mencionar el decreto del 11 de diciembre, según el cual, en 72 horas se inicia el proceso, que dura 10 días, para sacar de circulación los billetes de cien bolívares.

El presidente Maduro quiere convencernos de que la inclusión de billetes de quinientos, mil, dos mil diez mil y veinte mil bolívares NO es causada por la total incompetencia del gobierno en materia económica y financiera sino por una supuesta conspiración internacional y que el decreto que solo otorga 10 días para sacar de circulación el billete de cien bolívares, el de mayor circulación en la actualidad va a dar un "golpe de gracia" a los integrantes de esa supuesta conspiración.

Quiero recordar al público en general que el deplorable manejo gubernamental de la política económica y cambiaria durante los últimos 18 años, no sabemos si por incompetencia, por ceguera ideológica o simplemente por un plan corrupto para enriquecerse, ha llevado a la destrucción del aparato productivo nacional y ha creado una espiral inflacionaria que nos ha convertido en el país con la mayor inflación del mundo durante varios años consecutivos, que se estima cercana al 500%, según cifras oficiales y cerca del 700% según fuentes no oficiales, esta inflación dejó atrás el cono monetario actual, con el cual, para pagar un simple mercado son necesarios doscientos (200) billetes de la más alta denominación, lo entorpece hasta las más simples operaciones mercantiles. Esa es la verdadera razón para los nuevos billetes, el mal manejo de la economía, no una hipotética conspiración internacional contra el papel moneda venezolano.

Y los más grave, es que cuando por fin se vislumbra la emisión de nuevos billetes, que pueden aliviar el problema del pago en efectivo, aclarando que no mejora en nada la economía del país, viene otro manejo deficiente, en lugar de hacer un proceso de reemplazo paulatino y ordenado del papel moneda en circulación se lanza un decreto que enturbia esta operación al ordenar un cambio súbito y con una celeridad que exige una eficiencia a la que no nos tiene acostumbrada la administración pública actual. El decreto en cuestión establece

En principio parece que nadie le ha dicho a nuestro brillante presidente que el próximo lunes 12 de diciembre es feriado bancario. Tampoco nadie le ha informado que el proceso de incorporar el nuevo cono monetario en 2008 duró UN AÑO, ni que existen más de DOS MIL MILLONES de billetes de cien bolívares en circulación en el mercado nacional y que difícilmente se podrá realizar su reemplazo en 10 días en las dos únicas agencias del Banco Central de Venezuela. ¿Los encargados de retirar el billete de 100 serán los mismo encargados que tienen meses tratando de poner en circulación los nuevos elementos del cono monetario sin lograrlo?

Resulta insensato, por decir lo menos, sacar de circulación un billete cuando aún no se ha puesto en circulación el papel moneda que lo reemplaza. Este inconsciente decreto puede generar ruido en un proceso que debería, para la salud de la economía nacional, llevarse a cabo con la mayor normalidad, tranquilidad y calma posible.

También se generan dudas acerca de lo que pasara luego de la recogida de los billetes de 100, la sociedad quedará prácticamente sin efectivo, ya que los nuevos billetes aún no han estrado en circulación, los no bancarizados quedan sin poder hacer operaciones; el intercambio comercial en la frontera con Colombia y Brasil queda en suspenso, porque los comerciantes de esos países ya no aceptan el billete en vías de extinción, se agrava la escasez, levemente aliviada por productos provenientes de esos países; se genera una duda ¿Una vez que este recogido todo el efectivo se producirá un corralito financiero bancario?

¿Será pura insensatez, será una maniobra mediática o será un escenario perfecto para el lavado de dinero? Nadie lo sabe. Definitivamente aprobar un Decreto de Emergencia Financiera a este gobierno es como darle una ametralladora a un mono, nadie sabe lo que va a pasar, pero es sumamente peligroso.

12 de diciembre de 2016