Uno de los hechos que ha llamado poderosamente la atención de los televidentes aficionados al futbol ha sido la presencia mayoritaria de empresas chinas como patrocinantes de la Eurocopa 2024. El dominio publicitario en los carteles de los estadios de Alipay, BYD, AliExpress y Vivo empresas propiedad de la plataforma comercial global china Alibaba, es total. Estos patrocinios plantean serias preocupaciones y ponen en duda la credibilidad y los estándares éticos de la Federación Internacional de Futbol Asociado FIFA y de la Unión Europea de Futbol Asociado UEFA ya que, los referidos patrocinadores están vinculados a una amplia gama de cuestiones polémicas, como acusaciones de abusos laborales masivos contra el grupo étnico de los uigures, contenido pornográfico para menores, subvenciones ilegales, interferencia política y violaciones de derechos humanos fundamentales. Esto no es sólo un juego: es una intersección de alto riesgo entre deportes, política y derechos humanos, donde la integridad de los deportes choca con graves cuestiones éticas.
Si bien las federaciones deportivas internacionales se han comprometido durante mucho tiempo con regímenes autocráticos y han aceptado patrocinios de dichos países, la tendencia se ha intensificado a medida que un número cada vez mayor de patrocinadores de fuera de Europa ingresan a los deportes europeos. La Eurocopa 2024 en curso es un ejemplo de ello, con una parte importante de patrocinadores provenientes de China, junto con entidades estatales de Qatar como Qatar Airways y Visit Qatar. El evento emblemático de la UEFA, por lo tanto, parece menos europeo en el lado del patrocinio y comprometido con los regímenes autocráticos.
El 27 de marzo de 2024, la UEFA anunció a AliExpress como socio oficial de la UEFA EURO 2024 , proporcionando a la plataforma de comercio electrónico china una exposición comercial privilegiada al mundo y una oportunidad única de llegar al mercado europeo a pesar del informe de la Comisión de la Unión Europea en el que se señala a la empresa por incumplir sus propios términos de servicio, lo que plantea riesgos para la salud de los consumidores al vender medicamentos y alimentos falsos, así como suplementos dietéticos y el uso de material pornográfico en la plataforma permitiendo que menores accedan al material.
Alibaba, la empresa matriz de Alipay y AliExpress, ofrecía a sus clientes software de reconocimiento facial que era capaz de identificar minorías étnicas y era específicamente creado para buscar uigures. El gobierno chino ha detenido por la fuerza a cientos de miles de uigures y otros en campos de adoctrinamiento bajo la apariencia de una campaña antiterrorista, y el reconocimiento facial y la vigilancia desempeñaron un papel central en este sistema opresivo. El informe detalla detenciones arbitrarias masivas, torturas, vigilancia masiva, borrado cultural y religioso, separaciones familiares, trabajos forzados y violencia sexual contra los uigures y otros musulmanes turcos.
Alipay enfrentó un importante escrutinio por acusaciones de que su software se utilizó para imponer cuarentenas estrictas a la población china. Un análisis del software reveló que no solo evaluaba el riesgo de contagio, sino que también compartía datos con la policía y los transmitía a las autoridades, sentando así un precedente preocupante para el control social automatizado.
También existen vínculos entre algunos patrocinadores de la EURO 2024 y la práctica del trabajo forzoso en China. Según un informe de marzo de 2020 del Instituto Australiano de Política Estratégica (ASPI) , el gobierno chino obliga a miles de uigures a realizar trabajos forzados en fábricas de todo el país. El informe, 'Uigures en venta', revela que destacadas marcas mundiales de los sectores de la confección, la tecnología y la automoción están implicadas.
Vivo, una empresa tecnológica multinacional china y patrocinadora de la EURO 2024, se encuentra entre quienes supuestamente se benefician directa o indirectamente del uso de trabajadores uigures.
BYD, un importante fabricante chino de vehículos eléctricos y patrocinador de la EURO 2024, también ha sido implicado en el uso de aluminio fabricado mediante trabajo forzoso uigur, según un informe de febrero de 2024 de Human Rights Watch.
La penetración de la empresa china Alibaba no se detiene en el futbol europeo, sino que, avanza progresivamente y ha logrado incursionar en el olimpismo al cerrar una negociación con las autoridades del Comité Olímpico Internacional para ser el patrocinador oficial y de paso solicitar que sus juegos electrónicos pasen a ser “deporte” oficial en los juegos olímpicos. Ese acuerdo, aseguran ronda en más de 100 millones de dólares por cada ciclo olímpico.
El lado oscuro de la Eurocopa deja al descubierto que los intereses económicos de las federaciones deportivas internacionales y el comité olímpico son contrarios a los valores éticos y morales al actuar de manera cómplice con regímenes autocráticos y empresas violatorias de los Derechos Humanos promotoras de pornografía, trabajo forzado, represión, enriquecimiento ilícito y persecución a grupos étnicos.