AL BORDE DEL ABISMO

Estamos a las puertas, al borde de un abismo, de un precipicio de gran profundidad sin que conozcamos el fondo ni dónde se encuentra, pero sabemos que ese fondo es lo peor de lo peor, es una calamidad que puede ser insalvable. Este régimen lo que recibió bien lo transformó en mal y lo que estaba mal lo empeoró. Ninguna de las tantas empresas expropiadas en manos del Estado está funcionando, a todas las quebraron y las robaron y las pocas que aún quedan abiertas están al borde del cierre definitivo, tal vez Kellogs de Venezuela, que era de capital creo estadounidense y que está establecida en Maracay, Estado Aragua, está funcionando con serios problemas administrativos, a la mitad de la producción de antes y con inmensa desmejora de la calidad. Me informan que no se autofinancia y que el régimen debe subsidiar mensualmente.

Todas las haciendas, fincas y tierras expropiadas en pleno proceso productivo y con mucha prosperidad y futuro, ahora son monte y culebras. Agroisleña, que era la empresa más importante del país en atención integral al agro, cuyo centro administrativo estaba en Aragua, después de expropiada la llaman agro patria, prácticamente no existe y así podemos seguir citando ejemplos del mismo corte, lo recibieron bien y lo destrozaron y quebraron todo.

El país se está cayendo a pedazos ante nuestra cara y no tomamos medidas correctivas definitivas y quien o quienes lo están haciendo salgan de dónde están. Debemos actuar cuanto antes, sabemos y sentimos que hoy estamos muy mal, pero podemos estar peor sino le ponemos coto cuanto antes a este desastre. Al fondo del abismo se le conoce cuando llegamos a él y si eso llega a ocurrir, Dios nos ampare, es porque el país ha desaparecido y nosotros al borde de la misma suerte.

Se requiere con urgente necesidad acciones concretas para sacar este oprobioso y totalitario régimen que es el causante de todos nuestros males y esas acciones bien pueden ser tomar las calles del país multitudinariamente y de manera organizada y no regresar hasta lograr el objetivo que es salir de lo que tenemos. Este régimen no aguanta a dos millones de personas en las calles pidiendo su salida, corren o se encaraman y sabemos correrán. Si por las buenas, diálogo concertado, no encontramos salida, hay que necesariamente recurrir a los hechos que deben ser contundentes y definitivos. Organizar esa manifestación popular es perfectamente posible, falta que quienes deseamos cambio radical ya nos UNAMOS. Empecemos entonces a apartar las diferencia, que por muy importantes son subalternas ante el interés nacional y trabajemos por lograr la UNIÓN que es el camino adecuado, efectivo y correcto.

La estrepitosa caída debemos detenerla ya, porque sino cuando despertemos podemos estar en el fondo que no conocemos pero es lo peor de lo peor

18 de abril 2023

8 DÍAS DESPUÉS

Jesús resucitado se les aparece a sus discípulos y les dice: “La Paz sea con ustedes”, ellos asombrados y alarmados se llenan de felicidad y regocijo y después de tocarlo y hablarle, comentan entre ellos, efectivamente es el hijo de Dios, el Enviado, el Mesías esperado. Nos dijo que al tercer día de su muerte resucitaría y hoy está entre nosotros. Tomás, que no estaba cuando apareció Jesús, llegó y sus compañeros le contaron lo ocurrido, entonces Tomás les dijo, no creo en eso, ello es quizás posible por el inmenso amor que ustedes le tenían y tienen al Maestro y eso dispara la imaginación. Creeré en lo que me han contado cuando lo vea, toque, hable con Él, vea las heridas de los clavos en sus manos y pies y meta mi mano en la herida de su costado.

8 días después, Jesús vuelve a ellos y llama a Tomás y le dice, aquí estoy, me ves y puedes hablarme y tocarme, además ve mis heridas en manos y pies que me dejaron los clavos y mete tu mano en la herida de mi costado, así lo hizo Tomás y de inmediato se arrodilló ante Jesús y le dijo, sin lugar a dudas eres el hijo de Dios, el Mesías que esperábamos, Jesús le respondió: “Bienaventurados los que creen sin tocar y ver, porque de ellos es el reino de los cielos”.

“Ver para creer” es muy propio de nosotros, que además está acompañado de “no creer en pajarito preñado”. Vivimos un mundo materializado con grave descuido de lo espiritual y trascendente donde todo es posible, hasta la resurrección que efectivamente y sin duda alguna existió en Jesús, solo nos “acordamos de Santaa Bárbara cuando llueve”.

Para ver y sobre todo lo que se quiere ver, es necesario y fundamental hacer algo o mucho, depende de lo que se quiera. Si queremos ver una Venezuela próspera, solidaria, con felicidad y bienestar general es necesario luchar y luchar mucho hasta alcanzarla, entregar toda nuestra voluntad y coraje para lograrla. Si somos descuidados en lo espiritual, no creo lo seamos en lo material, porque lo sentimos y vivimos a diario: hambre; desempleo; servicios públicos colapsados; inseguridad pública, personal y de bienes; creciente y desbordante corrupción en las esferas del régimen totalitario que aún tenemos; inflación, creada por este régimen, que nos empobrece a todos y ante todo este desastre estamos en la obligación impostergable e inaplazable de cambiarlo radicalmente cuanto antes.

Esta noche tan obscura se ha hecho muy larga y tenebrosa y es urgente y necesario empujar con toda la fuerza para que sus horas transcurran lo más rápido posible, para salir de las tinieblas y ver el amanecer luminoso tan ansiado por todos, cualquier parada en ese empuje puede ser, aún sin querer, colaboración con lo que tenemos.

Quienes creemos sin ver ni tocar, le imploramos al Todopoderoso nos ilumine en la consecución del camino que nos conduzca a la UNIÓN de todos quienes queremos cambio radical cuanto antes y que esté a nuestro lado en la seria, ardua pero apasionante tarea de refundar la Republica. Sabemos que para que Él nos ayude, primero debemos ayudarnos nosotros, no esperemos más y empecemos desde ya, después puede ser tarde.

17 de abril 2023

PICAROS

La picardía es la habilidad para que no se vea o no se sepa lo que se hace o para sacar provecho de alguna situación. También es astucia, viveza, disimulo y engaño. Generalmente usamos el término pícaro para aplicárselo a los niños cuando cometen travesuras de poca importancia con intención de divertirse. Pero vayamos a la acepción de la habilidad para sacar provecho de una situación con viveza, disimulo y engaño. Aceptando esta definición podemos afirmar que este régimen está lleno de pícaros, que es una palabra suave cuando lo que se quiere decir es ladrones. Se valen de la situación de detentar una posición pública para de inmediato averiguar con viveza cómo se saca provecho personal de esa posición, de una manera solitaria o en compañía de iguales. Como todavía hay tanto para repartir, generalmente se asocian para robar y encubrirse unos a otros, quien se sale del carril es de inmediato sacrificado.

El pícaro se ufana de su habilidad y la utiliza en todas las esferas de la vida, siempre con el cuidado de no ser descubierto. Pero, como dijo Luis Herrera Campíns, “la tos y los reales no se pueden esconder y generalmente se exteriorizan” y todo se sabe. Así que en breve tiempo nos percatamos como tan drásticamente cambia el estatus del ladrón, ayer solo tenía para vivir modestamente y ahora nada en su fortuna mal habida contada en cientos de millones de dólares y tiene el descaro ofensivo de estrujar su riqueza sucia en el rostro de los demás, porque piensa que el dinero le da posición sobresaliente y por desgracia y con mucho lamento existen gente que le rinden pleitesía, reconocimiento y es invitado a los eventos más altos de la sociedad donde se desenvuelve. Esta complicidad con la corrupción es propia de una sociedad que perdió su capacidad sancionadora y prefiere, por desgracia, bailar en la fiesta del corrupto y bailar a su son. Una sociedad así contribuye a crear un sindicato, cada vez mayor en cantidad, de delincuentes que se entienden para cometer los más aberrantes desafueros y si el tiempo pasa y no se hace nada, lo posible es que la sociedad en su conjunto se prostituya.

La vieja canción española que habla de “la chica del 17 ¿de dónde saca tanto como destaca?, luego apareció otra canción, que en respuesta a la pregunta decía “prostitución y corrupción son la solución”.

Un pueblo prostituido tiende a desaparecer y lo único que lo puede parar es la educación, los valores y elevados principios éticos y ciudadanos. La corrupción dejémosla al régimen que es el lodo donde ellos se mueven, a nosotros nos corresponde la educación, la ética y valores trascendentes que debemos conservar para siempre, porque es garantía de un futuro muy distinto y mucho mejor. Tenemos el ineludible e impostergable deber de entregar a las próximas generaciones un país donde sea posible soñar con la esperanza de ver realizados los sueños.

16 de abril 2023

MÁS SOBRE LA SANCIÓN SOCIAL

Cuando una persona felicita, halaga, reconoce e invita a su casa a las mejores reuniones a un delincuente ampliamente conocido o en el menor de los casos solo por él, que se sabe ha robado y que su fortuna, que restriega en la cara de todos, es producto del latrocinio, se está haciendo partícipe de sus fechorías y avala su comportamiento. No es que no hablemos con delincuentes, se debe hacerse para tratar de sacarlo de ese putrefacto mundo y orientarlo, pero nunca para festejarlo y decirle se le aprecia solo por tener dinero, que se sabe es robado.

Ante la delincuencia, llámese robo o no, no deben existir puntos intermedios, medias tintas o indiferencia, se está con ella o en su contra y se combate con firmeza y de frente. Cada quien en la vida toma un camino para desenvolverse y cumplir su ciclo terrenal. Ese camino puede ser bueno o malo, todo depende de los valores y principios, de la ética y la moral que se tengan y ello está íntimamente relacionado con la crianza familiar y la compañía que se tenga. Si la familia está bien estructurada y se mantiene unida con amor y respeto, lo seguro es que allí crezcan jóvenes buenos ciudadanos y de bien; si al contrario la familia está descompuesta y desarticulada y las cabezas son de mal comportamiento, lo posible es que se desarrollen hijos descompuestos con graves problemas de conducta.

Lo que no es admisible es elogiar, felicitar y hasta hacer reconocimientos al ladrón por la simple y deplorable razón de tener dinero que sabemos mal habido.

Pedro quien era mesonero y le decían en el barrio El Gato, de repente se transformó en millonario en dólares y entonces le empezaron a decir Don Pedro y hasta doctor, por él solo hacho de tener dinero, que todos sabían que los millones eran producto de la corrupción, Quien concibe el dinero como parámetro para su juicio es sin valores propenso a cualquier fechoría y por supuesto vacío por dentro sin valores ni principios adecuados.

El pueblo ve, observa, sabe y por ello debe tener una calificación del comportamiento de los demás y ese juicio debe ser en atención a principios éticos, morales y los más elevados valores ciudadanos. Esa capacidad popular no debe ser pasiva y menos estar muerta, debe ser permanentemente activa y vigilante, porque si no todos estaríamos paralizados o muertos. Es necesario y fundamental que la sociedad ejerza su capacidad de censura y también, cuando es merecido, de premio y reconocimiento, es un buen camino para lograr buenos y ejemplares ciudadanos.

Si tengo real, valgo; sino tengo no. Así piensa el materialista sin principios y sin creencia en lo espiritual, elevado y trascendente.

Por último, la tolerancia es bueno practicarla y tenerla siempre presente, pues ella nos permite desenvolvernos en conjunto con nuestras diferencias y deficiencias, pero ella, la tolerancia, no debe operar con el delincuente ladrón porque nos estaríamos haciendo partícipe de sus fechorías, al contrario debemos censurarlo frontal y severamente.

Los pueblos educados y de buenos modales y comportamiento, logran con relativa rapidez su progreso y bienestar con bases sólidas y estables. Tratémoslo nosotros.

15 de abril 2023