
Como la guerra, además de ausencia de las características que les son propias, supone de la existencia de bienestar y felicidad colectivas , para afirmar con propiedad que no tenemos guerra y disfrutamos de paz; la libertad tampoco solo es ausencia de persecuciones y encarcelamientos arbitrarios, también supone vivir como Dios manda, con un mínimo de nuestras necesidades materiales resueltas para vivir como humanos, porque de lo contrario somos presos de nuestras necesidades, negaciones y circunstancias. En consecuencia Libertad es desenvolverse sin apremios por carecer de lo básico para vivir con bienestar. El estado de necesidad conspira contra la libertad y nos coloca en un estado de desesperación y ansiedad que constriñen nuestro normal modo de desenvolvernos y la desesperación y la ansiedad nos puede llegar a paralizar, en casos de mucha gravedad, y llegar a una situación dramática extrema de morir por inanición.
Un pueblo con más del 70% con pobreza y hambre con el agravante que más de la mitad de ese porcentaje está en situación de gravedad extrema e inmensamente critica, es un pueblo que carece de libertad y ello no es admisible ni tolerable. La lucha que adelantamos es para superar cuanto antes esa amarga situación que por desgracia confrontamos y sufrimos. Esa lucha es incesante, continúa e ilimitada y debemos darla mientras exista un ser humano en pobreza y con hambre, que es la negación de los derechos fundamentales de la vida.
La lucha es por todos, pero privilegiadamente debe ser por resolver las inmensas necesidades de los más pobres, necesitados y vulnerables. A ellos debemos dedicar primordialmente esta lucha que necesariamente debe emprender primero la clase dirigente, que se aboca a lograr cuanto antes superar las vicisitudes señaladas o vendrá un huracán social que se llevará todo lo que se encuentre a su paso y que será de consecuencias impredecibles.
Cuando no existe Libertad estamos todos desafiados y debemos corresponder a él con voluntad y fuerza indetenibles
La paz y la libertad suponen, además de las características que les son propias, bienestar y felicidad generales que debemos conquistar cuanto antes, mañana puede ser tarde.
Tenemos derecho, que debemos conquistar, a vivir sin guerra, en paz y libertad plenas.