El año 2019 será un mejor año para la economía venezolana, aun dentro del delicadísimo momento constitucional que vive la nación, donde espero que el país retome el hilo constitucional. No obstante siento optimismo para los próximos años de la nación.
La razón del optimismo es porque creo que ha surgido dentro del chavismo un reconocimiento de la importancia del empresariado nacional. Hoy en la misma ANC, en su seno hay convencimiento de la importancia de la libre oferta y demanda en lo económico. Ya un ciclo llega a su fin.
La producción de Pdvsa
Haber destruido la producción de Pdvsa, haber usado los ingresos para la corrupción para comprar propiedades a título personal en el exterior y no para crear infraestructura y autopistas para conectar a toda la nación y hacer viable los emprendimientos agrícolas, mineros, energéticos, turísticos, manufactureros, haber importado productos de consumo por funcionarios públicos a tasa de cambio preferencial para evitar comprar al aparato productivo privado, haber expropiado y colapsado las empresas expropiadas, haber creado empresas de producción social y cooperativas que restan recursos y no suman, ha llegado a su fin.
Hacia otras naciones
En este festín colaboró gran parte de la población. Algunos huyendo hacia otras naciones donde el trabajo y la creatividad valga más que la conexión con un funcionario público, otros protestando con guarimbas y no con propuestas.
Unos más otros menos, hemos podido hacer un mejor trabajo convenciendo al gobierno de que su modelo económico era una aberración histórica.
Tiempos mejores
Muchos venezolanos de trabajo siguieron en sus empresas hasta esperar un mejor tiempo. Pero las obras de infraestructura inconclusas producto de la corrupción, las arcas vacías del Estado sobreendeudado, la población en los caseríos del país sin trabajo y sin comida aún rodeados de tierras fértiles, la falta de electricidad en un país de emporio energético, la caída de la producción petrolera en medio de las reservas probadas más altas del mundo; ha hecho unificar criterios por sí mismo acerca de la importancia del sector privado y del empresario para el desarrollo del país.
Economía de mercado
Ya hasta en la misma ANC, se está hablando de nada de comunismo sino economía de mercado, libertad de oferta y demanda. Luego de la experiencia de los controles de precios y de cambio la economía venezolana ha comenzado a abastecerse de su propia producción en el último semestre del 2018. La mayor flexibilidad de precios por parte del gobierno para evitar la escasez, ha tenido un impacto muy positivo en los últimos meses.
Sin embargo, el ajuste de precios ha sido muy cruel para la población debido a que no es acompañado aún con masivas inversiones del sector privado. La falta de inversión privada impide el empleo y el aumento del poder adquisitivo.
Saneamiento
El gobierno debe emprender sin demora un plan de saneamiento de las empresas del Estado, un plan de incentivos a los funcionarios públicos para que sean eficientes y terminar de definir un sistema cambiario claro y transparente.
Debe usar la liquidez en gasto fiscal productivo y crear condiciones de seguridad jurídica y personal para que la población y los emprendedores se embarquen en un masivo y torrencial proceso de inversiones en todos los sectores de la economía nacional.
@alejanrojsucre