Borrador para el debate
El contexto
Los conflictos que actualmente desarrollan los trabajadores de sectores fundamentales en la vida del país, tales como: salud, electricidad y universidades, son la expresión concreta de la manera como estos se han planteado enfrentar la grave situación de penurias, de todo tipo, que están padeciendo a causa de los efectos de la agudización de la crisis económica, política y social que desde hace varias décadas agobia a los venezolanos. La exigencia de incrementos salariales, respeto y actualización de las contrataciones colectivas, el reconocimiento a sus organizaciones gremiales y sindicales, y el cese a la represión, a la criminalización de sus luchas y la libertad de sus dirigentes encarcelados, junto a los reclamos por medidas inmediatas para atender el colapso de los servicios públicos que les corresponde prestar; son entre otros, los elementos comunes que han motivado la movilización de los distintos gremios.
A pesar de los altibajos que se han presentado y las amenazas y agresiones que han tenido que soportar, los trabajadores han permanecido firmes en sus planteamientos; y sus luchas han ido subiendo de nivel hasta hacerse de carácter nacional y haber pasado a ejecutar acciones de mayor envergadura, cada vez más combativas y contundentes. Sin embargo, aún persisten elementos que obstaculizan los procesos de fortalecimiento de la unidad, de la acumulación de fuerzas y de elevación de los niveles de comprensión sobre el significado y la trascendencia que en los actuales momentos adquieren estos conflictos. El triunfo o la derrota de uno o de todos ellos, va a tener importantísimos efectos que pueden ser favorables o desfavorables, según sea el resultado, no solo hacia los trabajadores de los mencionados sectores; sino hacia las luchas que libran hoy todos los trabajadores y el pueblo venezolano en general.
Entre los elementos negativos que están presentes, podemos citar:
1. Las disputas y contradicciones existentes entre algunas organizaciones y dirigentes.- Cuando se anteponen los intereses particulares por encima de los intereses colectivos y superiores de los asalariados, se genera división, escepticismo y debilitamiento de las luchas. Viene al caso citar, sólo como uno de otros muchos ejemplos, el episodio reseñado en el artículo: Conflicto del sector salud va camino a la radicalización (anexo). En él se puede apreciar claramente, que mientras quienes pretenden fungir como dirigentes dirimen sus contradicciones públicamente, las bases de trabajadores de los diferentes gremios se unen de manera espontánea y natural en las acciones de protesta; sin esperar la autorización o el consentimiento de las cúpulas. Es muy importante que las relaciones entre las bases y sus dirigentes no se hagan contradictorias; sino todo lo contrario, es muy necesario que estas se mantengan de manera armónica y consecuente, de acuerdo al ejercicio permanente de prácticas democráticas.
2. Las visiones que se empeñan en mantener el conflicto de cada sector aislado de los demás.- Para el Estado-patrón, significa una gran ventaja que los trabajadores de cada sector presenten sus demandas y luchen por separado; pues, esto le permite desarrollar con mayor libertad sus demagógicas estrategias de jugar al desgaste, de presentar propuestas engañosas, de hacer trabajo divisionista y fraccional, de hostigar, criminalizar y reprimir las protestas y encarcelar a los dirigentes con la finalidad de intentar derrotarlos al detal, uno a uno. Para los trabajadores, la unidad, la organización y la articulación de sus luchas se traduce en mayor fortaleza y capacidad para torcerle el brazo al gobierno empeñado en desconocer sus derechos y mantenerlos condenados al hambre y a la miseria. Las visiones sectarias, por tanto, no contribuyen al logro de los objetivos del movimiento en su conjunto y fortalecen las intenciones del régimen imperante.
Nuestro aporte
Es así, que como ciudadanos venezolanos, residentes en el estado Aragua, conscientes de la situación descrita y, en tal sentido, seriamente interesados en que la clase trabajadora resulte victoriosa en los conflictos presentes, nos hemos agrupado para contribuir de manera colectiva a la unidad, a la solidaridad, al apoyo y a la correcta orientación y articulación de sus luchas, que son también nuestras luchas; sin pretender, en ningún momento, suplantar ni sustituir el papel que le corresponde cumplir a los trabajadores y a sus organizaciones propias. Quienes constituimos esta agrupación, que aún carece de denominación, provenimos de distintos sectores sociales; y somos, individualmente, integrantes o no de organizaciones gremiales y sindicales, militantes o no de partidos políticos o de cualquier otra organización de carácter social; no obstante, garantizamos nuestro mayor respeto por la autonomía del movimiento de los trabajadores y sus organizaciones propias, nos ponemos a su servicio y aspiramos a tener una estrecha relación de acompañamiento e intercambio permanente.
Dejamos claramente establecido que no nos anima la idea de crear una nueva central sindical, ni una nueva plataforma ni partido político; a todos les reconocemos su derecho a existir y a ocupar el espacio que les corresponde; con todos ellos deseamos estrechar nexos de coincidencias y les exigimos el justo reconocimiento que de su parte merece, nuestro derecho para actuar de manera independiente y sin tutelajes de ningún tipo.
Maracay, 7 de julio 2018