Alegres y contentos, hicieron su entrada los peloteros al terreno de juego, para dar inicio al Juego de las Estrellas 2016, en el Estadio Universitario de la ciudad de Caracas. El Umpire principal cantó Play Ball y comenzó la fiesta del béisbol.
En las gradas, se dio la “mejor” entrada del torneo 4.000 personas. El efecto de los altos precios, marcaba la poca afluencia a los estadios. Sin embargo, los allí presentes aplaudían a rabiar a cada uno de sus héroes.
Inning tras inning, el locutor interno del estadio, agradecía a las Empresas Polar por su aporte a la realización del evento. Igualmente, no dejaba de mencionar la altruista labor de Lorenzo Mendoza en pro del deporte venezolano. El efecto, de esas palabras no se hizo esperar, el público cada vez que escuchaba aquello, comenzaba a aplaudir y gritar “Si se puede, si se puede”, “Y va a caer, y va a caer” y “Mendoza Presidente, siempre consecuente”. La emoción era total, nadie en el estadio dejaba de participar.
En el Palacio de Miraflores, al ver todo aquello, en la pantalla de su televisor, Nicolás, le dio una patada a la mesa e increpó al gobernador de Aragua, que compartía con él en ese momento. No joda vale, para eso te di cinco millones de dólares y me sales con esa cagada. Acto seguido, le ordenó, me suspendes ese jueguito YA.
Tembloroso, Tareck El Aissami, llamó a su testaferro Carlos Guillen, Gerente General del equipo de Venezuela que va a participar en el próximo Campeonato Mundial de Béisbol, y le gritó: Carlos, que vaina es esa., quítale el micrófono al anunciador, suspende la señal de radio y televisión y de paso destituye al cara de niño “Maltín Polar” de Omar Vizquel. No me calo que ese tipo, en representación de nuestros enemigos oligarcas de la Polar, siga siendo el manager.
- Si mi jefecito, lo que usted ordene, fue la temblorosa respuesta de Guillen y procedió en consecuencia, a cumplir lo ordenado al pie de la letra.
Al ver todo aquello, los jugadores y el público se solidarizaron con Vizquel y se negaron a seguir jugando. En cuestión de minutos, la solidaridad se hizo nacional, las voces de protesta por la agresión del régimen contra el manager recorrió todos los rincones del país.
- Guillen, iba de un lado a otro sin saber qué hacer y para sorpresa de todos!!!Ordenó suspender el juego en el 7ª Inning!!! Y dio como explicación !!!Que los pitchers estaban agotados!!! ……Si Luis, ahora cuéntanos una de vaqueros, le gritaban desde las tribunas.
La Federación Venezolana de Béisbol, por medio de su presidente Edwin Zerpa, con el típico estilo de los demagogos, cuando son descubiertos en sus triquiñuelas, explicaba la situación diciendo “Vizquel, sigue siendo el manager” pero me voy a reunir en Maracay con el Gobernador y Guillen para ver cómo resolvemos el impase. O sea, Si pero No.
72 horas después del accidentado Juego de las Estrellas, la Federación emite un comunicado ratificando a Vizquel como manager de la selección.
-Recularon, fue la expresión nacional. La presión social de los venezolanos hizo retroceder al régimen.
Los aficionados, de todo el país, comentaban entre sí que lo finalmente ocurrido fue Un Triple Play: Tareck El Aissami se ponchó. Zerpa y Guillen con el cheque de los 5.000.000 de dólares en la mano, fueron hechos out cuando intentaron un “Doble Robo”.
En el Círculo de Espera de bateo se quedó Eduardo Pérez "Con la carabina al hombro"
Razón tenía Yogui Berra, cuando dijo “El juego no se acaba hasta que no se termina”