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​José E. Rodríguez Rojas

El Carnet de la Patria reparte migajas

​José E. Rodríguez Rojas

Los subsidios ligados al carnet de la patria son migajas lanzadas a los pobres. No logran compensar el efecto devastador de la hiperinflación, promovida por el mismo gobierno. Debido a ello no han podido sacar a éstos de la situación de pobreza que los agobia, por lo que la misma se ha incrementado hasta involucrar al 94,5% de la población.

Los subsidios gubernamentales otorgados a los sectores de bajos ingresos se ligaron al Carnet de la Patria, el cual opera como un registro de beneficiarios. En el mismo se han registrado un elevado porcentaje de la población esperando beneficiarse de algunos de los subsidios. Los más importantes consistieron, en los años recientes, en bonos eventuales y las llamadas Cajas CLAP. La ENCOVI ha detectado que ambos se entregan con una periodicidad irregular. En el caso de las llamadas Cajas CLAP, que son una cesta de productos que varían mucho en cada entrega, 40% de los beneficiarios manifestaron recibirlas con una frecuencia mensual o quincenal, mientras 60% sitúan la frecuencia en trimestral o anual. El valor de las cajas CLAP varía según su contenido, la última estimación realizada en el año 2020 fue de 20 dólares, por la que se paga un dólar.

Los bonos otorgados a través del Portal Patria también tienen una frecuencia irregular. Cerca de la mitad de los que declaran haberlos recibido dicen que su frecuencia es mensual y el 20% hasta quincenal. El valor promedio de los bonos entregados por el Estado en los penúltimos 12 meses es de 2,50 dólares.

La ENCOVI estima que los subsidios recibidos por los hogares (en pobreza extrema) en forma de bonos y Cajas CLAP asciende a 55 dólares, ello constituye menos de los que recibieron en el 2019-2020 cuando los subsidios mencionados alcanzaron 66 dólares. Si a esto se le suma el monto del ingreso laboral devengado por los hogares el ingreso total ascendería a una cifra de 91 dólares, que se ubica muy por debajo del valor de la canasta alimentaria estimada en 224 dólares (ver cuadro 1). En otras palabras, a pesar del subsidio los beneficiarios de la ayuda siguen en pobreza extrema o sea no pueden pagar la canasta alimentaria.

Cuadro 1. Ingresos de los hogares en pobreza extrema, contrastándolos con el valor de la canasta alimentaria (expresados en dólares).

Ingreso laboral de los hogares

36

Monto del subsidio representado por los bonos más las Cajas CLAP

55

Ingreso total de los hogares

91

Valor de la canasta alimentaria internacional

224

Fuente: ENCOVI. 2021

Esto explica que, a pesar de los subsidios citados, la pobreza se ha venido incrementando. La total alcanzó la cifra de 94,5% de los hogares, en el año 2021 y la extrema involucra al 76,6% de los mismos.

Al mismo tiempo que el régimen otorga migajas a los pobres, en la forma de los subsidios mencionados, ordena al Banco Central emitir dinero si control ni respaldo para financiar estos subsidios y los miserables salarios que paga el sector público. Esto impulsa la inflación, que a partir del año 2017 ascendió a nivel de hiperinflación. Los subsidios no han podido compensar el efecto devastador de la hiperinflación, provocada por el mismo gobierno. Se podría repetir la famosa frase de un Papa en relación a la crisis de la deuda de la década de 1980 “lo que con una mano le da, con la otra se lo quita”. El gobierno con una mano otorga los subsidios y luego con la otra provoca una hiperinflación devastadora que destruye la capacidad de compra de los beneficiarios de los subsidios.

Profesor UCV

Referencia:

Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). 2021. Encuesta de Condiciones de Vida 2021 (ENCOVI). ( disponible en: el Ucabista. com).

Venezuela: una gran fábrica de desempleo e informalidad

​José E. Rodríguez Rojas

La reciente edición de la ENCOVI evidencia que la contracción económica que enfrentamos desde el 2014 se ha traducido en una cuantiosa perdida de empleos, lo cual ha transformado a Venezuela en una gran fábrica de desempleados y trabajadores informales. Ello ha forzado a millones de nuestros compatriotas a huir del infierno bolivariano a fin de conseguir un trabajo en otras latitudes.

Entre el año 2014 y el 2021 se produce una fuerte destrucción de empleo como consecuencia del colapso económico que se produce y el empequeñecimiento de la economía. En los años recientes el confinamiento y la crisis de combustible generan una crisis de movilidad que agrava la recesión. En el periodo mencionado se reduce el empleo formal en 21,8 puntos porcentuales, lo que equivale a 4,4 millones de empleos, La mayor parte corresponde a empleo público reflejando el colapso del financiamiento del Estado y de la industria petrolera. 70% del empleo perdido corresponde al sector público y 30% al privado.

La contracción del empleo generado en la economía convierte al trabajo en algo escaso, transformando al país en una gran fábrica de desempleados, abunda la gente que desea trabajar pero no encuentra trabajo alguno que realizar. Esto no se refleja en las cifras de desempleo abierto que alcanza un 3,2 %. Esta cifra se evidencia como muy baja lo cual da pie a que las cifras oficiales de desempleo minimicen el problema, El desempleo se encubre bajo diversas figuras. Por un lado está el subempleo visible (personas que trabajan menos de 15 horas), en segundo lugar el desempleo desalentado que incluye a los que desean trabajar pero no lo hacen porque el ingreso a devengar no los estimula, finalmente las mujeres con hijos que desean trabajar pero no pueden hacerlo. La sumatoria de estos grupos asciende a 8 millones de personas.

La población desempleada es mayor que la población ocupada, la cual representa 7,6 millones de personas. La contracción del empleo formal público y privado se traduce en un incremento de los trabajadores por cuenta propia que se convierte en el grupo de ocupación más numeroso representando al 51,7% de la población ocupada. En otras palabras la mitad de la población ocupada es auto empleada, ello incluye a los que laboran en la economía informal. Sin embargo la informalidad llega al 60% de la población ocupada pues solo el 40% tiene un empleo formal.

En síntesis el grueso de la población en edad productiva en Venezuela está desempleada o labora en la informalidad. Si sumamos la población desempleada a la que labora en la economía informal, obtenemos que 80,6% de la población en edad productiva carece de un empleo formal y se encuentra desempleada o laborando informalmente. A esto hay que añadir que muchos de los que tienen un empleo formal se dedican a “matar tigres”, pues la remuneración que obtienen es muy baja, como lo veremos a continuación.

Los que logran conseguir un empleo formal, lo hacen con unas remuneraciones muy bajas. Es el caso de los que laboran en el sector público cuya remuneración promedio mensual es de 12,3 dólares, lo cual no representa ni el 10% de la canasta alimentaria estimada en 224 dólares. Ello incluye a los profesores y empleados universitarios que se dedican a la elaboración de tortas o a otro tipo de actividades para compensar el magro ingreso que les paga la universidad. Esto provocó, en el período previo al confinamiento, un ausentismo generalizado en las universidades cuyas autoridades se veían en aprietos para garantizar la asistencia de los trabajadores a sus puestos de trabajo.

Las remuneraciones de los que trabajan en los restantes sectores es un poco más alta pero ello no altera significativamente la precaria situación de los mismos. La remuneración del sector privado es de 38,7 dólares mensuales y la de los que trabajan por cuenta propia es de 32,8 dólares, estas cifras no llegan a superar el 20% del valor de la canasta alimentaria, que como ya mencionamos se ubica en 224 dólares. Esto ubica a todos los trabajadores de los sectores mencionados en la extrema pobreza. Si bien los subsidios gubernamentales y las remesas mejoran su situación ellos no compensan el efecto de la hiperinflación pues la pobreza sigue creciendo a pasos agigantados.

La baja remuneración impulsa a los profesionales y mano de obra calificada a emigrar en busca de una remuneración acorde con su formación y que les permita pagar los gastos básicos de vida, cosa que no es posible en Venezuela. Esto abarca un universo, estimado recientemente por la ONU, en 6 millones de personas que incluyen a médicos, ingenieros, músicos, y profesores universitarios, entre otros. El 86% de los que emigran declaran que su motivación fundamental es la búsqueda de un trabajo.

Fuente: La mayor parte de la información que sustenta este escrito proviene de la Encuesta de Condiciones de Vida (ENCOVI) realizada por la Universidad Católica Andrés Bello en el año 2021.

Profesor UCV

¿Entramos en una nueva etapa?

​José E. Rodríguez Rojas

Aparentemente entramos en una nueva etapa, cuyo principal rasgo es el deseo del régimen de Maduro de mejorar las relaciones con los Estados Unidos, Para ello han llevado a cabo conversaciones con la oposición y hecho concesiones. Esto ha dividido a la oposición, una parte de la cual ha participado en las conversaciones y otra lo ha rechazado. Se perfila el reinicio de las negociaciones en el exterior con la mediación de Noruega.

En una presentación televisiva Maduro expresaba su satisfacción por el triunfo en las elecciones presidenciales del 2018, que prolongaron su estancia en el poder. Sin embargo dichas elecciones fueron fraudulentas lo que impulsó a docenas de países occidentales a calificar a Maduro de dictador y aislar a su régimen. Los Estados Unidos han impuesto sanciones financieras sobre Maduro y la mayoría de sus aliados. Las compañías americanas, que en años previos habían sido las principales compradoras de crudo venezolano, tienen prohibido hacer tratos con el gobierno venezolano. La economía ha continuado su inexorable colapso.

Maduro ha tenido éxito neutralizando a la oposición representada por Guaidó Ha mostrado ser más hábil que lo que sus adversarios pensaban. La clave para su supervivencia ha sido el clientelismo. El gobierno se comporta como un clan, señala un ex funcionario del gobierno. Generales, gobernadores y líderes de bandas manejan partes del país como mini fortalezas. Con la escasez de ingresos petroleros el Estado entrega tierras y derechos a su desarrollo a cambio de lealtades. En Los Roques se ha permitido la construcción de mansiones en el parque nacional. En el sur del país el caótico desarrollo minero ha devorado la selva y envenenado los ríos.

En la actualidad, Maduro desea mejorar sus relaciones con la comunidad internacional y suavizar las presiones sobre su gobierno. La idea es que reduciendo ligeramente la injerencia del gobierno en las elecciones, a fin de realizarlas en forma menos fraudulenta, y enviando una misión a dialogar con la oposición, Maduro podría persuadir a la administración de Biden a moderar las sanciones impuestas por Trump. Maduro “desea encontrar la forma de ceder lo menos posible a fin de obtener algo de legitimidad” señala un funcionario del Departamento de Estado. Una significativa reducción de las sanciones es imposible, pero las amenazas de los Estados Unidos contra el régimen se han suavizado en relación con los tiempos de Trump, quien amenazó con deponer al régimen. La Unión Europea también ha moderado el tono. “Las conversaciones en estos días son como mejorar el régimen no como cambiarlo” expresó un diplomático.

En el contexto señalado el gobierno ha hecho concesiones como aumentar la presencia de la oposición en el CNE. Después de negar la existencia de una crisis humanitaria ha aceptado la presencia de una misión del programa de alimentos de la ONU y la entrada de ayuda humanitaria para niños en situación de desnutrición. Además el Fiscal General prometió abrir una investigación sobre el rol de los servicios de seguridad en tres muertes controversiales.

El anuncio de las elecciones regionales bajo un nuevo CNE ha dividido a una oposición ya debilitada. Guaidó las rechazó como una imposición del gobierno, pero otros parecen inclinados a participar. Henrique Capriles quien ayudó a negociar el acuerdo describe el nuevo CNE como el menos malo desde que el régimen chavista se inició en 1998. El gobierno de Noruega está auspiciando un esfuerzo paralelo que podría tener lugar en Mexico para incorporar a las dos partes a le negociación.

El apoyo de la población a Guaidó se ha reducido desde más de un 60% en el 2019 a un 15%, según la encuestadora Datanalisis. Su mandato deriva de la Asamblea Nacional elegida en el 2015, el cual se venció en enero. La AN ha extendido su nombramiento por un año argumentando que ninguna elección creíble puede darse bajo el régimen de Maduro. Pero muchos de los gobiernos que lo apoyan abiertamente y algunos de sus aliados de la AN piensan que sería un error prolongarlo nuevamente.

Si se reinician las negociaciones con la mediación de Noruega, la oposición demandará la liberación de presos políticos y el adelanto de las elecciones presidenciales con supervisión internacional. El gobierno demandaría la suspensión de las sanciones y la liberación de fondos congelados en el exterior. Estados Unidos ha anunciado su disposición a moderar las sanciones y Guaidó ha tenido un discurso más conciliador que el inicial. Sin embargo los escépticos opinan que todo esto es una perdedera de tiempo, pues el gobierno no cederá en nada que disminuya su poder.

Sin embargo existe otro punto de vista, que Maduro y su esposa estén pensando en el retiro y en delegar el poder en alguien más aceptable por otros actores. Maduro ha expresado que quiere ser recordado como el gobernante que enfrentó a los Estados Unidos y ganó.

Nota: este escrito está basado en una traducción libre del artículo: The Economist. 2021. The Venezuela´s strongman wants better relations with the United States. Jun 3rd.

Profesor UCV

El acoso del chavismo a las instituciones culturales

​José E. Rodríguez Rojas

El hostigamiento a las universidades por parte del régimen chavista, es parte del acoso que el gobierno ha llevado a cabo contra las instituciones culturales y del conocimiento. El fundador del movimiento inició el desmantelamiento de estas instituciones, desatando la indignación nacional e internacional. Se trataba de imponer un pensamiento único para lo cual eran inconvenientes los gerentes culturales independientes con pensamiento propio como Sofía Ímber, fundadora del Museo de Arte Contemporáneo, y Virginia Betancourt, creadora del Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas.

Los populismos latinoamericanos han sido de naturaleza fascistoide. El peronismo argentino simpatizó abiertamente con el régimen nazi y convirtió a la Argentina en un refugio seguro para los jerarcas del régimen, una vez concluida la segunda guerra mundial. La naturaleza fascistoide del chavismo ha sido planteada por estudiosos del fenómeno como el profesor Humberto García Larralde. Uno de los aspectos relevantes de esta dinámica ha sido, en el caso del chavismo, el hostigamiento a las instituciones de la cultura y a las generadoras de conocimiento como las universidades. En varios reportajes de reciente factura el diario El Nacional presentó los detalles del desmantelamiento a que fueron sometidas las instituciones culturales del Estado por el hijo prodigo de Sabaneta. En un acto transmitido por cadena de televisión, a inicios del año 2001, despidió a los gerentes de las principales instituciones culturales del país sometiéndolos al escarnio público, acusándolos de ser una especie de casta que manejaba las instituciones mencionadas para el beneficio de una elite. Era necesario, a juicio del Prócer de Sabaneta, una revolución cultural para poner estas instituciones al servicio del pueblo.

Previo a 1999 el Estado venezolano hizo un esfuerzo singular para el desarrollo de un conjunto de instituciones como el Museo de Bellas Artes, la Biblioteca Ayacucho, la editorial Monte Ávila y el Museo de Arte Contemporáneo Sofía Ímber, que se ubicaban dentro de las mejores en su campo en la región. A pesar de ello el Comandante Eterno, haciendo gala de su carencia de ideas sobre este y otros temas, procedió a destituir a los gerentes de estas instituciones en un programa televisivo, usando además una jerga beisbolera para tales propósitos. Entre los destituidos el nombre que provocó mayor indignación nacional e internacional fue el de Sofía Ímber cuya labor en el Museo de Arte Contemporáneo era reconocida nacional e internacionalmente. Los gerentes de la cultura defenestrados fueron sustituidos por profesionales que al poco tiempo renunciaron pues llegaron a la conclusión de que el régimen lo que pretendía era imponer un modelo autoritario de pensamiento único.

Algunos especialistas han venido insistiendo en que el desmantelamiento de las instituciones culturales no ha sido un proceso movido por una agenda ideológica, sino por la intención de esconder la incompetencia del régimen y su desconocimiento del tema. Esto se evidencia en el caso de Sofía Imber. El régimen ha tratado de destruir su legado y hacer desparecer cualquier rasgo que relacione al museo que creó con su nombre. A tal efecto el gobierno de Maduro en el año 2017 la puso el nombre de Armando Reverón al Museo de Arte Contemporáneo. Esta acción, según Luis Pérez Oramas es una escaramuza que lo que busca es esconder la mediocridad e incompetencia del régimen en lo atinente al manejo de los museos. Según el ex curador del MOMA de Nueva York, Sofía Ímber junto a Carlos Rangel con la solidaridad del Estado Venezolano, lograron crear uno de los mejores museos de Latinoamérica y hacerlo una institución referencial por la calidad de sus colecciones y sus muestras. Concluye Pérez Oramas que eso se ha perdido y no se va a recuperar con un cambio de nombre. .

En este contexto el régimen chavista también procedió a desmantelar la obra que Virginia Betancourt había llevado a cabo en la Biblioteca Nacional, actualizando y digitalizando los servicios de información, adaptándolos a normas internacionales; creando un sistema de bibliotecas públicas a nivel nacional que integró las bibliotecas locales y regionales a la Biblioteca Nacional y promoviendo la lectura entre la población, dándole rango de política de Estado. La obra de Betancourt ha sido reconocida por especialistas nacionales e internacionales. Entre éstos últimos figura Anabel Torres quien se despeñó como Sub Directora de la Biblioteca Nacional de Colombia. Torres elaboró un informe donde hace un inventario de la obra desarrollada por Betancourt y señala los pormenores de la labor emprendida por asalariados del régimen para destruirla.

Recientemente, la nunca bien ponderada Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), reconoció la labor de Betancourt al publicar un libro en el cual la ex directora de la BN hizo una recopilación y defensa de su obra. El libro tiene por título “Sistema Nacional de Bibliotecas e Información de Venezuela (SISNAB) 1974-1998. Una experiencia exitosa en la formación de ciudadanos”. La obra posee siete capítulos en los cuales se muestra el andamiaje sobre el cual se creó el Sistema Nacional de Bibliotecas creado por Betancourt, incluyendo entre otros temas la organización, recuperación y acceso a la memoria nacional impresa y audiovisual, la promoción de libros y la lectura como política de Estado. Dicho libro fue editado por la editorial abediciones y presentado en la Feria del Libro del Oeste auspiciado por la mencionada universidad.

Referencias:

El Nacional. 2021. 20 años de los cambios en el bullpen con los que Chávez puso su bota sobre la cultura nacional. Enero 27.

EL Nacional. 2018. Pérez Oramas: Venezuela no se deja imponer el silencio de la muerte. 15 enero.

Torres, Anabel. 2010. La Biblioteca Nacional de Venezuela, núcleo de un sistema nacional de bibliotecas en el Siglo XX, camino a ser desmantelado en el Siglo XXI. IFLA FAIFE.( disponible en: www. ifla.org).

Profesor UCV

Los rostros de la ausencia

​José E. Rodríguez Rojas

Después de un largo y accidentado periodo de edición, acaba de ser publicada la obra “Los rostros de la ausencia”, del Prof. German Pacheco Troconis, la cual compila los perfiles biográficos de 76 ingenieros agrónomos y profesionales de áreas afines, que hicieron posible el nacimiento de la carrera de agronomía en Venezuela y jugaron un papel relevante en la construcción de la Facultad de Agronomía de la UCV. La obra es una edición conjunta de la Academia Nacional de la Ingeniera y el Habitat y de la Revista de la Facultad de Agronomía de la UCV.

Pacheco Troconis es egresado de la Facultad de Agronomía de la UCV (Fagro UCV), donde también obtuvo un magister en Desarrollo Rural. Posteriormente ingresó como docente e investigador a esta institución En condición de tal llevó a cabo sus estudios de doctorado en la Universidad Autónoma de Barcelona, en la especialidad de Historia Económica. Desde hace varios años es profesor jubilado y se ha mantenido activo en las actividades de investigación en el área de historia de la agricultura venezolana, en la cual se ha centrado en el tema de la educación agrícola superior.

Señala la Dra. Yajaira Freites, del Centro de Estudios de la Ciencia del IVIC, que Pacheco Troconis ha laborado desde hace varias décadas en la historia institucional de la agronomía venezolana, lo que ha dado lugar a varios trabajos que han dado a conocer cómo la misma se ha establecido en la sociedad venezolana. La Dra. Freites, en el prólogo a la obra, define la agronomía como una interdisciplina, que los biografiados contribuyeron a crear en el periodo inmediatamente posterior a la muerte del general Juan Vicente Gómez. Esta interdisciplina cubre botánica, fisiología, microbiología, química, genética, economía, política agraria, documentación, entre otros, porque la actividad agrícola en un asunto complejo y esa multidimencionalidad es lo que está presente en estos Rostros de la ausencia que Pacheco Troconis rescata de los archivos de las instituciones relacionadas con el agro.

El autor señala que la obra busca rendir un reconocimiento a los ingenieros agrónomos y profesionales de áreas afines, ya desaparecidos, que hicieron posible el nacimiento de la carrera de agronomía en Venezuela y jugaron un papel relevante en la construcción de la Facultad de Agronomía de la UCV, primera institución de su tipo en el país. Los perfiles biográficos que se presentan son un testimonio de este reconocimiento, para dar a conocer los nombres y afanes acerados de los pioneros y constructores de la carrera de agronomía de la UCV y rescatar su memoria del olvido. Enfatiza Pacheco Troconis que visibilizar estos rostros de la ausencia, estos profesionales que en el ayer dejaron lo mejor de sí, de su vida profesional y personal para conformar nuestra institución y construir el perfil de la carrera, es tarea que apremia en la Venezuela de hoy, angustiada y ayuna de memoria.

La obra es el resultado de una investigación de largo aliento sobre la historia institucional de la agronomía venezolana. Dicha investigación se ha soportado en entrevistas a los creadores de Fagro UCV, que el autor llama “pioneros”, que todavía contaban con vida para el momento de la investigación. Incluyó también conversaciones con algunos discípulos y contó con la colaboración de los familiares de los ya desparecidos. Contempló una minuciosa investigación documental que implicó la búsqueda y consulta de documentos oficiales en los archivos de las instituciones relacionadas con el agro. Consulta de referencias bibliográficas, hemerográficas y digitales. Se nutrió además de información proveniente de otros trabajos del autor.

Señala el autor que para el desarrollo de la investigación existieron limitaciones para la obtención de información en los repositorios de las instituciones agrícolas, que han tenido a su cargo el proceso de institucionalización de las ciencias agrícolas y el desarrollo de nuestra agricultura. Este aspecto es enfatizado, en el prólogo, por la Dra. Freites quien destaca las limitaciones que enfrentó el autor al consultar los archivos de las diversas instituciones relacionadas con el agro, algunas de ellas extintas cuyos registros corren el riesgo de desaparecer debido a la moda política reciente de rebautizar, desmembrar o arrejuntar oficinas y entes del Estado.

Finalmente el autor señala las particularidades que caracterizan el inicio de los estudios de agronomía en un país petrolero como Venezuela. Destaca que los estudios de agronomía surgen en los países agrarios, como los del cono sur respondiendo a las presiones de los agricultores. En contraste, en un país petrolero como Venezuela acostumbrado a importar lo que come, los estudios de agronomía surgen como parte de los planes de modernización, en los años inmediatamente posteriores a Gómez impulsados por una elite ilustrada de la cual formaban parte Alberto Adriani , Diógenes Escalante y Caracciolo Parra Pérez, quienes expusieron la necesidad de formar una elite técnica capaz de afrontar los retos que la modernización del agro planteaba. En este entorno se inscribió la creación en 1937 de la Escuela Suprior de Agricultura y Zootecnia que luego, una década después, se transformaría en la Facultad de Agronomía de la UCV. En el momento que se planteó la creación de la Fagro UCV la nueva institución se nutrió de un grupo de extranjeros que vinieron con su equipaje de conocimientos, libros e instrumentos; a estos se unirían los pocos agrónomos nativos graduados en el exterior y las germinales promociones de la Escuela Superior de Agricultura y Zootecnia.

La obra comentada puede ser consultada en su versión electrónica en internet, en la página web de la Facultad de Agronomía de la UCV. Al abrir la página, en el lado izquierdo de la misma aparece un menú de opciones en el cual hay que seleccionar “Biblioteca”, luego “Publicaciones” y “libros publicados”, lo que dirigirá al interesado a acceder a la obra en cuestión.

Profesor UCV

Los docentes universitarios continúan en situación de indigencia

​José E. Rodríguez Rojas

La hiperinflación ha pulverizado la capacidad de compra del docente universitario. El aumento de salario vinculado al reciente incremento en el salario mínimo no ha compensado los estragos de la inflación. Los profesores continúan en una situación de indigencia extrema, ya que el nuevo salario apenas cubre un 4,58% de la canasta alimentaria y 2,1% de la canasta básica.

La inflación desbocada se mantiene alentada por la emisión de dinero sin control y la espiral ascendente del dólar. En la actualidad la divisa americana está cerca de los 3 millones de bolívares. En el proceso de dolarización que atravesamos la dinámica del billete verde tiene a reflejarse en los precios de lo que adquirimos. Debido a ello calculamos nuestras remuneraciones en dólares, como una manera de medir nuestra capacidad adquisitiva.

Para intentar compensar los estragos de la inflación el gobierno decretó un aumento del salario mínimo a partir del 1 de mayo, el cual llevó el salario a 7 millones, lo que sumado a la cesta ticket lo llevaría a los 10 millones de bolívares. La Asociación de Profesores de la UCV (Apucv), hizo una estimación asumiendo que el incremento relativo del salario mínimo se extendería a los profesores universitarios, como establece la contratación colectiva vigente. Tomamos de esta estimación el salario de un profesor con categoría de Agregado, para determinar si el aumento mencionado ha mejorado la capacidad de compra de los docentes. La de Agregado es una categoría intermedia por lo cual refleja la situación de los profesores en general.

Cuadro 1. Salario de un profesor, con categoría de Agregado, en dólares, mayo 2021.

Salario básico

Bono de reconocimiento

Bono alimentario

Total

Bolívares

21.033.288

16.826.630

3.000.000

40.859.918

Dólares

7,59

6,07

1,08

Fuente: APUCV. 2021. Tabla de sueldos actualizada al 1-5-2021.(tabla no oficial); caculos propios.

El salario de un profesor Agregado se ubicaría en 14,75 dólares, asumiendo el precio actual del dólar en 2.770.000, incluyendo los bonos de reconocimiento y el alimentario ( ver cuadro 1). Existen otros bonos pero no los incluimos pues no alteran el resultado en forma significativa por su limitado monto.

Al comparar el salario del docente con la canasta alimentaria (CAF), estimada por el Cendas de la Federación Venezolana de Maestros (FVM) en 322,57 dólares, para marzo de este año, encontramos que representa un modesto 4.58 % de la CAF,. Al hacer la comparación con la canasta básica (CB) obtenemos que representa un 2,1 % de la CB, estimada por la misma institución en 700 dólares (ver cuadro 2). Ello evidencia que los profesores continúan en una situación de indigencia extrema al no poder cubrir ni siquiera la canasta alimentaria.

Cuadro 2. Proporción del salario de un profesor Agregado, en relación a la canasta alimentaria y la básica. Mayo 2021.

Valor en dólares

Salario (S) en dólares.

Relación S/CAF o CB x 100

Canasta alimentaria Familiar (CAF)

322

14,75

4,58

Canasta básica (CB)

700

14,75

2

Fuente: cuadro 1; El Aragueño. 2021; Finanzas Digital, 2021; Cálculos propios

En la medida que la inflación ha venido tomando cuerpo la capacidad de compra de los profesores ha venido disminuyendo. Del año 2001 en adelante el salario ha venido declinando en relación a la canasta básica. Esta situación se agudizó del 2013 en adelante cuando el salario representó menos del 20% de la CB [Rodríguez R., José E. (sf)]. Luego, a finales del 2018, la relación disminuyó hasta un 6,8%. En los días que corren el salario de un docente es equivalente a 2,1 % de la CB, a pesar del reciente aumento del 1 de mayo (ver cuadro 3).

Cuadro 3. Salario de un profesor agregado en relación a la canasta básica, entre septiembre del 2018 y mayo del 2021.

Septiembre 2018

Enero 2019

Mayo 2021

Relación Salario(S)/Canasta Básica (CB) x 100

6,81

3,64

2,08

Fuente: Rodríguez R., J. E. (s.f) Los nuevos salarios de hambre de los docentes. Dígalo Ahí; cuadro 2

Como lo hemos ´planteado con anterioridad, las cifras expuestas evidencian que mientras no se controle la inflación los aumentos de salarios no mejoraran la capacidad adquisitiva de los profesores universitarios.

Referencias

El Aragueño. 2021. Canasta básica de marzo se ubicó en 700 dólares. Abril, 20.

Finanzas Digital. 2021. En marzo del 2021 la Canasta Alimentaria Familiar se ubicó en 612.900.945 bolívares (US $ 322,57). Abril 20. (disponible en: finanzasdigital.com).

Rodríguez R., José E. (s.f) La lucha gremial y el salario universitario. Dígalo Ahí.

Profesor UCV

Después del mito, la cruda realidad.

​José E. Rodríguez Rojas

En el reciente Congreso del Partido Comunista Cubano (PCC) Raúl Castro renunció y entregó el liderazgo del partido a Miguel Díaz-Canel y a una nueva generación de líderes. Deja como legado una sociedad agobiada por la inflación, el desabastecimiento y las colas. El nuevo liderazgo en el gobierno, ha obtenido logros precarios. Los jóvenes cubanos están impacientes y demandan resultados. Evidencia de ello es el protagonismo del Movimiento San Isidro.

Hasta ahora las sucesiones en el liderazgo cubano se han llevado a cabo en calma. Sin embargo, este no parece ser el caso del cambio que acaba de ocurrir en el reciente Congreso del Partido Comunista Cubano (PCC), celebrado entre el 16 y 19 de abril. En el mismo Raúl Castro le entregó el liderazgo del PCC a Miguel Díaz-Canel.

Después de media centuria al frente del régimen Fidel Castro delegó en su hermano el liderazgo del régimen y del PCC. Raúl Castro lanzó un conjunto de tímidas reformas bajo las cuales 600.000 miembros de la fuerza de trabajo pasaron a laborar en cooperativas independientes. Él permitió a los cubanos comprar casas y celulares. Bajo el gobierno de Barack Obama permitió el restablecimiento de relaciones diplomáticas con los Estados Unidos. Él separó los roles del partido y del gobierno y estableció límites de tiempo. El Congreso del PCC completó esta racionalización. Los compañeros de generación de Raúl abandonaron el politburó, aunque su hijo y su yerno mantienen puestos de mucho poder en las Fuerzas Armadas. Estos cambios dejan a Díaz-Canel con las manos libres para rehacer la dirigencia del PCC.

Con la autoridad carismática de los hermanos Castro fuera del juego, el nuevo liderazgo será juzgado fundamentalmente por los resultados. El problema es que hasta ahora estos son muy pocos. El manejo de la pandemia ha sido efectiva, gracias a los avances en el área de salud. Pero la pandemia ha paralizado el turismo y golpeado una ya debilitada economía.

La apuesta de los Castro por el apoyo del régimen chavista fue “Pan pa hoy y hambre pa mañana”. El subsidio permitió prolongar la existencia del socialismo cubano a pesar de sus taras. Sin embargo, al final, la incompetencia del régimen venezolano se tradujo en una crisis que ha derivado en una declinación de la ayuda a Cuba. Esto, aunado al impacto de las sanciones de Estado Unidos bajo el gobierno de Donald Trump e ineficiencias de larga data, se han combinado para colapsar las importaciones y causar un desabastecimiento generalizado, lo que obliga al cubano promedio a desperdiciar buena parte de su tiempo en colas para abastecerse.

Esta situación impulsó a Díaz-Canel a reformular el sistema cambiario, unificando los tipos de cambios, lo que implicó una fuerte devaluación. Ello estaba diseñado para forzar a las empresas estatales a ser más eficientes y exportar más. Esto ha incentivado la inflación que se espera este año crezca hasta llegar a 500%, lo que podría contraer los salarios reales en un 15%, según estimaciones del economista cubano Pavel Vidal. Según éste solo hay dos vías: ajuste y reformas estructurales o estancamiento.

Hasta ahora el incipiente sector privado no llega más allá de una economía de subsistencia Muchos economistas esperan que el Congreso del PCC autorice el funcionamiento de las pequeñas y medianas empresas (PYMES). No ha habido tal fortuna. Raúl Castro en su discurso estableció que las reformas deben tener límites, pues podrían causar la destrucción del socialismo. Sin embargo, el economista Ricardo Torres de la Universidad de la Habana señala que el mensaje del Congreso fue que no podían detenerse las reformas. Torres piensa que las PYMES serán autorizadas progresivamente, comenzando con la producción de alimentos.

En una sociedad infantilizada por el paternalismo los cubanos más jóvenes digitalmente interconectados están impacientes. En los pasados meses hemos observado inusuales demostraciones de artistas y activistas demandando mayor libertad cultural. Estos grupos incluyen a ambientalistas, anti racistas, feministas y artistas, como los raperos creadores de la obra “Patria y Vida”, cuya letra refleja la decepción de los jóvenes con los precarios resultados de la revolución. Incluye también al Movimiento San Isidro que se ha convertido en una piedra en el zapato para régimen. Ellos son difíciles de descalificar como agentes del imperialismo, aunque Díaz-Canel ha tratado de hacerlo. El régimen está controlando esto mediante las tradicionales políticas represivas, de acuerdo con Rafael Rojas, un historiador cubano residenciado en México. El Congreso del PCC ha enviado una tímida señal de apertura sustituyendo al jefe de ideología por Rogelio Polanco una figura más flexible. Adicionalmente Díaz-Canel ha ofrecido conversar con los jóvenes e intelectuales aunque ellos quieren más que esto.

El férreo control del Estado policiaco cubano no está amenazado, en términos inmediatos. Pero la frustración está creciendo. Mucho más que antes la gente está diciendo que quieren emigrar, dice un joven profesor. Esto es un problema en un país cuya población está declinando. Cuando la generación post revolucionaria ascendió al poder en China y Vietnam, ellos lograron que la población sintiera los beneficios del crecimiento económico a través del capitalismo de estado. Díaz-Canel ignora esta lección a su cuenta y riesgo.

Nota: la mayor parte de este escrito está basado en una traducción libre del artículo: The Economist. 2021. After the mith, the grim facts. April 24.

Profesor UCV

Venezuela, un actor marginal en un mercado petrolero que se reactiva.

​José E. Rodríguez Rojas

En el primer trimestre de este año se ha producido una reactivación del mercado petrolero, después del colapso del 2019. Ello se ha traducido en un repunte de los precios por encima de los 60 dólares. Uno de los logros del chavismo ha sido convertir a Venezuela en un actor marginal de este mercado, por lo que es poco probable que nuestro país se beneficie del repunte mencionado.

Desde el año 2019, o posiblemente antes, estamos entrando en una nueva era que podríamos llamar post-petrolera, donde los derivados del crudo no juegan el rol determinante que desempeñaban previamente. Las presiones de los ambientalistas y el cambio climático están impulsando la demanda de nuevas tecnologías basadas en otras fuentes de energía, como el carro eléctrico. Se esperaba que la demanda de crudo llegara a un tope dentro de varios años, pero, la Covid 19 hizo que esto se adelantara. Producto del confinamiento la economía global se contrajo, lo cual provocó un colapso de la demanda de crudo en el primer trimestre del año 2019. En consecuencia los precios del petróleo descendieron hasta cotizarse a niveles irrisorios.

Esta situación parece estar cambiando desde los inicios de febrero de este año, gracias a los avances en el proceso de vacunación y la aparición de nuevos tratamientos para la Covid 19, que permiten pensar en una ralentización de la pandemia y el inicio de una recuperación impulsada por el paquete de estímulos instrumentados por Biden y la Unión Europea. Esto ha alentado las expectativas de los inversionistas sobre una pronta recuperación de la demanda de crudo. Este proceso es todavía incierto. Los inversionistas temen que las nuevas variantes del Covid 19, más contagiosas y letales, puedan frustrar la recuperación. A pesar de ello lo precios del petróleo han entrado en una fase ascendente.

En verdad el repunte de los precios del crudo tiene más que ver con las restricciones en la oferta de petróleo que con la confianza en la recuperación de la demanda. En estas restricciones a la oferta ha influido la política del principal exportador de crudo a nivel global, Arabia Saudita, que aspira precios que ronden los 70 dólares y está tomando medidas para lograrlo, contando para ello con el apoyo de los otros miembros de la OPEP ampliada que incluye a Rusia. El cartel petrolero redujo su producción en siete millones de barriles diarios. En la última reunión de la OPEP se esperaba un cambio de política que moderara los recortes señalados y un acuerdo para un incremento de producción, pero se acordó mantener los niveles de producción. Todo ello impulsó los precios a niveles que rondaron los 80 dólares el barril.

En la contracción de la oferta está influyendo también la caída en otras zonas como África, donde algunos países petroleros están comenzando a sufrir por la reducción de la inversión en nuevos proyectos y la reducción de la producción en los existentes. En Estados Unidos la producción de crudo en enero fue un 13% más baja que hace un año. Las exportaciones de petróleo de Irán lucen poco probable que se incrementen rápidamente, pues la administración de Biden no tiene planes de levantar las sanciones.

La reducción de la producción en algunos países refleja la moderación en el gasto de las grandes compañías petroleras. Éstas están adoptando una mayor disciplina en sus inversiones en energía fósil y reorientándolas hacia nuevas fuentes de energía. En ello han influido las perdidas que han sufrido en el periodo reciente y la política energética de la Unión Europea y de la nueva administración de Biden. Representantes de esta última han señalado que su política energética se orientará hacia una más estricta regulación sobre las energías fósiles e incentivar las inversiones en las nuevas energías.

En este panorama global, Venezuela, que era un actor importante en el mercado petrolero antes de 1998, ha dejado de serlo. Uno de los logros del chavismo ha sido la destrucción de la industria petrolera, lo que se ha reflejado en el colapso de la producción y exportación de petróleo, agravado en los últimos años por el deterioro de los precios del petróleo. Venezuela tenía en 1998 una capacidad de producción de 4 millones de barriles diarios. Actualmente los niveles de producción se ubican en 10% de esa cifra. En otras palabras, el chavismo y los militares incompetentes que ha designado para dirigir PDVSA han destruido el 90% de la capacidad de producción de la empresa.

El régimen habla de una recuperación de la producción para llevarla a niveles de 1,5 millones de barriles diarios, pero ello exigirá unos niveles de inversión que el gobierno no dispone. Adicionalmente a ello la desconfianza de los inversionistas hacia el régimen de Maduro pone en duda que logren entusiasmar a empresarios del sector privado a invertir en la deteriorada industria venezolana.

Debido a los raquíticos niveles de producción, el incremento de los precios que se está produciendo desde febrero, no parece beneficiar a Venezuela y provocar un cambio en la situación de deterioro de la industria petrolera.

Profesor UCV

El giro vacilante de Cuba y Venezuela hacia el mercado

​José E. Rodríguez Rojas

Hugo Chávez y Fidel Castro conformaron una alianza entre Cuba y Venezuela que se ha prolongado en el tiempo. En la actualidad los dos gobiernos, impulsados por la desesperación, están compartiendo una agenda común la cual privilegia políticas de mercado que buscan rescatar sus moribundas economías. Están tratando de imitar el socialismo de mercado de China Y Vietnam, que combina represión y prosperidad. Sin embargo es poco probable que logren el éxito de las naciones asiáticas mencionadas..

En el fondo somos una sola nación, dijo Chávez en el año 2007, refiriéndose a la relación entre Cuba y Venezuela. En el marco de esta visión, Venezuela suministró millones de barriles de crudo subsidiados a Cuba, que la protegían de las consecuencias económicas del socialismo. Los doctores cubanos atendían a las barriadas pobres de Venezuela, impulsando la popularidad de Chávez y suministrando divisas extras a Cuba. Su alianza política y económica fue la más fuerte de América Latina. En la actualidad, los dos países aliados están discretamente compartiendo otras experiencias, adoptando políticas de libre mercado para rescatar sus moribundas economías, aunque ninguno de los dos quiere reconocerlo. Se trata, dicen, de perfeccionar el socialismo. Las políticas de libre mercado son aquellas que restringen la intervención del Estado y tratan de estimular las fuerzas del mercado, como la privatización de empresas públicas y la liberación de precios de los productos y de las divisas.

El 6 de febrero el consejo de ministros de Cuba expandió el número de actividades que pueden realizar los pequeños emprendedores, llamados cuentapropistas. Los cubanos pueden desempeñarse como conductores de carretas, payasos en cumpleaños, pero no pueden llevar a cabo actividades como programación de computadoras o medicina veterinaria para mascotas. Una lista especifica 124 sectores reservados al Estado, totalmente prohibidas para el común de los cubanos. Esto sigue el camino de otras reformas que se implementaron en enero cuando se eliminó el sistema dual de tipo de cambio. El peso estará anclado al dólar en una relación de 24 pesos por dólar, aunque en el mercado negro se está cambando a 50 pesos por dólar.

El gobierno de Venezuela sigue una agenda similar a la de su aliado. Maduro desechó un sistema de cambios múltiples en el año 2018 impulsando el dominio del dólar en las transacciones. Ello mejoró el abastecimiento. Partes del Estado, como PDVSA, se están contrayendo. Venezuela ha venido padeciendo una recesión por más de seis años. El mal manejo de PDVSA y las sanciones de la administración Trump han hecho colapsar las exportaciones petroleras. La corrupción desbordada quebró al Estado. En la práctica el gobierno está instrumentando un ajuste similar al del Fondo Monetario Internacional (FMI). Debido a que este organismo no le suministra ayuda a Venezuela el gobierno recurre a la emisión de dinero sin respaldo para financiar su gigantesco déficit fiscal (Rodríguez R, J. E. 2021). .

Venezuela y Cuba están actuando movidos por la desesperación. Aunque hay diferencias entre ambas economías, en particular en lo que se refiere a la magnitud de la corrupción, la economía ha sido devastada en forma similar. El PIB de Cuba se contrajo un 11% en el año 2020, de acuerdo a cifras oficiales. Las exportaciones de azúcar se han acercado a mínimos históricos. En el año 2019 la administración de Trump restringió los viajes de americanos a Cuba y el envío de remesas por los cubanos americanos a sus familiares en Cuba. Los Estados Unidos han impuesto sanciones a los operadores de tanqueros que transportan petróleo de Venezuela hacia Cuba. El pasado año el gobierno de los Estados Unidos forzó a Western Union, una empresa de remesas, a cerrar sus operaciones en Cuba. Las sanciones y el coronavirus redujeron el número de turistas de una cifra esperada de 4 millones a 80.000. El último año lujosos hoteles construidos por la armada con préstamos de origen oscuro, probablemente de Venezuela, permanecieron vacíos. Para los cubanos comunes los alimentos son escasos.

El Presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel está enfrentando más restricciones que Maduro. Díaz-Canel es en el mejor de los casos un reformador encubierto. Los funcionarios de la era soviética, como Raúl Castro, todavía tienen mucho poder. Díaz-Canel está tratando de no antagonizar con él, hasta el próximo mes de abril cuando se espera que lo releve.

Hasta ahora el gobierno cubano ha mantenido el control de las industrias de mayor tamaño y las tiendas al por mayor, lo cual restringe las opciones de los cuentapropistas para obtener sus suministros. El Estado cubano continúa monopolizando los servicios profesionales como arquitectura y contabilidad. Las gestiones para una ley que permita a los empresarios asumir estos servicios han permanecido congeladas.

La pandemia y las sanciones de Estados Unidos limitan la posibilidad de que Cuba y Venezuela disfruten de un boom producto de sus políticas de mercado, en el corto plazo. Las continuas restricciones que Cuba le impone a los emprendedores en vastas áreas de la economía, limitan su crecimiento económico.

Las políticas de mercado instrumentadas por Maduro y Díaz-Canel no implican mayor libertad política para la población. El modelo que siguen es el de China y Vietnam, donde represión y prosperidad coexisten. Orlando Ochoa, un economista que labora en servicios de consultoría en Caracas señala que ambos países están cambiando sus políticas hasta cierto punto. Pero no están cambiando sus regímenes políticos. Este es el punto. Cuba y Venezuela continúan teniendo muchas cosas en común.

Profesor UCV

Referencias:

Rodríguez R, J. E. 2021. Las políticas de mercado no reactivaran la economía. Dígalo Ahí, número 8, febrero 27

Nota: Este escrito es una síntesis de una traducción libre del artículo: The Economist.2021. Cuba and Venezuela, open up, hesitantly, to the market. Feb 12th

Las políticas de mercado no reactivaran la economía

​José E. Rodríguez Rojas

El gobierno venezolano está instrumentando políticas de mercado que ayuden a la reactivación de la economía, la cual lleva seis años en recesión. Según la revista The Economist es poco probable que dichas políticas impulsen un boom de inversiones que reactive la maltrecha economía, debido a la pandemia y a las sanciones de Estados Unidos.

Movido por la desesperación el régimen de Maduro está instrumentando políticas de mercado, para rescatar la maltrecha economía venezolana. Sin embargo el régimen presenta el giro hacia las políticas de mercado, no como un acto de desesperación, sino de perfeccionamiento del socialismo. Lo que llamamos políticas de mercado o de libre mercado, son aquellas que restringen el rol del Estado en la economía y aumentan el de las fuerzas del mercado. Ellas contemplan las de privatización de empresas públicas y las de liberalización de precios, tanto de precios de los productos como de las divisas

Maduro desechó un sistema de cambios múltiples en el año 2018. El que hace poco tiempo el gobierno calificaba de dólar criminal, ahora circula libremente en las calles. Es más común en las calles de Caracas que el bolívar, debido a la crisis de efectivo. Se eliminó el control de precios y la gasolina se expende a precios dolarizados en las estaciones de gasolina.

Las tiendas, antes vacías, están abastecidas. En el campo, la elevada cantidad de tierras que Chávez entregó a los campesinos ahora están siendo compradas por personas que se han enriquecido, beneficiándose del capitalismo de amiguetes que floreció bajo la sombra de su sucesor.

Parte del Estado se está contrayendo. PDVSA, que una vez empleó a 150.000 personas, ahora tiene una fuerza de trabajo de 111.000, de acuerdo a cifras aportadas por el sindicato de trabajadores petroleros. Muchos de los trabajadores formaron parte de la diáspora que emigró a otros países vecinos como Colombia.

El gobierno de Venezuela está actuando movido por la desesperación: Venezuela ha venido padeciendo una recesión por más de seis años. El mal manejo de PDVSA hizo colapsar la producción, lo que aunado a las sanciones de la administración Trump provocó el colapso de las exportaciones petroleras. La corrupción desbordada impulsó el mercado de carros de lujo, pero quebró al Estado.

Un empresario señaló que el gobierno está instrumentando un programa de ajuste similar al de los llevados a cabo por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Las sanciones lo han hecho factible políticamente. Debido a que el FMI no le suministra a Venezuela la ayuda que el régimen requiere, el gobierno continúa financiando su gigantesco déficit ordenando al BCV emitir dinero sin respaldo.

La pandemia y las sanciones de Estados Unidos impedirán que Venezuela, en el corto plazo, disfrute de un boom de inversiones, producto de sus políticas de mercado, que ayuden a la reactivación de la maltrecha economía.

Nota: Este escrito está basado en la traducción libre de una parte del artículo: The Economist. 2021. Cuba and Venezuela. Open up, hesintantly, to the market. Feb 13 th.

Profesor UCV