Ante todos estos hechos que vulneran la integridad física y el respeto de los jugadores, la FVF, también emitió un comunicado en el que rechazan esos actos de xenofobia, discriminación y agresiones contra la Vinotinto
Este miércoles la administración de Nicolás Maduro rechazó de forma categórica las recientes agresiones de las que fueron objeto los jugadores de la Vinotinto luego de finalizar el partido que sostuvieron contra su similar de Perú en el marco de la sexta fecha de la eliminatoria sudamericana para el Mundial de 2026.
A través de la plataforma X, el canciller de Maduro, Yván Gil, denunció que el gobierno que lidera Dilma Boluarte cometió una nueva arbitrariedad ante los futbolistas criollos, tras impedir que el avión que tiene previsto llevar de vuelta a los jugadores a Venezuela, pueda recargar de combustible para así poder emprender su regreso.
“El gobierno de Perú aplica un secuestro, vengativo a nuestro equipo, que ha realizado un extraordinario juego el día de ayer. Exigimos el cese inmediato de las agresiones en contra de nuestra selección y del pueblo venezolano, asumiendo sus obligaciones en el marco del respeto al Derecho Internacional y desechando las prácticas de xenofobia”, sentenció Gil.
Este nuevo atropello se suma a las agresiones que sufrieron los jugadores por parte de funcionarios de seguridad de Perú, luego que algunos de ellos quisieran tener un gesto con los fanáticos minutos después de finalizar el partido que culminó con pizarra de 1-1.
En un video difundido en redes sociales se pudo observar como los uniformados agredieron física y verbalmente a los deportistas quienes intentaban interactuar con el público asistente. El incidente provocó la ira de los fanáticos en el estadio y en redes sociales.
Horas antes del partido autoridades peruanas anunciaron además que instalarían un punto de control migratorio en el estadio para así poder revisar el estatus legal de los venezolanos que irían a ver el partido, algo jamás visto en un evento deportivo, lo que podría entenderse como un acto de xenofobia.
Incluso programas deportivos peruanos, ironizaron y “bromearon” sobre el posible triunfo o derrota de la Vinotinto, que según fuera el caso, subirían o bajarían el precio de las “chamas”, aludiendo a las mujeres venezolanas a las cuales catalogaron veladamente de damas de compañía.
Ante todos estos hechos que vulneran la integridad física y el respeto de los jugadores, la Federación Venezolana de Fútbol (FVF), también emitió un comunicado en el que rechazan esos actos de xenofobia, discriminación y agresiones contra la Vinotinto.