Tablero político…
Apreciación de la situación política # 124
Las elecciones del pasado domingo 15-O, trajeron resultados inesperados tanto para el gobierno como para la oposición, aunque esta última fue la más sorprendida. La pérdida de casi tres millones de votos en relación a las elecciones parlamentarias del 2015 no se podía prever, más aún, cuando las encuestadoras nacionales tampoco las previeron, de manera de que lo que podría haber sido una victoria electoral de la oposición, aún con todas las deventajas y obstáculos que se impusieron en la última semana, pasó a convertirse en una franca, e inesperada, derrota electoral.
En comparación, el régimen, con todos los factores electorales a su favor pero con más del 75% de rechazo en su gestión logró, con trampas incluidas, obtener una votación por encima de los cinco millones, muy similar, a los obtenidos en las parlamentarias del 2015. El dato importante es que aunque la participación electoral se ubicó en 61%, en las parlamentarias fue del 74%, ese 13% jugó en contra de la oposición. En otras palabras la abstención de la oposición democrática marcó la diferencia. El por qué de esa abstención es la tarea urgente de la oposición democratica concentrada en la MUD-AN.
Sin embargo, y en beneficio de la oposición, paralizada por la sorpresa y argumentando, tibiamente, fraude electoral sin actas en mano – a excepción del caso del estado Bolivar- el régimen, engolosinado por la sorpresiva victoria, en vez de reconocer a los gobernadores opositores electos para subir puntos ante la comunidad internacional demostrando un poco de talante democrático, ha hecho todo lo contrario, justificando e incrementado el fraude electoral continuado forjando actas y suprimiendo centros de votación que favorecía a la oposición. No contento con eso, con el artificio de juramentación de los gobernadores ante la fraudulenta ANC mediante gaceta “oficial” de la misma, pretende, como de hecho lo hace, inhabilitar a los gobernadores opositores hasta que reconozcan a la ANC. Esta acción insconstitucional ya ha sido rechazada por diferentes países. En consecuencia, lo que podía haber sido una victoria electoral indiscutible para el régimen, lo han revertido en una prueba fehaciente de las arbitrariedades de la dictadura.
Los factores de la oposición se han desmarcado, acertadamente, de la culpa abtencionista –que no deben olvidar- y se han enfocado en la denuncia del fraude electoral continuado a nivel internacional y denunciar las arbitrariedades del régimen en contra de los gobernadores opositores que es lo que corresponde. Ya el jefe del régimen ha anunciado elecciones municipales, la MUD y AN deberan pensar muy bien si continuan participando en estas farsas electoreras.
@lesterllopezo