¿Lograremos refundar la democracia?
En conversación de amigos surgió la aporía de Zenón, quien postulaba que Aquiles, “el de los pies ligeros”, mencionado en la Ilíada, no podía alcanzar a una tortuga que había salido antes que él. Como sabemos, los griegos realizaron aportes fundamentales al pensamiento de la humanidad, pero a veces el “dulce far niente” los hacía divagar sobre la inmortalidad del cangrejo. Esopo, que a pesar de ser fabulista tenía los pies sobre la tierra, escribió que la tortuga le ganó a la liebre porque esta se quedó dormida pensando que la alcanzaría fácilmente. En nuestro caso, inicialmente muchos se quedaron dormidos en la lucha por la democracia. Cuando despertaron, el totalitarismo nos llevaba ventaja, aunque lo vamos a derrotar y reconstruiremos la democracia, siempre y cuando nos pongamos de acuerdo.
Después del derrocamiento del dictador Pérez Jiménez algunos pensaron que era conveniente postular a un solo candidato. Aunque esa tesis tenía algunos puntos a favor, el argumento no era contundente ya que el régimen no tenía candidato, ni prestigio. Por ello, compitieron Betancourt, Larrazábal y Caldera. Caso contrario fue el de Chile, donde el dictador Pinochet tenía respaldo, por lo que la oposición se unió alrededor de Patricio Aylwin. En nuestro caso, Maduro no tiene respaldo popular, pero si apoyo incondicional del Alto mando Militar, Tribunal Supremo de Justicia, de la mayoría del Consejo Nacional Electoral, de la Contraloría y de la Defensoría. Lo procedente hubiese sido que la oposición acordara presentar un candidato de reconocido prestigio para garantizar la derrota del régimen.
Como se dice popularmente, a lo hecho, pecho. No queda otra opción que apoyar las primarias, superar todos los obstáculos que pone el régimen y limar las dificultades que surgen en la oposición. No será fácil. En nuestras filas, algunos quieren que las primarias sean con participación total o parcial del CNE, otros que este organismo no debe participar. Desde luego, este es un evento de la oposición y no del CNE. Sin embargo, este organismo tiene la obligación de colaborar autorizando el uso de los tradicionales centros de votación, así como cierta protección policial para evitar que los paramilitares rojos agredan a los votantes y se roben algunas urnas.
Aunque las máquinas no alteran los resultados si se auditan previamente y si tenemos testigos, muchos desconfían de las mismas y, además, no son necesarias. Quienes insisten en que se utilicen tienen el argumento de que en las presidenciales tendremos que contar con ellas. Sin duda que decir a los electores que no queremos las máquinas porque allí está la trampa, y luego convocar a votar con ese instrumento en las presidenciales confunde a los ciudadanos. Por ello, el argumento no debe ser satanizar las máquinas, sino que no agregan valor y causan cierto temor. Las capta huellas son inadmisibles porque el régimen puede elaborar otra lista Tascón y no debería haber discrepancias en este punto.
Es entendible que muchos estén escépticos en relación a que el régimen pueda salir por elecciones. No les falta razón. Sin embargo, los civiles tenemos solo dos opciones, votar o participar en una insurrección popular que sería reprimida sangrientamente, como ha ocurrido en el pasado con simples manifestaciones pacíficas. Estemos o no de acuerdo, no queda otra que votar en gran número en las primarias y masivamente en la presidencial.
Algunos rechazan a varios de nuestros precandidatos achacándoles la culpa por la permanencia del régimen. Sin duda, que han cometido errores e inconsistencias, pero Maduro sigue en Miraflores por el apoyo militar y de todos los poderes del Estado que tiene bajo su control. Por otra parte, cualquiera de nuestros candidatos es mucho mejor que Maduro.
Apoyar las primarias es imprescindible, como paso previo, para salir de Maduro y refundar la democracia. En Gente del Petróleo las apoyamos, pero solo haremos campaña por quien sea el contendor de Maduro. Unos candidatos son mejores que otros, pero todos quieren enfrentar al régimen, excluyendo a los alacranes. Desde luego hay varios que están conscientes de que están bajos en las encuestas. Políticamente es lógico que deseen proyectarse, pero esperamos que la mayoría tome conciencia de que el momento no es el adecuado para promocionarse y se retiren mucho antes del 24 de octubre. Lo ideal es que al final permanezcan los tres que tengan mayor aceptación y menor rechazo del electorado. No podemos ser tan insensatos de no intentarlo
Un punto a considerar es con quién se sustituiría a quien gane la primaria en caso de que el régimen no le permita competir, como sucedió en Barinas y en Nicaragua. Por otra parte, no puede descartarse el escenario de que, por diferentes razones, no se realicen las primarias. Para esa posibilidad se requiere estar preparados.
Una vez desplacemos a este régimen destructor, contamos con los recursos humanos para refundar la democracia y reconstruir el país. La liebre de Esopo perdió por enchinchorrarse, no porque la tortuga fuese más veloz. El régimen tiene más fuerza, pero no tiene apoyo de los ciudadanos. Por ello es derrotable.
Como (había) en botica
Nuestra solidaridad con Juan Guaidó. Asumió un compromiso para el que no estaba preparado. Ha sido valiente al arriesgar su libertad e incluso su vida. Su familia ha sido acosada. Los diputados de la Asamblea 2015 lo echaron sin piedad y sin razón a los leones. Nos alegramos de que siga en la lucha desde el exterior. Fracasó en no poder cumplir su prédica de poner fin a la usurpación, pero cabe preguntar si le dimos las herramientas y si algún otro dirigente hubiese tenido éxito. Solo fracasa quien no intenta el logro. ¡Bravo, Guaidó!
La ONG SOS Orinoco continúa con sus denuncias bien fundadas del ecocidio promovido por el régimen a lo largo del rio Caroní.
¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!
2 de mayo 2023