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Lester L. López O.

Apreciación de la situación nacional # 49

Lester L. López O.

Sin dólares, no hay paraíso…

Una semana de expectativas ofrecidas, tanto por el gobierno, como por la oposición, termina con la sensación de que “todo seguirá igual” o de “más de lo mismo”, no contribuye a mejorar la poca esperanza que aún le queda a la mayor parte de la población venezolana, por lo que el escenario de una explosión social que obligue al gobierno, y a la oposición, a negociar en serio se hace más evidente.

Por una parte, el presidente de la AN, al finalizar la semana pasada declara que la crisis del país no admite seis meses para proponer un método constitucional, pacífico, democrático y electoral que cambie al gobierno y anuncia que durante el fin de semana se tomará una decisión en tal sentido porque el país no puede esperar seis meses más. El martes, en entrevista con una agencia internacional de noticias considera que la enmienda constitucional para recortar el periodo presidencial pareciera la que presenta menos inconvenientes para salir del presidente, pero esto aún no está decidido dentro del MUD. Dos días después, la dirigencia del partido Primero Justicia anuncia total respaldo a la propuesta de referendo revocatorio propuesta por el gobernador de Miranda, en lo que parece una decisión inconsulta con el resto de MUD y del propio presidente de la AN. El viernes, al finalizar la tarde, el secretario ejecutivo de la MUD en entrevista radial “aclara” que la ruta es reemplazar en marzo a los dos rectores del CNE que se les vence su periodo ese mes, anular la designación inconstitucional de los últimos magistrados del TSJ aprobada por la AN pasada para luego pensar en las formas constitucionales de cambiar al gobierno, sin olvidar que este año también hay elecciones de gobernadores donde hay posibilidades de ganar 19 de estas, o sea, algo así como “ya vamos pa’llá” o, “podemos caminar y mascar chicle a la vez”. Dentro de estos cursos de acción y puntos de vistas “armónicos” de la oposición democrática, algunos se preguntan: Pero ¿tendremos país en diciembre?

Por la otra parte en el ínterin, el miércoles, después de cinco horas de cadena de radio y tv al más puro estilo del difunto eterno, el jefe del régimen anuncia 14 motores más (no aclara que ya habían tres desde hace dos años) para impulsar, ahora sí, la economía productiva acompañada de unos ajustes cambiarios del valor del dólar, sólo para los enchufados que pueden tener acceso a los mismos, ya que el control continua para el resto de la población, y el incremento del precio de la gasolina que no será para disminuir las pérdidas de PDVSA y reestructurar sus costos de operación para que produzca más, sino para programas sociales populistas donde los administradores se ganan la mayor parte y los beneficiarios son muy pocos.

Nada de disciplina fiscal, nada de garantías a la propiedad privada, ningún tipo de generación de confianza para posibles inversionistas extranjeros, nada de reestructuración de la deuda externa para buscar mejores condiciones de pago, ni intenciones de iniciar conversaciones con organismos multilaterales para conseguir divisas frescas para pagar a acreedores y suplidores internacionales y oxigenar las importaciones, mucho menos nombrar un economista serio que pueda iniciar algún tipo de gira internacional para auxilios financieros. Solo 14 motores con ideologías fracasadas como combustible, eso sí, más controles, más reuniones con más gente, más consultas populares, más bla, bla, bla, y pastoreo de nubes, con lo que no se arregla nada.

Emulando el llamativo nombre de la obra “Sin tetas, no hay paraíso” alguien tendrá que decirle al régimen que sin dólares, tampoco habrá paraíso. Pero que se lo diga pronto.

20 de febrero, 2016

Apreciación de la situación nacional # 48

Lester L. López O.

Esta semana la sala constitucional de TSJ decidió, finalmente, quitarse la careta institucional y dejar ver su verdadero rostro rojo rojito, fallando a favor del decreto de emergencia económica propuesto por el jefe del régimen al inicio del año, que fue negado en el uso pleno de sus facultades constitucionales, por la nueva Asamblea Nacional. La sala constitucional, simplemente, no tiene la facultad para abrogarse semejante atribución y en consecuencia prefiere violar la Constitución Nacional a decirle al gobierno que no puede anular la decisión de la AN.

Esto crea un limbo jurídico institucional que enfrenta abiertamente tres poderes constituidos, dos de ellos por la expresión de la voluntad popular, la presidencia y la asamblea nacional y el otro por designación de la AN, como es el TSJ y sus salas respectivas, por lo que constitucionalmente, esta última no puede estar por encima de la voluntad del elector y debe, más bien, cumplir una labor de equilibrio para que se haga lo justo.

Abstrayéndose de estos principios, es incomprensible que la sala constitucional no se percate que el referido decreto de emergencia sólo hará empeorar las penurias que vivimos los venezolanos ya que, definitivamente, el gobierno no tiene la posibilidad de resolverlas porque precisamente el gobierno, es el problema.

Esta apreciación, ahora más generalizada dentro de la sociedad venezolana, incluyendo buena parte de los simpatizantes chavistas, apunta a la necesidad de cambiar al gobierno de la forma constitucional, pacífica, democrática y electoral mediante un método que se propondría dentro de seis meses según palabras iniciales del presidente de la AN al instalarse la misma el 05 de enero pasado. Sin embargo, las actuaciones arbitrarias del régimen, incluidos su poderes compinches, hacen ver que un plazo de seis meses (ahora cinco) luce excesivo y hasta peligroso para la existencia de Venezuela como país viable.

De allí que las palabras del presidente de la AN, durante la rueda de prensa ofrecida al país para fijar posición ante la ilegal decisión de la sala constitucional, al manifestar que quedaba sin efecto ese plazo de seis meses y que se abocarían a buscar el método para cambiar al gobierno en un tiempo más perentorio, evidencia la gravedad de la situación donde parece que la mejor opción del régimen es propiciarse un golpe de estado.

Para este cambio, sin duda impostergable, la AN y la oposición democrática deben activar inmediatamente la presencia de organismos e instituciones internacionales que garanticen el mantenimiento del precario estado de derecho que aún nos queda, mientras se ejecuta el método de cambio acordado y generen la suficiente presión institucional externa, ya no solo para el proceso de cambio, sino más importante aún, para preservarnos como país.

13 de febrero de 2016

Apreciación de la situación nacional # 47

Lester L. López O.

Aunque siempre se puede estar peor, la situación del país cada día tiende a eso, a empeorar, aunque a decir verdad, también desconcierta la cantidad de venezolanos que pareciera que no vivieran en este país, ya que, a pesar de las consecuencias visibles y notorias de la crisis económica y de inseguridad ciudadana, aunado a los deficientes servicios de los centros turísticos y recreacionales, se aprestan a pasar el asueto de carnaval en cualquier sitio que no sea en su casa “para olvidarse de la crisis y cambiar de ambiente”.

La situación es paradójica. Hace pocas semanas desde Margarita, por ejemplo, autoridades y comerciantes informan de la carencia de productos y servicios de calidad para atender a los turistas, principal actividad económica de la isla, y un día antes de iniciarse el asueto informan que “todo está listo para recibir a los turistas en esta temporada”. Los hoteles informan de un descenso importante de la ocupación hotelera, pero los sitios están abarrotados de temporadistas ¿Donde se alojan entonces?

Gente que hacen largas y consuetudinarias colas para comprar comida y otros productos de primera necesidad, se toman un merecido descanso en estas temporadas para regresar a seguir enfrentando la misma situación de colas y carencias que no desaparecieron durante las festividades.

En alguna regiones y ciudades del país el racionamiento de agua es de hasta cinco días y una cisterna de agua no vale menos de 8.000,00 Bs (por lo que también hay un buen negocio detrás de estos racionamientos, por lo menos para los dueños de las cisternas) y el presidente de Corpoelec anuncia que a partir del 10 del presente mes los centros comerciales deberán generar su propia electricidad pues serían racionados en horario de 1 a 3 pm y de 7 a 9 pm. La razón es que hay que darle un uso “racional” a la energía eléctrica, extraña respuestas después que se ufanaron de invertir más de 19 MM$ en años recientes para brindar un servicio eficiente ¿a quién? ¿No sabe el ministro de energía que la mayoría de los supermercados, en esos que la gente hace largas colas para comprar comida, están ubicados en esos centros comerciales? Eficiencia socialista, revolucionaria y bolivariana.

Otro anuncio importante es que ya los tradicionales operativos de seguridad están listos para garantizar la seguridad ciudadana durante la temporada, con miles de efectivos desplegados en los sitios turísticos y en las principales vías nacionales. ¿Son esos los mismos garantes que permiten que los pranes y otros grupos delincuenciales impongan toques de quedas en sectores de nuestras ciudades y asalten cuarteles e instalaciones militares con grupos fuertemente armados con armas largas para robarse el armamento allí resguardado? Mientras tanto el ministro de la defensa y el de interior y justicia están en un acto con su comandante en jefe intentando convencer a los venezolanos, una vez más, que el fallido golpe de estado del 04F de 1992 fue una gesta histórica y gloriosa del difunto eterno cuyo producto final es el desastre de país en el cual vivimos.

En un país donde la política socialista del siglo XXI es siembre lo que coma, busque el agua en las fuentes o páguela si tiene dinero, genere su propia electricidad, trabaje en lo que pueda y cobre lo que quiera, pero disfrute en grande sus carnavales que la seguridad y los servicios están garantizados por el gobierno. Muchos ciudadanos lo creen, ya no se sabe si cambiar de gobierno sea una buena idea.

06 de febrero de 2016

La nota de prensa semanal

Lester L. López O.

Solución a la calidad y la escasez del agua potable en Aragua

La escasez del agua potable no se debe precisamente a la falta de agua o recursos hídricos. Más bien es propiciada por dos excesos principales: exceso de contaminación ambiental y excesos de legislación y burocracia.

El exceso de contaminación ambiental sobre los efluentes que llegan a los embalses y posteriormente a las plantas de tratamiento, hacen que las mismas se colapsen en la primera etapa del proceso, es decir se obstruyan las rejillas y los filtros iniciales por lo que disminuye el caudal de agua hacia la segunda etapa y así sucesivamente por lo que al final la cantidad de agua potabilizada es significativamente menor a la que realmente podría aportar la planta. Además de esto, el tipo de contaminantes exigen la mayor utilización de compuestos químicos para obtener un agua potable con la calidad de los estándares internacionales que son los mismos exigidos por la legislación venezolana. Eso explica, entre otros factores, por qué a pesar de estar rodeados de cuerpos de agua importantes tenemos escasez de agua potable.

Por otra parte, el listado de las leyes ambientales venezolanas y sus diferentes normativas sobrepasa en mucho las 50 publicaciones, que buscan proteger el ambiente y especialmente las aguas. Congeniar esta cantidad de leyes y normativas es realmente complicado porque muchas veces son contradictorias en su aplicación, especialmente porque las mismas contemplan la participación múltiples organismos, institutos, gobernaciones, alcaldías, concejos locales de planificación, concejos comunales, escuelas, etc., donde al final se diluyen las responsabilidades, se dificulta la planificación para lograr objetivos concretos y finalmente las pocas decisiones que se puedan tomar son de difícil cumplimiento, especialmente, cuando implica el manejo de recursos financieros. Como se puede observar, este exceso de leyes e intervinientes, lejos de contribuir con la solución vienen a ser parte del problema.

En consecuencia, se evidencia que el problema de contaminación no se soluciona con más y mejores plantas de tratamiento sino disminuyendo drásticamente y con las medidas adecuadas los niveles de contaminación en nuestros recursos hídricos naturales. Igualmente se evidencia que el exceso de legislación y competencias ambientales lejos de resolver los problemas tienden a aumentarlos.

Una de las posibles soluciones es comenzar a sectorizar los ambientes hídricos nacionales que están plenamente identificados en el Sistema de Información para la Gestión Integral del Agua (SIGIA) y el Plan Nacional para la Gestión Integral del Agua (PNGIA) del Ministerio para el Ecosocialismo y Aguas (MINEA).

En esa información oficial, accesible en la web, se puede observar que la Cuenca Hidrográfica del Lago de Valencia aporta el 48,94% de la demanda nacional en un área geográfica de 3.519 km², que siendo la menor del país, aporta casi la mitad de la demanda de consumo requerido, por lo que se hace prioritario y urgente buscarle una solución viable que se pueda comenzar a implementar en el corto plazo.

Por esta razón, Aragua en Red en acto público realizado el 24 de septiembre del pasado año entregó, a los ahora diputados electos por Aragua, un anteproyecto de ley denominado “Ley Programa para el aprovechamiento sustentable de las aguas de la región hidrográfica del Lago de Valencia”, para que sea discutido y aprobado en tiempo perentorio en la Asamblea Nacional. Esta propuesta se enfoca principalmente en la descontaminación ambiental del área geográfica citada y en la creación de una autoridad única que presida un instituto autónomo y con presupuesto propio que sistematice el exceso de legislación y de burocracia que hasta ahora se muestran como los mayores problemas para alcanzar una solución sustentable.

5 de febrero, 2016

Apreciación de la situación nacional # 46

Lester L. López O.

El homicidio de un pran en Margarita, liberado hace un año, saliendo de una discoteca no hubiera sido un suceso mayor si no sale a la luz pública, vía redes sociales, un video donde algunos presos del penal de esa entidad federal, ubicados en el techo del mismo, rendían un homenaje póstumo al delincuente ultimado disparando, al cielo, con armas largas y cortas, proyectiles de diferentes calibres y en cualquier cantidad evidenciando que la munición disparada no tiene ningún tipo de problema para su reposición inmediata. Un arsenal, pues, dentro del recinto carcelario.
Otro video da cuenta de una gran multitud de personas que acompañaron al occiso a su última morada, como si de un héroe se tratara, bajo la mirada vigilante de funcionarios de la guardia nacional bolivariana y policías nacionales desplegados para evitar que se produjeran incidentes que lamentar durante la ceremonia.
Una sorprendida ministra de asuntos penitenciaros, felicitada y ratificada en su cargo por el presidente del régimen, declara que había que abrir unas averiguaciones porque esa era una penitenciaría “pacificada” y no deberían existir ese tipo de armas dentro de la misma, denotando así la falta de control y supervisión que ella y sus subordinados tienen sobre esos recintos.
El almirante jefe de la zona de defensa integral de la región insular declara que no es competencia de la guarnición militar el orden dentro del penal, lo que es cierto, y que solo le compete a la guardia nacional el resguardo externo de la instalación. El resguardo interno es del ministerio de prisiones dirigido por la sorprendida ministra.
¿Le sorprendería también a la ministra saber que en ese, y otros recintos, los denominados pranes disfrutan de discotecas, parques infantiles, abastos con productos regulados, piscinas y otro tipo de comodidades que nada tienen que ver con el proceso de rehabilitación de condenados, incluso los de alta peligrosidad?
Pero ¿Quién ha pagado esa instalaciones recreativas y quien dio los permisos correspondientes?
Es indudable que existe por parte del gobierno y los pranes, un acuerdo que revela el grado de deterioro moral y ético de los funcionarios de este régimen - y hay que incluir a todos los funcionarios- porque es difícil de creer que en las reuniones del gabinete ejecutivo este tipo de situaciones no se discutan o pasen debajo de la mesa, al igual que otros casos de corrupción que ahora salen y seguirán saliendo a la luz pública por las investigaciones de las diferentes comisiones de la nueva Asamblea Nacional.
Mientras tanto el presidente intenta en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericano y del Caribe (CELAC) que le aprueben un plan táctico anticrisis económica siendo que el resto de los países integrantes no están pasando por este tipo de crisis ¿Está hasta tal punto desinformado el régimen que no sabe que el único país con crisis de todo tipo es el nuestro que ellos mismos representan? ¿O es que no tienen vergüenza o sentido del ridículo, para infortunio de los venezolanos?
Pero las cosas no se quedan allí. Diferentes ministros compitieron con el presidente para ver quien daba la declaración más insensata, desde que la crema dental se agota porque el venezolano se cepilla tres veces al día, o que el venezolano gasta mucho porque compra cinco pares de zapatos al año, o que los Estados Unidos nos tienen envidia porque pronto seremos potencia ¿Potencia de qué?
Lo cierto es que en un país cuya población, ante la crisis económica, moral y política que le agobia, espera algún tipo de propuesta inmediata que al menos le de esperanza y escuchando este tipo de declaraciones del presidente y sus ministro no puede menos que comenzar a pensar en un cambio urgente de gobierno, y las vías electorales no son, precisamente, las más inmediatas para ese cambio urgente.
29 de enero de 2016

Apreciación de la situación nacional # 45

Lester L. López O.

Pocas dudas deben de quedar que la política económica del gobierno responde al pragmatismo político puesto de moda por Eudomar Santos, famoso personaje de la telenovela venezolana de los noventas “Por estas calles”, que decía cuando se le preguntaba ¿Qué vamos a hacer? respondía sin inmutarse: “como vaya viniendo, vamos viendo…”. Tal parece ser la política del gobierno ante la crisis económica que el mismo creó.

El parapeto jurídico con el nombre de “Decreto mediante el cual se declara el Estado de Emergencia Económica en todo el Territorio Nacional”, era imposible de aprobar por cualquier grupo colegiado medianamente sensato que entendiera un poco de principios de economía, mucho menos por la bancada opositora de la AN.

Lo que parecía una jugada del gobierno para ganar tiempo y crear mayor crispación política en el ambiente nacional para endosarle, a partir de ahora, cierta culpabilidad de la crisis económica a la oposición democrática, fracasó al no contemplar que en la nueva situación de la AN los ministros deberían comparecer públicamente ante la comisión creada para debatir el decreto y mucha información “secreta y sensible”, como los mismos voceros del régimen manifestaron, saldría a la opinión pública. Lo de un “reality show” montado por la bancada mayoritaria fue la excusa para no asistir a las interpelaciones y en consecuencia decretar, ellos mismos, la anulación del decreto.

La mala noticia para los venezolanos es que la política de “como vaya viniendo, vamos viendo…”, no aporta nada a la solución de las penurias y crisis económica que nos agobia. Las esperanzas de algunos, no muchos, de que ante semejante crisis el régimen buscaría una vía de entendimiento con la oposición para encontrar soluciones al menos para las medidas más urgentes, como por ejemplo, unificar el tipo de cambio y eliminar el control cambiario se esfumaron ante la actitud del gobierno.

A todas luces después de 16 años los ministros no tienen ni memorias, ni cuentas que presentar, y al igual que pasó con la la caída de los precios petroleros y la sorpresa de la perdida de la mayoría parlamentaria que aún no han asimilado, ahora les sorprende que deben rendir cuentas a la AN que nunca pensaron que deberían de rendir.

En consecuencia, no es de sorprender, que próximamente las comisiones delegadas comiencen a manifestar la no comparecencia de los ministros y sus delegados, y carencia de datos confiables aportados por estos entes gubernamentales mientras la crisis se acentúa. Cada día las palabras del presidente de la AN de buscar en los próximos seis meses una solución constitucional, democrática, pacífica y electoral para salir de este gobierno tiene más vigencia y ahora también, más urgencia.

23 de enero de 2016

Apreciación de la situación nacional # 44

Lester L. López O.

En esta oportunidad referiremos la apreciación al estado Aragua pero que en su mayor parte puede observarse para los demás estados regionales de nuestro país.

Es indudable que el rotundo triunfo obtenido por los candidatos de la oposición democrática a la Asamblea Nacional el pasado 06 de Diciembre excedió, en mucho, las predicciones más optimistas de diferentes analistas electorales y hasta de la propia MUD regional. En efecto, haber obtenido 8 de los 9 diputados en disputa en Aragua, cuna de la revolución chavista e ícono del régimen, es un logro de profunda significación política que debe leerse lo más objetivamente posible para poder situarse en la dimensión apropiada y cumplir con las expectativas del electorado.

El esfuerzo de cada candidato y su comando de campaña para alcanzar el triunfo, debe reconocerse sin ningún tipo de mezquindad política. La presencia de ellos en las comunidades, especialmente en las que la simpatía chavista prevalecen, permitió una conexión que ya habían perdido los oficialistas y antiguos candidatos de la oposición democrática. Sin duda esta posibilidad y estrategia asumida por los candidatos de la unidad, incluyendo a los suplentes, fue decisiva para obtener la importante victoria.

Pero también debe considerarse, y mantener permanentemente en cuenta, que la crisis económica generada por el propio gobierno y su evidente incapacidad para resolverla, convenció a la población, incluyendo a los simpatizantes chavistas, de la necesidad de buscar soluciones viables ante los reiterados intentos del régimen de buscar respuestas políticas a problemas económicos, por lo que el “cambio”, como oferta electoral de la unidad nacional, impulsó el triunfo opositor que ahora está obligada a satisfacer estas expectativas si se quiere en un tiempo perentorio.

Así mismo, la “Unidad”, como factor electoral y político, también tuvo su peso específico decisivo en la victoria decembrina al monopolizar en una sola tarjeta, y en un solo discurso, el voto de la sociedad civil mayoritariamente opositora que no compró las ofertas de las “terceras vías” patrocinadas por el propio régimen para restar votos a la unidad nacional.

Contacto directo con las comunidades, ineficiencia gubernamental, mensaje de cambio y Unidad nacional fueron, a nuestro entender, los factores decisivos para la victoria, en una magnitud no esperada, que obliga a administrar eficiente y eficazmente ese resultado.

Por estas razones es que una vez instalada la Asamblea Nacional, juramentados los diputados y asignados a sus respectivas comisiones de trabajo, escuchada la memoria y cuenta del presidente, es imprescindible que los mismos recuerden de quienes son representantes y quienes y para que fueron electos, olvidarse de estos compromisos sería continuar con el viejo vicio político de olvidarse de los electores una vez alcanzado el triunfo electoral.

A fin de evitar estas situaciones, conviene a los diputados electos y a los propios partidos integrantes de la MUD regional tomar algunas acciones pertinentes:

  1. Mantener el contacto permanente, logrado con las comunidades locales durante la campaña electoral, para informar de las acciones y actividades desarrolladas en la Asamblea Nacional, destacando aquellas que afectan o benefician al estado Aragua, a sus municipios y el quehacer diario de la gente; para esto es necesario abrir y mantener al menos cuatro oficinas parlamentarias (una por cada circuito electoral) que les permitan a los diputados mantenerse en contacto con la gente o con las comunidades al menos una vez a la semana;
  2. Efectuar una vez a la semana ruedas de prensa exponiendo las ineficiencias del gobierno, especialmente aquellas que tengan que ver con la crisis económica, el desabastecimiento, la inflación y las colas, y qué se está haciendo desde la AN para resolver estos problemas, así mismo, el tema de la inseguridad ciudadana debe abordarse con igual intensidad;
  3. Informar periódicamente de la posibilidad de cambiar al gobierno mediante un método constitucional, democrático, pacífico y electoral, como lo informó el presidente de la AN en sus palabras de inicio de las sesiones parlamentarias, con la idea de ir familiarizando a la población en este tema;
  4. En su momento, Aragua en Red entregó a los entonces candidatos, un documento denominado “La Aragua que queremos, de todos y para todos” donde se incluyen algunas iniciativas parlamentarias que afectan a nuestra región. Dentro de ellas destaca el proyecto de “Ley orgánica para la recuperación y desarrollo sustentable de la cuenca hidrográfica del lago de Valencia” que es de capital importancia para el futuro de Aragua y Carabobo, ya que ambas entidades se ven afectadas por esta problemática. Ese proyecto podría aprovecharse para conformar un bloque parlamentario de 16 diputados de los dos estados que permita impulsar no solamente el proyecto de ley mencionado, sino otras iniciativas que serían de beneficio para las poblaciones de ambas entidades.

Finalmente, este año están previstas las elecciones para gobernadores y Consejos Legislativos, si la situación política, económica y social del país lo permite. Esta actividad electoral debe abordarse en el momento adecuado para evitar salirse de los temas que afectan a diario a la población y en todo caso el factor Unidad, y dentro de ella la realización de primarias para la selección de los candidatos, deben primar en función del acuerdo firmado en un documento de la MUD nacional el pasado año.

16 de enero de 2016

Apreciación de la situación nacional # 43

Lester L. López O.

A pocos días después de instalada la nueva AN y obviando los escarceos surgidos durante el acto y en los días subsiguientes entre los oficialistas y oposición, se pueden observar algunas precisiones, de parte y parte, de sus acciones en el futuro inmediato.

Primeramente el régimen y sus representantes no han superado o asimilado la derrota electoral del pasado 06D, el discurso oficial así lo demuestra. Este estado de desconcierto impide que los dirigentes gubernamentales se enfoquen en la causa de la derrota que no es más que la crisis económica, por ellos mismo creada, y en consecuencia también le impide elaborar una estrategia de negociación con la oposición para iniciar una solución a la crisis. Más bien el comportamiento del oficialismo se centra en el mantenimiento del poder político sin percibir que la crisis se acentúa cada día más y con ella el ya bajo nivel de aceptación que tiene el gobierno. Pero otras señales, decepcionantes y trágicas para los venezolanos, hacen ver que el presidente está lejos de comprender la naturaleza del problema económico al proponer una ley de emergencia económica fundamentada en la creencia de que la crisis la originó la caída de los precios del petróleo casi exclusivamente obviando otros factores que inciden decisivamente en la misma.

El nombramiento de un gabinete económico, prácticamente con las mismas caras responsables de la crisis, coordinado por un “sociólogo” con dudosas credenciales y experiencia económica, no puede ser interpretado de otra manera que la voluntad manifiesta – y hasta de burla - de no querer buscar solución a la misma, máxime cuando en una de sus primeras declaraciones manifiesta que la inflación es un problema de sensación de los venezolanos. La interpretación final es que el régimen busca una solución política a un problema económico que no resolverá la crisis y obligará a los venezolanos a buscar otras alternativas de gobierno.

Por otra parte sorprendió, en cierta manera, que en su discurso inicial el nuevo presidente de la AN, además de la ley de amnistía y las leyes para una economía productiva, mencionara un lapso de seis meses para proponer una solución constitucional, democrática, pacífica y electoral para cambiar al gobierno. En un primer momento pareciera un anuncio precipitado y provocador del parlamentario, pero si se toma en cuenta los anuncios del jefe del gobierno no debe caber la menor duda de que no en seis meses, sino en tres, ya los venezolanos estaremos pidiendo, o quizás implorando, la renuncia del presidente y su gobierno ¿Será esta la estrategia del régimen para forzar un proceso revocatorio, difícil de concretar con la precaria institucionalidad existente, para darse más tiempo en el poder? Y mientras tanto una situación económica insostenible ¿Serán los militares, que también sienten hambre, la solución final de este régimen, pidiendo también la renuncia y dejándole al vicepresidente el proceso de transición? Esperemos que el nuevo vicepresidente, por lo menos, no esté vinculado al narcotráfico. Así están las cosas.

08 de enero de 2016

Apreciación de la situación nacional # 42

Lester L. López O.

Luego del 22 de diciembre pasado, el presidente del régimen decidió pasarle el testigo de las apariciones públicas televisadas al capitán presidente de la Asamblea Nacional saliente, quizás convencido de la inutilidad de continuar amenazando a la nación con la profundización de una revolución derrotada por el voto popular de la mayoría de los venezolanos, o por la contra revolución, como ellos mismos denominan a la oposición democrática. Inmediatamente el relevo tomó control de la situación con la bandera de sustituir a 12 magistrado del TSJ, jubilados forzosamente, y al mejor estilo de Jalisco, que si pierde arrebata, saltándose todos los procedimientos, lapsos legales y constitucionales impuso de manera írrita los nuevos “magistrados”, y unos cuantos suplentes, en un acto tan bochornoso, como deprimente, que buena parte de la bancada oficialista no se hizo presente. Tocará a la nueva AN resolver este adefesio jurídico próximamente.

Pero para el régimen el mayor problema son los 112 diputados de la oposición que lo coloca en una situación precaria para continuar, ya no con la revolución, sino con el sistema de corrupción y clientelismo político económico que ha sido su característica por casi 17 años de impunidad y de saqueo sistemático de las arcas públicas. La solución buscada es tan inconstitucional como grotesca al ordenar activar la Sala Electoral del TSJ para que reciba unas impugnaciones electorales omitiendo al organismo rector, el CNE, que es el que debe procesar este tipo de solicitudes, pero que ya dio por concluido el lapso para las mismas. Ante la presión de juristas y la opinión pública nacional e internacional, optó por declarar sin lugar las solicitudes y “suspender temporalmente” a tres diputados utilizando una figura legal inexistente y que deja, en consecuencia, según ellos en un limbo legal a los mismos. Pero la realidad es que los tres diputados están habilitados constitucionalmente para ejercer sus funciones a partir del 05 de enero cuando se instale la nueva Asamblea Nacional.

Para finalizar el año, el mandatario anuncia, mediante decretos, una serie de medidas económicas cuyas consecuencias previsibles son la de empeorar el clima económico en general y las posibilidades del sector privado de sortear la crisis con éxito este año.

El vocero de la MUD Nacional, y algunos presidentes de partidos, han enviado mensajes institucionales al Ministro de la Defensa recordándole su deber de hacer respetar la Constitución Nacional asegurando la instalación de la Asamblea Nacional en paz y sin la presencia de colectivos revolucionarios que impidan dicha instalación. Estos mensajes pueden ser procedentes, pero deben cuidarse de no convertir a la FAN en el árbitro final de las leyes y el gobierno, tal como lo dijo en su oportunidad el Libertador: “Un soldado feliz no adquiere ningún derecho para gobernar a su país, no es el árbitro de las leyes o del gobierno, es el defensor de la libertad”.

La presencia masiva del pueblo en la Asamblea Nacional es la que va a asegurar su instalación, no la FAN.

02 de enero de 2016

¡Volvieron…y nos pueden sacar!

Lester L. López O.

Esto, y no otras, es la principal angustia de la dirigencia y el mundo chavistas, y debe serlo, porque entraña una doble afrenta a las convicciones primarias revolucionarias existentes hasta el pasado 6D. El grito de ¡no volverán! convertido casi en un dogma por 17 años, el próximo 05 de enero del 2016 no solo perderá vigencia en los cuadros oficialistas sino posiblemente se les revierta en el futuro próximo ante la posibilidad cierta de que con una mayoría calificada de 2/3 en la AN, la unidad democrática tiene todas las posibilidades de acortar el periodo constitucional del régimen, posibilidad esta, que como que no estaba prevista por los estrategas de la élite gubernamental.

De allí que es comprensible la desesperación del régimen por disminuir el número de diputados de la MUD o la designación de nuevos magistrados en el TSJ comprometidos con el gobierno para tratar de parar el aluvión de investigaciones que se les viene encima. Más que el desastre económico que hay que atender primeramente, no serán sino los altos niveles de corrupción, el saqueo impúdico de las arcas públicas y las mafias de narcotraficantes y de lavado de dinero que finalmente determinaran la necesidad perentoria de cambiar el gobierno. De tal manera que “…y nos pueden sacar” no es un condicional que se pueda negociar entre el régimen y la nueva Asamblea Nacional que pueda darle un respiro al régimen para mantenerse, aunque sea precariamente, en el poder.

Con una apertura para que la prensa pueda nuevamente ejercerse libremente y acceder o publicar información que hasta ahora, por la ley mordaza, no es posible publicar, difícilmente la pareja presidencial, por ejemplo, puede salir ilesa de las investigaciones que se adelantan en USA por presunto narcotráfico de dos de sus sobrinos, pero que ya trasciende que hay un hermano de la primera combatiente implicado en ese caso y en otros vinculados al lavado de dinero ¿Es posible que con este tipo de implicaciones al presidente le quede un mínimo de moral que le permita continuar en funciones de gobierno?

Pero es que dentro del entorno gubernamental, quizás sea el presidente el que pueda demostrar, por ahora, mayor solvencia moral aun con el ejemplo mencionado anteriormente. La responsabilidad administrativa de muchos ministros acostumbrados a no rendir ningún tipo de cuentas medianamente seria, sin duda alguna florecerá en las primeras de cambio al ser interpelados por las comisiones permanentes de la AN y muchas serán las cabezas que rodaran, de tal manera que los niveles de irregularidades y corruptelas será tan elevados que harán inviable la continuación de este gobierno en el mediano plazo.

La conclusión final no será como se plantea en el título sino: “Volvieron… y nos van a sacar”.

25 de diciembre de 2/15