Pasar al contenido principal

Eddie A. Ramírez S.

¿Quiénes son colaboracionistas?

Eddie A. Ramírez S.

Colaboradores son quienes se reúnen, física o virtualmente, para realizar un trabajo. Para que la obra culmine exitosamente tiene que existir tolerancia entre los colaboradores. Cada uno debe aportar para que la suma de los talentos sea superior al de las partes. Es un hábito positivo que debe ser incentivado en nuestro sistema educativo. Por el contrario, un colaboracionista es un individuo que busca un beneficio personal y por esto colabora con los invasores de un país o con un gobierno títere impuesto por el enemigo.

Colaboracionistas en la historia: En la historia de la humanidad abundan los casos individuales y de poblaciones enteras que han colaborado con invasores, sea por interés personal o por afinidad ideológica. En la antigüedad, cabe recordar al tristemente célebre Efialtes, quien se vendió al persa Jerjes I facilitándole evadir el paso de las Termópilas. Durante la segunda guerra mundial abundaron los colaboracionistas con el régimen nazi: Quisling en Noruega, León Degrelle en Bélgica, Petain, Laval y Papon en Francia, entre otros, todos ellos traidores a sus pueblos. El uso de la palabra colaboracionista se atribuye a Petain, quien desde Vichy declaró que había que colaborar con los nazis. Después de la guerra, Quisling y Laval fueron fusilados. Petain y Papon estuvieron presos y Degrelle logró la protección en España del dictador Francisco Franco.

Colaboracionistas en Venezuela: En Venezuela, alguien desenterró esta palabra y algunos se la endosan a quienes se dicen de oposición, pero que se sospecha, con razón o sin ella, que directa o indirectamente apoyan a Maduro. Acusar sin pruebas se ha convertido en el deporte principal en nuestras redes sociales. Se ha abusado de ese epíteto. Sin duda que hay colaboracionistas, pero a veces se comete la injusticia de aplicarlo indiscriminadamente. Algunos acusadores lo hacen por percibir que determinada persona apoya al régimen por debajo de cuerda y pretende cohabitar con el mismo. Otros lo hacen para desprestigiar a alguien y no falta quienes se creen dueños de la verdad y consideran que cualquiera que piense diferente le hace el juego al régimen. Cuando las acusaciones tienen base, contribuyen a delimitar los campos, lo cual es deseable. Cuando carecen de la misma solo causan confusión en los ciudadanos y eso beneficia al régimen.

¿Quiénes son los colaboracionistas? No por negociar o por llamar a votar en las regionales se puede tildar a alguien de colaboracionista. Sí lo son quienes se dicen de oposición y predican que Maduro es el presidente constitucional y que su mandato finaliza en el año 2024. Son colaboracionistas los que reconocen la Asamblea Nacional usurpadora electa en diciembre del 2020. Son colaboracionistas los que promovieron que el TSJ removiera las directivas de Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular, Copei y Bandera Roja. Son colaboracionistas los ciudadanos Bernabé Gutiérrez, José Brito, Luis Parra, Gregorio Noriega, Miguel Salazar, Pedro Veliz, Jesús Gabriel Peña, Adolfo Superlano y Negal Morales, entre otros. También Enrique Ochoa Antich, quien defiende constantemente al usurpador Maduro. Ricardo Sánchez, Claudio Fermín y Timoteo brincaron la talanquera. Felipe Mujica y Henry Falcón tienden hacia el régimen. Así mismo son colaboracionistas los funcionarios, civiles y militares, que han permitido que cubanos castristas, iraníes y guerrilleros colombianos se hayan apoderado de nuestro país.

¿Quiénes no son colaboracionistas? Enrique Capriles y Eduardo Fernández no son colaboracionistas, aunque no son colaboradores en el trabajo de sacar al usurpador. No coincidimos con la posición de ellos, pero es injusto descalificarlos porque predican que hay que votar en las regionales y por no formar equipo con la mayoría opositora. Tampoco lo son Enrique Márquez y Roberto Picón, por haber aceptado ser rectores del CNE, aunque han debido esperar para ver si es posible una negociación integral. Mucho menos son colaboracionistas María Corina y Antonio Ledezma, aunque no son colaboradores, ya que están en constante desacuerdo con la mayoría opositora. Son luchadores valientes que quieren, con razón o sin ella, diferenciarse del resto.

El colaboraciómetro: No existe un colaboraciómetro para medir si alguien es colaboracionista o no. Tampoco para medir en una escala el grado de colaboracionismo. No hay medias tintas. O se es colaboracionista o no se es. También hay que considerar que cuando cesen las pasiones quizá nos daremos cuenta de que las percepciones de hoy no serán las mismas del mañana. Con toda seguridad no están en la lista de colaboracionistas todos los que son, aunque pareciera que sí son todos los que están. Al respecto cabe traer a colación el caso de la Malinche, la indígena mexicana que se casó con Hernán Cortés. Hasta hace poco era unánimemente condenada por colaboracionista, pero hoy se tiende a matizar su actuación. Por otra parte, después de la guerra, Papon fue considerado un patriota, hasta que se demostró que fue un colaboracionista responsable del envió de cientos de franceses judíos a campos de concentración y a la muerte. Por cierto, Efialtes todavía espera el pago.

Como (había) en botica:

Carlos Jordá, presidente de CITGO, presentó el Informe del primer trimestre de este año. En cambio, la Pdvsa roja no presenta sus resultados desde hace cuatro años.

Se cumplen dieciocho años del Acuerdo entre el gobierno y la oposición, con la OEA y el PNUD como facilitadores y testigos, en el que el gobierno se comprometió, entre otros puntos, a respetar la Constitución y nombrar un CNE independiente. Seguimos esperando.

El incapaz Padrino López demoró 20 días en enterarse de que la guerrilla colombiana tenía secuestrados a ocho militares venezolanos, y permanece mudo ante el ajusticiamiento, real o ficticio, del líder guerrillero colombiano Santrich, supuestamente ocurrido el 17 de mayo.

Felicitaciones al joven arquitecto Alejandro Vegas por su exposición en Madrid titulada Barricadas.

Lamentamos los fallecimientos de Nanci Guardia, Arlenis Arrieta de Rojas, Celestino Prada, Eduardo Cano y Tomás Pérez, compañeros de la Pdvsa Meritocrática.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

25-05-21.

Liderazgo y negociaciones

Eddie A. Ramírez S.

Cuando un equipo deportivo pierde varios partidos, pocos se molestan en indagar sobre las causas. De inmediato, los fanáticos descalifican al director técnico, obviando que a veces las derrotas son consecuencia de no disponer de recursos para contratar mejores jugadores. Alguien tiene que ser la cabeza de turco para desahogar la frustración. ¿Será este el caso de nuestro liderazgo político y de los liderados? ¿Debemos sustituirlo porque no ha logrado cumplir la promesa de sacar al usurpador Maduro? ¿El fracaso ha sido por ineptitud de los líderes o por fortalezas del usurpador? ¿Juan Vicente Gómez, Chapita Trujilo, Tacho Somoza, los Castro y otros se mantuvieron varias décadas en el poder por culpa de la oposición o porque contaron con una Fuerza Armada y un Poder Judicial sumisos y una población sometida por el terror?

Rechazo a Maduro: Las encuestas son contundentes. El rechazo a Maduro supera el 80 por ciento. Él ha pagado los errores de Chávez con las expropiaciones y estatizaciones, además de su ausencia de carisma y errores propios, quiebre de todas las empresas estatizadas, así como el desastre de los servicios de electricidad, salud, educación e infraestructura por ineptitud y corrupción, además de la hiperinflación.

Poca aceptación del liderazgo opositor: Lo anterior explica el gran rechazo a Maduro. Pero ¿cómo entender la poca aceptación del liderazgo opositor? Moisés ofreció la Tierra Prometida. Tardó 40 años, pero salvo un pequeño intento de motín, el pueblo respetó su liderazgo. En nuestro caso, cometimos el error de permitir que Chávez se apoderara de las instituciones con la Asamblea Constituyente de 1999. Ese error es responsabilidad de algunos de los dirigentes actuales, pero no de los más jóvenes como Guaidó, María Corina y Leopoldo López. Quizá esa poca aceptación se deba a que tenemos la tendencia a no evaluar las fortalezas del régimen, a que el hábito de la persistencia no está muy arraigado, a la desesperación por la difícil situación socioeconómica, a cierta inclinación a descalificar por cualquier motivo, a que le prestamos atención a cualquier improvisado en política y a que las redes sociales nos convirtieron a todos en opinadores. ¿Qué hacer? Un grupo de distinguidos ciudadanos está asomando la atractiva idea de realizar una consulta popular para legitimar el liderazgo. ¿Aceptarán los dirigentes medirse? ¿Estará interesado el ciudadano común en esa consulta? ¿Es el momento oportuno?

Posible negociación: Existe una duda razonable de que el régimen acepte negociar o que diga que sí, pero no ceda ni un ápice. Sin embargo, no es razonable que de inmediato algunos opositores se opongan a emprenderla. ¿Qué se esgrime? 1- Los moralistas: argumentan que con malandros no se negocia. Respetamos a quienes defienden esta posición idealista, pero cabe preguntarles qué es peor, si negociar con bandidos o dejar que gran parte de la población sufra penurias. 2- Los escépticos: alegan que como los anteriores intentos fracasaron, este también fracasará y solo sería legitimar al régimen. Evidentemente, este es un argumento poco racional. Si así fuese, nunca habrían terminado las guerras. 3- Los ilusos: Predican que hay otras vías, como la insurrección popular y la intervención regional. Quienes hemos estado durante muchos años en protestas de calle y hemos visto caer a valientes jóvenes y no tan jóvenes, estamos claros que esas protestas tienen sus límites en tiempo, espacio e intensidad; en cuanto a la intervención regional, está demostrado hasta la saciedad que ningún país está dispuesto a enviar sus soldados para acatar el compromiso de proteger. 4- Los optimistas: Predican que una cosa es el Alto Mando corrupto y otra el resto de la oficialidad. Cierto que existe esa diferencia, pero es bueno recordar que desde que se creó el ejército, solo el 18 de octubre de 1945 hubo un alzamiento exitoso sin intervención del Alto Mando. Es posible y deseable, pero es una incógnita que no depende de los civiles, ni de los militares retirados. 5-Los caza güiro: Están agazapados esperando cualquier traspiés del liderazgo para criticar.

Lo sensato: Pareciera que lo sensato es no descalificar a nuestra dirigencia, a pesar de sus puntos débiles. Esperar, con todas las dudas, que haya una negociación positiva. Se conoce que hay conversaciones y que Maduro y su combo están pidiendo cosas inaceptables. Era de esperar. Cuando se inicia una negociación, las partes exigen todo, para ir cediendo gradualmente. Capriles y Eduardo Fernández no han debido reconocer de inmediato a este CNE y Picón y Márquez no han debido aceptar ser rectores, ya que eso nos debilita en la negociación. Como dice Beatriz García, Coordinadora Nacional de Gente del Petróleo, “ la oposición está activada ,pero dividida, cada grupo se cree dueño de la verdad. No permitamos que el régimen logre su objetivo”. Si se quiere avanzar las partes deben ir cediendo, aunque el régimen es el que tiene que ceder más, pues es quien ha violado la Constitución. El Acuerdo de Salvación Nacional presentado por el presidente Guaidó puede ser la base de la unión y reconciliación. No perdamos la oportunidad.

Como (había) en botica:

Con el asalto del régimen al periódico El Nacional se le dio otro zarpazo a la libertad de expresión y a la propiedad privada. Nuestra solidaridad con su director y personal.

El secuestro de los generales retirados Ovidio Poggioli y Jorge Zedán Abudey es otra arbitrariedad por la que tendrá que responder Padrino López.

Diosdado Cabello hizo el ridículo al amenazar con llevar la guerra a territorio colombiano. La realidad es que la guerrilla de la FARC asesinó y secuestro a soldados venezolanos por una pésima operación de la Fuerza Armada de Maduro, Padrino y Ceballos.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

CNE: ¿Pasito tun tun?

Eddie A. Ramírez S.

¿Qué ha cambiado con el cuestionado CNE y con las declaraciones de Capriles, de Aveledo y de varios portavoces de gobiernos democráticos? ¿Cambió la situación política? ¿Fue un paso atrás, hacia la democracia, hacia el abismo o un pasito tun tun, es decir pa´ca y pa´lla?

El CNE: Sin duda el CNE fue nombrado por un grupo de ciudadanos a los que no reconocemos como diputados. Además, varios de ellos no cumplen con lo establecido en la Constitución. Sin embargo, algunos compatriotas, demócratas bien intencionados, consideran que es preferible explorar si con este CNE es posible iniciar una salida no traumática. A veces hay que tragar grueso para evitar males mayores.

Está claro que las elecciones regionales no resuelven nuestros problemas. También que Márquez y Picón estarán en minoría, con voz, pero sin que su voto cuente en las instancias del CNE. Desde que el chavismo-madurismo está en el poder ha controlado al CNE y este ha permitido trampas, entre ellas la instalación de mesas de votación clandestinas y el abuso del voto asistido. La trampa no está en las máquinas, sino cuando estas se dejan sin testigos y se extienden las horas de votación. El Registro Electoral no es confiable, pero no es allí donde está la trampa decisiva. Los militares del Plan República a veces han interferido en la votación, pero han sido casos aislados. A pesar de lo señalado, es preferible contar con dos rectores no afectos al régimen, que quizá no puedan impedir las trampas, pero que sí pueden denunciarlas. Descalificarlos es injusto y torpe. Habrá que esperar su actuación, que ojalá no sea timorata.

Capriles y otros voceros: Enrique Capriles reconoció a este CNE, considerándolo “un primer paso indispensable para abrir camino de cara a la democracia”. Añadió que “es una forma de empezar a abrir caminos… los cambios requieren mucho más que un árbitro electoral con contrapeso, pero esta es una oportunidad que ocurre en medio de una crisis política que permanece estancada". Capriles no es un colaboracionista. Su pecado es distanciarse del resto de la dirigencia opositora, con lo que debilita las negociaciones que esperamos continúen. Quiere volver a la palestra para ganar los puntos que ha perdido.

Citamos también a Ramón Guillermo Aveledo porque es un político de trayectoria impecable. Al respecto declaró que “el nuevo CNE abre una rendija de esperanza”, agregando que no está rebozando de optimismo, pero cree es un pequeño paso importante. Añadió que “hay que resolver otros puntos y que los estándares internacionales son muy claros para que haya elecciones libres, competitivas y justas”.

Varios voceros internacionales democráticos han saludado la designación del CNE, pero también han recalcado que eso no es suficiente, mencionando la necesidad de un Poder Judicial independiente, la necesidad de observación internacional y que “un CNE escasamente más equilibrado no sustituye a un proceso integral que conduzca a elecciones presidenciales y parlamentarias”.

Plataforma Unitaria Venezolana: Esta Plataforma, al frente de la cual está el presidente Guaidó, e integrada por 38 partidos políticos, manifestó que “Reiteramos que, ante la gravísima tragedia humanitaria y el sufrimiento del pueblo venezolano, la verdadera solución de fondo, consiste en construir un Acuerdo Político, Social y Humanitario que sea producto de una negociación integral con facilitación y mediación internacional. No debe imponerse unilateralmente al árbitro electoral. El CNE, así como el resto de las condiciones electorales, deben acordarse para que todos podamos tener elecciones libres, justas y competitivas”.

Situación política: No es la misma que hace algunos meses. El apoyo internacional pareciera haberse entibiado, las sanciones no han surtido todo el efecto deseado, aunque es evidente que Maduro se ha debilitado y pudiese estar dispuesto a ceder en algunos puntos. La oposición ha perdido cohesión. Los activistas de los partidos están deseosos de lograr una cuota del poder regional. Sin ese poder difícilmente podrán subsistir y los partidos se debilitarán aún más. No es lo mismo una elección parlamentaria que una regional. La población de los estados y municipios seguramente preferirá gobernadores y alcaldes que no sean rojos. Desde luego que el régimen hará lo posible por no reconocer a las autoridades electas de la oposición, como hizo con Andrés Velásquez y Guanipa, a través del sumiso TSJ, y en otros casos impondrá los llamados Protectores Por otra parte, hay que considerar que nos expresamos masivamente en la reciente Consulta Popular, exigiendo el cese de la usurpación de Maduro ¿Podrán los que decidan participar convencer a sus electores de acudir a las urnas?

Personalmente preferiría una intervención de la Fuerza Armada en respaldo a la Constitución. Descarto ese temor de algunos del peligro de que se queden con el coroto. Sus integrantes están conscientes de que están desprestigiados y que la comunidad internacional y los venezolanos no aceptaríamos otra dictadura. Ojalá se produjera un 18 de octubre de 1945 o un 23 de enero de 1958, pero como eso no depende de nosotros, no queda sino apostar a otras opciones. Por lo pronto, pareciera que lo prudente es no descalificar a los dos demócratas designados rectores del CNE, presionar por un frente unitario al que se incorporen Capriles, María Corina y Ledezma y que continúen las negociaciones para lograr mejores condiciones. Si se consiguen, y a falta de otras opciones reales, quizá lo procedente sería votar, a sabiendas de que solo la salida de Maduro y sus acólitos permitirá la recuperación del país y el establecimiento de la democracia.

Demos tiempo al tiempo y confiemos que la presión internacional y la unidad obligue a Maduro a ceder. Por ahora, ni remotamente hemos dado un paso como el de Neil Amstrong, sino más bien un pasito tun tun o como el de la canción del mexicano Bruno de Jesús: dos pasitos para un lado, uno para adelante y otro para atrás. Pero hay que perseverar.

Como (había) en botica: Maduro es directamente responsable por la muerte de cientos de venezolanos por falta de vacunas y de servicios hospitalarios adecuados. También por la escasez de combustibles, medicamentos y otros productos.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

11 de mayo 2021

Sindicatos y recuperación del país

Eddie A. Ramírez S.

¿Cómo está el movimiento sindical venezolano? ¿Es posible un sindicalismo independiente de los partidos políticos? ¿Cuál es el futuro del movimiento sindical? ¿Cuál debe ser la contribución de los sindicatos en la recuperación del país? El sindicalismo surgió en Europa en la segunda mitad del siglo XIX y en 1868 se aprobó el 1 de mayo como Día Internacional del Trabajo, aceptado gradualmente por casi todos los países. En Venezuela, el presidente López Contreras decretó que el Día del Trabajo sería el 24 de julio, pero el presidente Medina lo cambió, para el 1 de mayo.

Inicio: En nuestro país, los primeros trabajadores en organizarse fueron los petroleros. En 1925 estalló la primera huelga petrolera en Mene Grande. En 1936 estalló otra organizada por los sindicatos petroleros de Zulia y Falcón. Las mismas tuvieron como motivo reclamaciones socio económicas. En 1950 hubo otra huelga petrolera, con cierto tinte político, que fue reprimida brutalmente. Los comunistas tuvieron un rol protagónico en los primeros sindicatos, siendo desplazados posteriormente por dirigentes de Acción Democrática. En 1944 se realizó la primea Convención de Trabajadores, produciéndose también la primera división entre comunistas y acciondemocratistas. En 1947 se creó la Confederación Venezolana de Trabajadores (CTV), con una clara mayoría de militantes de Acción Democrática, partido que estaba en el poder. La dictadura de Pérez Jiménez la ilegalizó y creó un parapeto oficialista. En 1958 renació de sus cenizas.

Auge: Durante la república civil, 1958 a 1999, Acción Democrática controló la CTV y fue evidente el poder político que tuvo el Buró Sindical de ese partido. Copei y la Causa R también formaron parte de la CTV. En ese período el Petroestado tuvo una gran influencia en las organizaciones sindicales. La CTV incursionó en negocios, tales como el Banco de los Trabajadores. Hubo señalamientos de corrupción y dirigentes presos por esa causa. Los copeyanos formaron sindicatos y la Causa R tomó control de sindicatos en Guayana. El presidente Hugo Chávez intentó controlar a la CTV. Las violaciones a la Constitución y el empeño del gobierno de limitar la libertad sindical y dominar la CTV desencadenaron los sucesos del 2002, tendentes a procurar la salida de Chávez.

Algunos alegarán que el movimiento sindical no debe ser utilizado para intentar derrocar gobiernos. Esto es cierto en democracia, pero frente a una dictadura todos tenemos la obligación constitucional y moral de hacer lo posible por derrocarla.

Decadencia: Hoy, tanto la CTV como los sindicatos chavistas están de capa caída. La semana pasada las organizaciones Venamérica y Venezuelan American Petroleum Association realizaron un evento con participación de Carlos Ortega, presidente de la CTV, León Arismendi, director del Inaesin y Carlos Henríquez, profesor en la UCAB. Ortega recalcó la necesidad de salir de la usurpación, para lo cual insistió en que los partidos políticos del llamado G4, abran las puertas a otras organizaciones, la necesidad de ayuda internacional y que no hay salida electoral. Arismendi enfatizó en la fragmentación sindical, la formación de sindicatos paralelos afectos al régimen, la persecución a los dirigentes y la necesidad de reconstruir el movimiento, lo cual requiere mejorar vínculos de la dirigencia con las bases. Según él, las prioridades actuales de los trabajadores son lograr la vacunación, mejorar la remuneración y la libertad sindical; la lucha por el poder no los motiva. Henríquez disertó sobre las restricciones impuestas por el régimen a la libertad sindical, tales como no autorizar elecciones, lo cual impide la discusión de contratos colectivos, persecución mediante la justicia militar y aplicación del Código Penal, establecimiento de Zonas de Seguridad para impedir huelgas y protestas, creación de Consejos de Trabajadores para limitar el radio de acción de los sindicatos y establecimiento de milicias obreras. Recalcó que la dirigencia debe decidir cambios de paradigmas para contribuir a la reconstrucción del país y que deben considerar la difícil situación económica de Venezuela, sin olvidar las penurias que atraviesan los trabajadores.

En el mundo, el movimiento sindical ha decaído y cada día hay menos afiliados a los sindicatos. Quizá ello se deba no solo a la decepción con los dirigentes, sino a la realidad de que la mayoría de los patronos no son los explotadores del pasado. Los empresarios están conscientes de que está en su mejor interés contar con buenos trabajadores. Por eso hacen lo posible para establecer un adecuado ambiente de trabajo y otorgar condiciones socioeconómicas acordes con el tamaño y desempeño de la empresa. Desde luego, todavía hay patronos explotadores. Hay trabajadores que entienden las limitaciones de la empresa y hacen lo posible por mejorar la productividad. Hay otros que se aprovechan de la protección del sindicato para rendir lo mínimo y faltar al trabajo.

Reconstrucción: Los sindicatos deben autoevaluarse y adaptarse a la nueva realidad. Su contribución a la reconstrucción del país es importante. Serán necesarios acuerdos con los trabajadores y sus sindicatos. Si queremos salir del foso habrá que minimizar los conflictos obrero-patronales. En el caso de las empresas del Estado, hay que estar conscientes de que el gobierno no podrá seguir subsidiándolas. Todas están quebradas y habrá que desarrollar un proceso de privatización. ¿Lo entenderán los partidos políticos, los trabajadores y los sindicatos? Por otra parte, La experiencia indica que no es sano que la dirigencia sindical surja por la injerencia de un partido político. Tampoco que los trabajadores busquen ese apoyo para escalar posiciones. Trabajadores, patronos y partidos políticos tienen la palabra.

Como (había) en botica:

Paulina Gamus, en excelente artículo sobre Aristóbulo, menciona su comportamiento conciliador y equilibrado antes de 1999, y el cambio drástico después de esa fecha. La distinguida exparlamentaria finaliza : Llegará el día de juzgar a los culpables de la ruina y destrucción de nuestro país. Ese día tendremos que saber elegir entre justicia y venganza. La venganza es odio, la justicia es equidad e imparcialidad. Solo así podremos construir un país distinto. Un país reconciliado.

Padrino López y Ceballos deben renunciar. Son los responsables de las muertes de nuestros soldados.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Destrucción y reconstrucción del sector energético

Eddie A. Ramírez S.

En el año 2000, Venezuela producía 2.897.000 barriles por día (b/d) de crudo, según la OPEP, con 69.284 trabajadores. Hoy produce 525.000 b/d, y el último informe de Pdvsa (2016), consignó que en la misma había 164.370 trabajadores. En refinación, perdimos una capacidad propia en el exterior de 1.200.000 b/d y las plantas ubicadas en nuestro país están desmanteladas. Antes exportábamos combustibles, pero desde el 2007 importamos. Padecemos de un suministro deficiente e intermitente de gasolina, diesel, gas y electricidad ¿Qué sucedió? ¿Quiénes son los responsables de esta debacle? Cuatro factores incidieron en esta situación: 1- Proyecto político cuyo objetivo es mantenerse en el poder, utilizando los ingresos petroleros en dádivas al exterior y para controlar a los venezolanos, por lo que se minimizaron las inversiones y el mantenimiento que requiere cualquier empresa. 2- Despidos masivos de personal de Pdvsa y del sector eléctrico. 3-Gerencia incompetente para el manejo de las operaciones y sumisa ante las órdenes de Miraflores. 4- Corrupción de los responsables de las empresas.

Hugo Chávez y Maduro determinaron la política de la destrucción. Alí Rodríguez, Rafael Ramírez y sucesores la ejecutaron. Ramírez tiene la mayor culpa porque fue ministro del sector entre el 2002 y el 2014, y paralelamente, presidente de Pdvsa del 2004 al 2014, y siete años responsable del sector eléctrico. Para ocupar esos cargos no tenía méritos. Además, desempeñó funciones dentro del partido de gobierno. La destrucción de Pdvsa está registrada en varias publicaciones. La más reciente es el libro ¿Quién destruyó Pdvsa?, coordinado por Gustavo Coronel y Sergio Sáez, con artículos de doce conocedores del sector energético.

Desmantelamiento institucional: Este desmantelamiento lo detalla Allan Brewer-Carías. Se realizaron convenios sin aprobación de la Asamblea Nacional. Se fusionaron los cargos de ministro del sector y presidente de Pdvsa. Se demolió la Apertura Petrolera, vendiendo refinerías en el exterior y eliminando los convenios Operativos y las Asociaciones Estratégicas. Se estatizaron empresas petroleras y las de servicios conexos, lo cual ocasionó la caída de la producción y dos docenas de demandas en el exterior. Además, se solicitaron préstamos con respaldo de Citgo, lo cual pone en peligro a esta empresa. Se cambió la misión de Pdvsa, para dar prioridad a las Misiones, producción y distribución de alimentos. Se eliminó la Orimulsión.

Puntilla a la meritocracia: Alí Rodríguez despidió a casi 23.000 trabajadores con experiencia, los cuales fueron sustituidos por muchos afectos al Socialismo Siglo XXI, tema referido por Horacio Medina y por el autor de este artículo. Rafael Ramírez recortó los gastos de mantenimiento y las inversiones, y designó gerentes sin mérito y corruptos. Despreció la meritocracia, concepto tratado por Héctor Riquezes. Recalcó que “Pdvsa era roja rojita, que todos ocupaban cargos gracias a Chávez y que quien no lo entendiera sería sacado a carajazos”. La producción de crudo declinó, se deterioraron las refinerías y aumentaron exponencialmente los accidentes, con daños a los activos y al ambiente, y con lamentable saldo de heridos y fallecidos. El más grave fue el de la refinería de Amuy, narrado por Rómulo Estanga.

Manipulación de los estados financieros: El acucioso auditor social Sergio Sáez, expone cómo se maquillaron los estados financieros. A partir del 2010 hubo un déficit en la caja operacional. Se presentaron “ganancias integrales”, que son trucos contables, tales como ingresos financieros por cambios en la paridad cambiaria y monetización del otorgamiento de la concesión de oro, que permitió a Pdvsa disimular el hueco. El Estado subvencionó a Pdvsa a través de Fonden y la empresa no repartió dividendos a los socios de las empresas mixtas, constituyen algunos ejemplos del camuflaje.

Gas: Víctor Poleo señala que Rafael Ramírez, sin tener credenciales, asumió en el 2002 la presidencia del Ente Nacional del Gas, con el proyecto de separar el gas del control de Pdvsa. En el 2007 se creó Pdvsa Gas Comunal, para la distribución del llamado gas de bombona (gas líquido del petróleo). Es notorio la escasez de este combustible y las frecuentes explosiones de las bombonas por su deterioro. El proyecto de usar gas para los vehículos languideció rápidamente. Avaló la locura del gasoducto hasta Argentina, perdiéndose 250 millones de dólares en estudios de factibilidad. Nelson Hernández documentó la caída de la producción y la pésima política aplicada.

Energía eléctrica: Miguel Lara y José Gregorio Aguilar recalcaron el papel de Rafael Ramírez en el desastre eléctrico. Aseveran que fue una crisis inducida para favorecer la corrupción. No atendió las recomendaciones de los expertos en el 2003 y despidió personal, por lo cual la crisis se presentó en el 2009. Mal manejo de la represa del Guri, descuido en el mantenimiento de Planta Centro y negativa en repararla, adquisición de pequeñas plantas termoeléctricas inadecuadas y con sobre precio, así como la estatización de compañías privadas desencadenaron la crisis. Paralelamente, Venezuela donó varias plantas a países del Caribe. En el 2007 se creó Corpoelec, cuyo presidente fue un general. En el 2009 se creó el Ministerio de Energía Eléctrica.

Corrupción: Rafael Ramírez ha sido señalado de estar incurso en corrupción. No podemos aseverarlo hasta que haya un juicio. Sin embargo, se negó a aclarar su situación ante la Asamblea Nacional en el 2016. Varios ciudadanos se han declarado culpables en tribunales de Estados Unidos de otorgar sobornos a funcionarios de Pdvsa. Envió casi 800 mil dólares a la Argentina para campaña de Kirchner. Gustavo Coronel ha denunciado la corrupción en el entorno de Rafael Ramírez. Ante el evidente desastre. Maduro declaró que Rafael Ramírez “encabezaba una mafia de ladrones, de saqueadores de Pdvsa”.

Rafael Ramírez, como dice Rafael Gallegos, materializó un Plan Maestro de Demolición, fue un General de Demolición.

Reconstrucción del sector: Es imprescindible recuperar la industria de los hidrocarburos. Varios expertos han presentado planes viables. El Grupo Orinoco, por intermedio de Arnoldo Gabaldón y de Elizabeth Cruz presentaron el libro Plan de recuperación de la industria petrolera nacional 2018-2022. Juan Szabo presentó el trabajo Plan de recuperación de la industria de los hidrocarburos, un proceso continuo. Además está el de Evanán Romero. Estas son contribuciones importantes que, con diferentes matices, indican la misma dirección. Se logrará la recuperación, siempre y cuando se legisle para darle mayor cabida a la inversión privada. Nuestros diputados Elías Matta y Luis Stefanelli coinciden en ello y trabajan en equipo con los expertos petroleros. Inicialmente habrá que redimensionar y parapetear a Pdvsa, asi como desafiliar las empresas no relacionadas con los hidrocarburos. Su futuro dependerá de las circunstancias y decisiones del sector político.

Como (había) en botica:

Por la Covid 19 fallecieron Carlos Rodríguez y Roberto Atencio, compañeros de Gente del Petróleo y de Unapetrol.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Empresarios y política

Eddie A. Ramírez S.

¿Cuál ha sido la relación entre los empresarios y la política en los últimos tiempos? ¿Debería haber una relación o es preferible que sean como agua y aceite? ¿Quiénes son mejores presidentes, los empresarios o los políticos? En Venezuela no hemos tenido empresarios que hayan sido presidentes de la república. Lo más parecido fue cuando Eugenio Mendoza estuvo pocos meses en la Junta de Gobierno de 1958, así como la fugaz presidencia de Pedro Carmona en el 2002. Sin embargo, si ha existido una relación estrecha de empresarios con presidentes y con actores políticos. Así mismo, han ocurrido confrontaciones.

Cipriano Castro encarceló a varios banqueros por no aprobar un préstamo a la nación. Los empresarios “reflexionaron” y cedieron. Uno de ellos, Manuel Antonio Matos, quedó reconcomiado e intentó derrocar al Cabito. A partir de 1927 aumentó gradualmente el ingreso petrolero, lo cual permitió al Estado incursionar como empresario, aunque generalmente fracasado. Frecuentemente estableció medidas de control a las importaciones de materia prima y de productos elaborados. Cuando se implementó el control de cambio, muchas veces se otorgaron divisas de acuerdo con la relación del empresario con el gobierno de turno.

El empresariado se vio obligado a contar con intermediarios con buenas relaciones con el sector gubernamental. Como era de esperar, esto fue un terreno abonado para la corrupción. A pesar de todo, siempre ha habido empresarios honestos. En el pasado, pocas veces los empresarios confrontaron con los gobiernos, porque estos respetaban la propiedad privada. Este escenario cambió cuando Hugo Chávez, en forma arbitraria aprobó 49 Decretos Leyes, muchos de ellos violatorios de la Constitución.

Ante esta circunstancia, ¿qué actitud debían asumir los empresarios y los ciudadanos en general? ¿Acatar sumisamente o intentar que el gobierno revirtiera esos Decretos? Los demócratas intentaron convencer al incipiente dictador de que ese no era el rumbo, pero Chávez requería debilitar al sector privado. En defensa de la democracia, Fedecámaras, organización que incluye las diferentes Cámaras de comercio y producción, confrontó al gobierno con paros cívicos y apoyando marchas de protesta. Como consecuencia, Pedro Carmona y Carlos Fernandes, presidentes de esa organización, fueron apresados y tuvieron que exiliarse.

Se iniciaron las expropiaciones de empresas y de fincas, sin compensación. Los casos más conocidos fueron los de Radio Caracas Televisión y Agroisleña. Otros empresarios, acosados, tuvieron que vender, como los propietarios de Globovisión, de Últimas Noticias, de El Universal y de varios bancos. El Nacional resiste los embates de Trucutú Cabello, quien quiere apoderarse de ese periódico. Ante estos atropellos, muchos empresarios han tenido que ceder, despidiendo a periodistas, cambiando directores y gerentes, así como autocensurándose. Recuerdo que, ante una protesta de Gente del Petróleo, un empresario contestó “qué quieren, ¿que nos inmolemos?”. Quizá tenía razón, ya que del empresariado dependen muchos trabajadores y, además, es preferible contar con un sector privado disminuido a que el régimen termine de apoderarse de todas las empresas.

El dilema para un empresario, como para cualquier ciudadano, es hasta qué punto ceder. Lo que es inaceptable es que se pliegue a la dictadura apoyándola o incurriendo en corrupción. Criticar que Fedecámaras se reúna con el gobierno usurpador no es justo. En un país donde el que detenta el poder es “dueño de vidas y haciendas”, no queda otra que acudir a una reunión cuando se es convocado. Lo censurable es que cedan en principios y valores, prestándose a sinvergüenzuras o que declaren su apoyo al usurpador. Afortunadamente, la mayoría de nuestros empresarios se mantienen lo más alejado posible del régimen.

Desde luego hay casos vergonzosos, como el de César Parra, presidente de la Cámara Petrolera del Zulia quien declaró que “el problema es que ellos (los petroleros) eran una élite con buenas viviendas y campos deportivos”. Pareciera que Parra, para congraciarse con el régimen, predica que hay que nivelar por abajo. Mientras el venezolano que vive en un rancho lucha para tener una mejor vivienda, canchas deportivas para sus hijos y centros culturales, Parra quiere que se mantengan los ranchos y que los jóvenes estén ociosos y sean captados por la delincuencia. También es inaceptable que empresarios se plieguen al oficialismo para conseguir contratos en condiciones que perjudican al país o que promuevan proyectos que solo son rentables con subsidios del Estado. Desde luego, también abundan las empresas de maletín.

Es frecuente escuchar que los políticos son malos gerentes porque no han manejado ni una cantina escolar. Sin embargo, cuesta identificar a empresarios que hayan sido buenos gobernantes. Todo lo contrario, abundan los que fracasaron. Lamentablemente, por lo general tampoco los políticos lo han hecho bien. En Hispanoamérica muy pocos gobernantes han sido exitosos. En Venezuela, en los últimos 120 años hemos tenido presidentes civiles y militares, demócratas y dictadores. Unos lo han hecho mejor que otros, pero seguimos dependiendo del petróleo y persiste la desigualdad social y la pobreza.

Nuestro país está destruido. Para su recuperación requiere, entre otras cosas, contar con un empresariado con firmes valores éticos, que se juzguen a sí mismos, como predica Víctor Guédez, cuyas publicaciones deben ser de consulta obligatoria.

Como (había) en botica:

El Pacto para el restablecimiento constitucional que promueve Enrique Colmenares es una buena iniciativa, pero para que tenga éxito debe ser una convocatoria en la que participe la unidad opositora.

La dictadura quiere exigir a las ONG que rindan cuentas ante la Oficina contra la Delincuencia y financiamiento al Terrorismo. El objetivo es intimidar a quienes las apoyan.

Ya se encuentra en Amazon el libro ¿Quién destruyó a Pdvsa?, balance de la gestión de Rafael Ramírez, promovido por Gustavo Coronel y artículos de varios autores.

Lamentamos el fallecimiento de Alex Cazorla, compañero de Gente del Petróleo y de Unapetrol ¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Sociedad civil y partidos políticos

Eddie A. Ramírez S.

¿Cómo es y cómo debería ser la relación entre la sociedad civil venezolana y los partidos políticos? Recordemos que la sociedad civil la conforman todas aquellas agrupaciones de ciudadanos que trabajan para el bien común, sin fines de lucro, no dependientes del gobierno y que no buscan el poder político.

Algunas organizaciones, relacionadas con empresas, se registran como fundaciones y nacen para realizar aportes a la sociedad, sin pretender influir en la cosa pública. Las Fundaciones Mendoza, Polar, Vollmer, Servicio Para el Agricultor (Fusagri), Danac y muchas otras son ejemplo de importantes contribuciones al país. Otras, casi siempre Asociaciones Civiles, con objetivos relacionados con salud, educación, ambiente, derechos humanos, gremios, defensa de la democracia y demás temas, surgen para contribuir a la formulación de políticas públicas, mediante concientización de los ciudadanos, elaboración de propuestas, denuncias, lobby y presiones al sector gubernamental.

Cuando un país marcha por el sendero democrático, la relación entre la sociedad civil y los partidos políticos es de respeto mutuo y de colaboración. En los tiempos turbulentos que vivimos, surgen distanciamientos sin razón de ser. Algunos actores políticos ven a la sociedad civil como gallina que mira sal, señalándola de querer el poder político y de practicar la antipolítica. Por su lado, ciertos actores de la sociedad civil arrojan dardos a los políticos tildándolos de tener intereses non sanctos y hasta de colaboracionistas con la dictadura.

Seguramente hay razones y sinrazones de lado y lado. Quizá, el problema de fondo es que vivimos en una sociedad que se volvió desconfiada. ¿O es que siempre lo hemos sido? Probablemente nos viene de la picaresca española del Lazarillo de Tormes y del Pícaro Guzmán de Alfarache, pero todo indica que hoy día está exacerbada. Mientras no la superemos no podremos lograr la unidad de la oposición y nos costará sacudirnos de la usurpación. Alain Peyrefitte, en su libro La societé de la confiance, aborda el tema.

En los años en que tuvimos partidos políticos fuertes, conectados con los ciudadanos, las organizaciones de la sociedad civil mantenían un perfil bajo. A medida que los partidos fueron dejando espacios vacíos era de esperar que algunas de esas organizaciones los ocuparan, al menos parcialmente. Con el tiempo, a veces los campos de actuación se han solapado. En el año 2001, la sociedad civil causó un impacto positivo a través de la Asamblea de Educación y su campaña exitosa Con mis hijos no te metas. En abril 2002, la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) y Fedecámaras tomaron la batuta de la dirección política. En diciembre de ese mismo año los partidos recuperaron parte de la dirección por medio de la Mesa de Unidad Democrática, que incluía a organizaciones de la sociedad civil, pero la CTV y Fedecámaras tenían gran influencia, y la AC Gente del Petróleo también tuvo protagonismo.

De allí en adelante, como debe ser, los partidos fueron ganando terreno. Algunas ONG se mantuvieron en su área de competencia, firmando manifiestos y realizando denuncias, pero también apoyando al sector político en los procesos electorales y en marchas y concentraciones de protesta. Las organizaciones de derechos humanos han realizado una labor extraordinaria. Citarlas tiene el inconveniente de dejar por fuera algunas, pero debemos destacar al Foro Penal Venezolano, Observatorio Venezolano de Prisiones, CASLA, Control Ciudadano, Provea, Cofavic, Sinergia, Transparencia Venezuela; además, varias universidades tienen centros de derechos humanos. El Observatorio Hannah Arendt realiza importantes contribuciones en el análisis de los procesos políticos, sociales, económicos y culturales.

Cabe mencionar a organizaciones que actúan en defensa de la democracia, paralelamente a sus intereses particulares, como la Asamblea de Educación, Frente Institucional Militar y Gente del Petróleo, entre otras. La Asociación Nacional Constituyente Originaria (ANCO), tomó la importante iniciativa al promover la Consulta Popular de diciembre pasado, la cual tuvo éxito por el voluntariado de partidos políticos y de otras ONG. Ahora, esta organización presidida por el distinguido ciudadano Enrique Colmenares Finol, propuso la firma de un Pacto Ciudadano para el Restablecimiento Constitucional. Esa iniciativa es positiva, como una herramienta más para debilitar al régimen, aun cuando no es la bala de plata para poner fin a la usurpación.

Las ONG no deben asumir un papel que corresponde a los partidos. Esto no quiere decir que sean mudas, sino que, en asuntos de estrategia política, planteen sus puntos de vista, sin dogmatismos y sin pretender que tienen la llave mágica para salir de la usurpación. El régimen se ha mantenido por el apoyo de la Fuerza Armada y del Poder Judicial, además de contar con el respaldo del narcotráfico, tener organismos de represión y ejercer control a través de sus paramilitares rojos y de sus espías. Nuestras ONG cumplen un papel importante para contribuir a que tengamos un mejor país. Por ello deben trabajar en armonía con los partidos y estos deben respetarlas y escuchar sus planteamientos.

Como (había) en botica:

Acusamos al régimen de Maduro por la muerte de numerosos compatriotas que no han tenido la posibilidad de vacunarse contra el virus causante de la Covid19. La situación es extremadamente grave y el oficialismo no se atreve a dar cifras, procediendo como Pdvsa, cuyo último informe es de hace cuatro años. Lamentamos el fallecimiento de nuestros amigos Giselle Pacheco y Daniel Chalbaud, víctimas de la Covid 19. También de nuestros compañeros Vilma Pinto, Carlos Abate y Guillermo Escobar.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Política: hacer posible lo deseable

Eddie A. Ramírez S.

Aceptar la vieja definición de que la política es el arte de lo posible implica cierto conformismo y no realizar grandes esfuerzos para cambiar una situación que perjudica a la mayoría. En artículos anteriores mencionamos que la política debía ser el arte de hacer posible lo deseable, que conlleva mayor compromiso. Desde luego no debe ser original, pero nuestros políticos no la utilizan.

Hacer posible lo deseable puede ser una acepción descalificable por considerar que es una política idealista, poco aterrizada, con la que es imposible obtener resultados positivos. La otra posición, que generalmente prevalece es la realpolitik o política pragmática, adosada por Bismarck, el llamado canciller de Hierro alemán, aunque muchos siglos antes, en El arte de la guerra, Sun Tzu aconsejó lo que debe hacerse, lo cual fue ratificado siglos después en El Principe, por el florentino Maquiavelo.

¿Es posible conciliar la realpolitk, que en su versión tradicional no toma en cuenta valores éticos y morales, con un accionar político acorde con los nuevos tiempos? Claro que sí. Los límites no los establece el papel, sino los que aplican la política. Por un lado, lo objetable es ceder en los puntos fundamentales que definen una democracia y, por el otro, creer en pajaritos preñados, o sea aceptar lo que es ficción.

Frecuentemente nuestros políticos se han dejado llevar por la ficción, descartando la realidad. Por ejemplo, el general Medina Angarita aceptó la ficción de que los tiempos seguían siendo los mismos y, por ello, insistió en querer imponer a su sucesor en la presidencia de la república y, además, que este fuese andino. En el período 1945-1948 los dirigentes de Acción Democrática, obnubilados por haber obtenido un millón de votos, pecaron de arrogantes y creyeron en la ficción de que nadie podría desalojarlos del poder. El partido Copey pensó que Pérez Jiménez realizaría elecciones en 1957 y, como era el único partido de oposición legalizado, su dirigencia pensó que no necesitaban la unidad contra el dictador. Afortunadamente, la realidad los hizo reconsiderar. El dictador Pérez Jiménez estaba convencido de que el cemento lo hacía popular, pero esa ficción lo sorprendió el 23 de enero de 1958.

En la década de los años 60, la extrema izquierda se enamoró de la ficción de la revolución cubana y fracasó rotundamente. Carlos Andrés Pérez, en su primer gobierno, se deslumbró con la ficción de que los precios del petróleo aumentarían indefinidamente y endeudó al país para realizar proyectos faraónicos. Como último ejemplo histórico, podemos citar que el pueblo venezolano creyó en la ficción que le vendió Chávez de que acabaría con la corrupción y que Venezuela sería una potencia en varios sectores. El resultado es un país destruido.

En nuestros días, los dirigentes opositores parecen cegados con la ficción de que pueden sacar a Maduro sin necesidad de unirse y que cualquiera de ellos puede alcanzar la presidencia por elecciones. Ojalá se bajen de esa nube. Sin unidad ninguno va para el baile. Incluso, a la luz de las encuestas, posiblemente tendrán que seleccionar un candidato independiente o que no sea alguno de los jefes de los partidos. Es duro decir esto y más duro debe ser aceptarlo, pero eso es lo que percibe la mayoría de los venezolanos.

Así mismo, deben repensar la idea de una transición corta. La destrucción del país es tal que se requerirán muchos años para recuperarlo. Sería conveniente plantear un plan común para una transición de tres períodos presidenciales, en cada uno de los cuales la unidad opositora sometería a consideración del electorado un candidato único seleccionado en primarias, sin reelección. Ello implicaría sacrificar legítimas aspiraciones de los entrados en años. Probablemente también que algunos partidos tendrían que fusionarse para sobrevivir. Si no se ejecuta algo parecido, no saldremos de los rojos o puede que salgan, pero pueden regresar a la cabeza de otro populista, cuando el país perciba que no se solucionaron los problemas básicos.

Trabajar para hacer posible lo deseable no es una fantasía. Puede lograrse con una realpolitk que no sacrifique los principios y valores de la democracia.

Como (había) en botica:

Expertos en el área de refinación sostienen que la escasez de diésel no es real, sino inducida con fines políticos.

Lamentamos que hayan caído en combate varios integrantes de nuestra Fuerza Armada y que ciudadanos civiles hayan sido asesinados o víctimas de los enfrentamientos en Apure. Chávez y Maduro son los responsables de la injerencia de la guerrilla colombiana en nuestro territorio. Esta situación se ha agravado con la decisión de Maduro de apoyar a uno de los grupos de la guerrilla terrorista que se nutre del narcotráfico.

Rechazamos la medida judicial en contra de la escritora Milagros Mata Gil, aunque en su artículo no debió utilizar la palabra raza para referirse a los venezolanos de origen sirio.

Nuestro compañero de Gente del Petróleo y de Unapetrol José Orlando Matos y su esposa fallecieron por causa de la Covid19. Lamentablemente son numerosos los compatriotas muertos por esta enfermedad que se presentó en momentos en que nuestro sistema de salud está en el suelo. Maduro, su entorno y los médicos cubanos recibieron la vacuna, no así el personal venezolano de salud, ni los ciudadanos más vulnerables.

Lamentamos el deceso de Antonio Casas González, distinguido ex director de Pdvsa.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Políticos y petroleros: acercamientos

Eddie A. Ramírez S.

Tradicionalmente han existido desencuentros, por decir lo menos, entre los actores políticos y los trabajadores petroleros. Por malentendidos, a veces se han comportado como agua y aceite. Por alguna razón, ha faltado el emulsificante que permita una solución homogénea que favorezca la relación entre ellos y beneficie al país. Obviamente el emulsificante requerido es la buena voluntad de las partes, que deben entender y respetar el radio de acción de cada una.

El mundo político venezolano está entendiendo que, desde antes de la estatización de los hidrocarburos, ya distinguidos petroleros venezolanos manejaban las operaciones y que, posteriormente, la condujeron con espíritu nacionalista. Además, con el desastre de la administración roja-rojita se hizo evidente que los hidrocarburos no brotan solos, ni la refinación es tan sencilla como destilar alcohol de caña de azúcar. Asimismo, que el comercio y suministro es complejo y que los controles son imprescindibles para evitar la corrupción.

Por su parte, los técnicos petroleros deben aceptar que las políticas del sector las deciden los políticos con el debido asesoramiento. También, que los presidentes de Pdvsa los designa el accionista y que no necesariamente deben ser conocedores de las operaciones. Así, hemos tenido buenos presidentes como Rafael Alfonzo Ravard, Andrés Sosa Pietri, Gustavo Roosen y Guaicaipuro Lameda, con buenas credenciales gerenciales, que se asesoraron con los técnicos para la toma de decisiones. Los petroleros deben entender que no importa la mayor o menor cercanía de los presidentes y directores de Pdvsa con el presidente de la república, sino sus méritos profesionales y ciudadanos.

La excepción se presentó cuando el presidente Hugo Chávez se propuso “tomar esa colina”, para lo cual designó presidentes y directores sin méritos para el cargo. El presidente interino Juan Guaidó designó inicialmente a Luis Pacheco y después a Horacio Medina al frente de Pdvsa ad hoc, y en Citgo a Carlos Jordá, tres profesionales con méritos inobjetables.

Para un entendimiento entre políticos y petroleros, ambas partes deben respetar sus respectivas atribuciones. Además, los petroleros tienen que aceptar que no todos los nombramientos deben provenir de sus filas. A su vez, los políticos deben percatarse que es imprescindible que las designaciones inspiren respeto entre los técnicos, por lo cual el mérito debe ser el factor principal a considerar. Afortunadamente, los recientes intercambios entre la Comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional legítima electa en el 2015, y destacados expertos petroleros, nos permiten ser optimistas.

En reciente foro, los diputados Elías Matta, presidente de la citada Comisión, y Luis Stefanelli, coincidieron en los puntos más importantes con Horacio Medina y Francisco Monaldi, conocedores a profundidad de la industria de los hidrocarburos. Cabe destacar los siguientes puntos:

Futuro: 1- En un plazo más o menos cercano se impondrán las energías no contaminantes, pero el petróleo seguirá siendo importante por varios años. 2- Este recurso es el que tenemos disponible a corto plazo para la recuperación del país. 3- Hay que superar la mentalidad rentista y entender que el Estado no tendrá recursos para subsidios indiscriminados, ni para mantener empresas públicas. 4-El gas no tiene la importancia del petróleo, pero es necesario intensificar su desarrollo.

Disponibilidad de recursos: 1- El próximo gobierno no dispondrá de los recursos financieros para recuperar la deteriorada industria petrolera, ya que los mismos serán destinados a salud, educación, electricidad, agua potable e infraestructura en general. 2- Esos recursos tampoco estarán disponibles en los organismos internacionales, los cuales sí aportarán para la recuperación de otros sectores. 3- La única opción es la inversión del sector privado nacional e internacional. 4-La deuda externa del país ronda los 140.000 millones de dólares. Además, tenemos pendientes muchas demandas por las expropiaciones arbitrarias de Chávez-Maduro, por lo que habrá que llegar a acuerdos con los acreedores.

Requisitos: 1- Es imprescindible un nuevo marco legal para permitir y dar confianza a la inversión privada, para lo cual se trabaja en una nueva Ley de Hidrocarburos 2- Es necesario flexibilizar el marco impositivo y considerar la tasa aplicable a cada proyecto.3- Se requiere un nuevo ente planificador, administrador y regulador de los hidrocarburos.

Pdvsa: 1- No podrá ser la de antes. Tendrá que ser redimensionada y, al menos por un tiempo, seguirá operando. Después podría o no desaparecer. Algunos piensan que es conveniente mantener una petrolera estatal. Otros creen que no lo es. 2-Hay que contar con el personal operativo calificado que actualmente labora en Pdvsa, pero en algunas áreas hay escasez de técnicos y de obreros especializados. 3- El personal de la empresa está desmotivado por sueldos y salarios que no cubren las necesidades básicas, por lo precario de la asistencia médica y de la seguridad industrial. 4- Hay que respetar los derechos laborales de los trabajadores y hacer justica con los despedidos ilegalmente. 5- Llegar a acuerdos con los sindicatos y 6- Revisar los convenios internacionales.

Quien esto escribe, que no es petrolero sino devenido por las circunstancias en divulgador de esta actividad, considera que desde ya hay que pensar en qué hacer con la investigación, con la enseñanza y con la responsabilidad social, llevadas a cabo en el pasado con éxito por el Intevep, Cied y Palmaven. Una posible vía podría ser apoyarse básicamente en las universidades y lograr financiamiento mediante un pote administrado por el ente regulador propuesto, al que aporten las petroleras de acuerdo con sus proyectos. El tiempo apremia, ya que somos optimistas de que el régimen terminará de derrumbarse antes de lo que algunos piensan.

Como (había) en botica:

El régimen protegió a la guerrilla colombiana y, al parecer, ahora se parcializa por una de sus facciones. Los perjudicados son los habitantes de varias localidades de Apure y nuestros militares y civiles fallecidos. Los organismos internacionales de derechos humanos deben investigar esa situación confusa Lamentamos el fallecimiento de Nicola Paglione, compañero de Gente del Petróleo y de Unapetrol.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

De Cipriano Castro a Maduro

Eddie A. Ramírez S.

¿Qué factores incidieron en estos últimos 120 años para que Venezuela tuviese una etapa de auge progresivo, una de estancamiento y una de decaimiento gradual, que en los últimos años resultó acelerado? ¿Qué papel jugaron en este proceso los sistemas de gobierno, los presidentes de turno, los ciudadanos, la educación, el petróleo y el ejército? ¿Por qué en este período ha persistido un elevado porcentaje de pobreza y de desigualdad social? ¿Por qué no hemos podido erradicar la corrupción? ¿Cuáles fallas impidieron que nuestra democracia se perfeccionara? ¿Por qué regresamos a la barbarie de siglos anteriores? ¿Acaso nuestra educación gratuita fracasó porque formó excelentes profesionales, pero no buenos ciudadanos? ¿Cómo fue posible que pasáramos de ser un polo de atracción para inmigrantes que contribuyeron a nuestro acervo cultural y a nuestra economía y hoy nuestros ciudadanos huyen a pie hacia países vecinos?

El siglo XX se inició con la entrada a Caracas de Cipriano Castro al frente de un grupo de andinos. Lo defenestró y sucedió su compadre Juan Vicente Gómez, quien acabó con el caudillismo regional y estableció una dictadura de 27 años.

Con los generales Eleazar López Contreras e Isaías Medina Angarita, ambos también andinos, se inició una transición hacia la democracia. El proceso se interrumpió cuando Medina se empeñó en designar a su sucesor y que este fuese andino.

El movimiento militar del 18 de octubre de 1945 fue apoyado por el partido Acción Democrática. Se instaló una Junta Cívico-Militar. El pueblo entró en escena al establecerse el voto universal para elegir al presidente de la república, senadores y diputados. En 1948 se eligió presidente a Rómulo Gallegos, un escritor prestado a la política. Varios factores determinaron que el ejército lo destituyera el 24 de noviembre de 1948.

Regresó la barbarie. Inicialmente con una dictablanda, con el teniente coronel Delgado Chalbaud como presidente de una Junta Militar. Después de su asesinato, en 1951, el coronel Pérez Jiménez pasó al primer plano apoyado por las Fuerzas Armadas. Fue depuesto el 23 de enero de 1958 por los militares a raíz de protestas populares y manifiesto de intelectuales.

Surgieron aires de libertad con la transición de la Junta de Gobierno inicialmente presidida por el contralmirante Wolfang Larrazábal y, posteriormente, por Edgar Sanabria. En 1959 asumió Rómulo Betancourt como presidente constitucional. Se presentaron intentos de derrocarlo tanto por grupos militares, como por movimientos de extrema izquierda apoyados por Fidel Castro.

Por primera vez en nuestra historia, un presidente electo popularmente le entregó el poder a otro. Raúl Leoni tuvo que enfrentar el terrorismo de la guerrilla comunista. Hubo violaciones a los derechos humanos, pero inició la pacificación al indultar a militares y guerrilleros. Con Rafael Caldera continuó la pacificación al legalizar a los partidos que participaron en la lucha armada.

Con Carlos Andrés Pérez se exacerbó una etapa populista influida por el aumento de la renta petrolera. ¿Fue una etapa de la Gran Venezuela como predicó el gobierno o de la Venezuela saudita como señalan sus críticos?

Los gobiernos de Luis Herrera Campíns y de Jaime Lusinchi se caracterizaron por dejar hacer a sus amigos. Luis Herrera, intelectual, amigo de refranes y muy austero. Lusinchi, bonachón y mangoneado por su amante. Fueron etapas de decaimiento.

Carlos Andrés Pérez volvió a ser electo. Realizó un mea culpa sobre su gestión anterior. El Gran Viraje ocasionó esperanzas en algunos, pero la mayoría acostumbrada al populismo y a estar recostado del Estado, lo rechazó. Se produjeron dos intentos de golpes de estado. Próximo a terminar su período fue sometido a un juicio político y destituido.

El Congreso eligió presidente provisional al historiador Ramón J. Velásquez, quien cumplió con la transición. Rafael Caldera volvió a ser electo presidente. Para ello se apartó de Copei, el partido que había fundado. Los partidos políticos se siguieron desprestigiando y la renta petrolera ya no fue suficiente para atender las demandas. La mesa estaba servida para que llegara un supuesto vengador que prometió acabar con la corrupción y con los políticos.

Hugo Chávez llego al poder despertando esperanzas y temores. Dispuso a su antojo de cuantiosos ingresos petroleros. A partir del 2001 se iniciaron violaciones a la Constitución. En el 2002 fue destituido y vuelto al poder por los militares. De allí en adelante hubo una gran división entre los venezolanos, y elecciones que sus partidarios consideraron legítimas y sus adversarios como fraudulentas. Confiscaciones de la propiedad privada. Falleció en el poder.

Nicolás Maduro fue ungido por Chávez. Se ha mantenido en el poder por el apoyo de los militares y del Poder Judicial. Cuenta con el respaldo de gobiernos dictatoriales. Su elección no ha sido reconocida por a Unión Europea, ni por la OEA. La hiperinflación, escasez de productos y la violación a los derechos humanos ha sido masiva. Más de cinco millones de venezolanos han emigrado.

Rafael Gallegos y quien esto escribe asumimos el reto de plasmar en un libro la historia de estos últimos 120 años. En este lapso, Venezuela tuvo un período de construcción que grosso modo puede estimarse entre los años 1900 a 1975, uno de estancamiento que puede ubicarse entre 1975 y el año 2000, y uno de destrucción de allí en adelante. Estos no son límites estrictos y hay cierto solapamiento. Así mismo, en el período de construcción y de estancamiento hubo también años de destrucción. Difícil es encontrar algo de construcción en el lapso de destrucción. Entre los constructores también hemos tenido a dictadores y entre los destructores no han faltado los demócratas. Los presidentes tienen la mayor responsabilidad, pero los ciudadanos de a pie no podemos eludir la nuestra. Unos más, otros menos, todos hemos contribuido a construir y a destruir a Venezuela. Ojalá enmendemos los errores del pasado

Invitamos a los lectores del libro Construcción y destrucción de un país: presidencias de Venezuela 1900-2020, publicado por Amazon en Kindle y en físico, con diagramación del periodista Eduardo Orozco, quien próximamente lo presentará, a formarse su propia opinión.

Como (había) en botica:

Los padres del teniente Franklin Caldera denunciaron que su hijo está siendo torturado.

Lamentamos el fallecimiento de Nelson Ruiz, compañero de Gente del Petróleo y de Unapetrol.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com