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Opinión

Jesús Elorza G.

Muy emocionado, se encontraba Nicolás por la llegada del carnaval. Esta festividad, le iba a permitir, según sus cálculos, recuperar la confianza del pueblo en su gobierno. Para ello, le suplicó a Lula que le enviara a uno de los mejores organizadores de las fiestas carnestolendas en Brasil, para transformar a Caracas en Río de Janeiro.

Al término de los preparativos, la avenida Urdaneta frente a Miraflores, quedó convertida en un majestuoso sambodromo para el desfile de las carrozas. Todas ellas, serán representativas de la personalidad de los ministros de la revolución socialista del Siglo XXI.

El lunes de carnaval, se dio inicio al pomposo espectáculo de la comparsa. Bellas garotas, animaban la entrada del “Rey Momoduro”, trajeado con su espectacular disfraz de “Súper Bigote” y la “Reina Momaflores”. disfrazada como “La Mujer Maravilia” En la carroza imperial roja-rojita destacaba “Trucutú con su Mazo”…. jajaja, ese tipo es igualito a un troglodita, era el comentario de todos.

Una serie de explosiones, anunciaron la entrada del ministro Tareck El Aissami. En su carroza destacaba una foto gigante de Alex Saab y las banderas amarillas del Hezbollah. Los milicianos integrantes de la carroza iban con sus caras tapadas, con pasamontañas mostraban con orgullo sus AK-47 y sus chalecos cargados de explosivos. En su recorrido, lanzaban al público “Pasaportes diplomáticos” para uso de todos aquellos que defendieran a plomo limpio la revolución y se transformaran en “Patriotas cooperantes” al servicio del Comando Antigolpe.

Un grito de admiración o susto se hizo sentir en el ambiente, cuando hizo su entrada la comparsa de “Los Vampiros de la Justicia” conformada por Lacava y su combo. Al mover sus brazos al ritmo cadencioso de la samba parecían unos murciélagos de gran tamaño.

¿Qué vaina es esa? gritaron los espectadores, al ver al Fiscal General desfilando con un minúsculo traje de baño y haciendo los movimientos de un fisicoculturista…aaayyy papá, fue la exclamación del público.

Una de las carrozas llamó la atención de los presentes por los errores ortográficos contenidos en el letrero que la identificaba “Ministerio de Hedukasión” y en ella se veía a la ministra acompañada de los bachilleres de la Misión Robinson que ahora pasarían a ocupar los puestos de los maestros en las escuelas.

La comparsa de los “Ferraris Rojos Rojitos” causó un gran impacto en todos los presentes. Sus conductores destacaban por lo ostentoso de los vehículos y los maletines full de billetes verdes. Los milicianos presentes, al verlos pasar les gritaban ……. "no queremos caramelos ni falsas sonrisas / lo que queremos es que nos lancen divisas".

Con su pelo alborotado hizo su entrada triunfal Linda Blair representando su exitoso personaje de Regan Mac Neil en la película “El Exorcista”. A su paso por la avenida los presentes comentaban que, esa señora es el vivo retrato de la camarada Fosforito.

Otro que se equivocó en su vestuario fue el Ministro del Interior y Justicia al salir disfrazado como Yasser Arafat creyendo que la acción policial Operación Liberación del Pueblo (OLP), que él dirige, se refería a la Organización para la Liberación de Palestina.

El Ministro del Deporte y la presidente del IND, cubrieron todo su cuerpo, de pies a cabeza, con pintura dorada para resaltar la consigna “Generación de Oro”. Se equivocaron de color, ese color de medalla cada vez se ve menos en las competencias…vayan a lavarse…era el comentario entre los presentes.

El presidente de PDVSA hizo una entrada triunfal encabezando una larga fila de más de 100 carros con emblemas de la empresa. Pero, los presentes interpretaron que estaba haciendo referencia a las largas colas que hacen diariamente las personas que intentan llenar el tanque de sus vehículos con gasolina subsidiada.

A lo mejor ahora se presenta el psiquiatra con su cuerda de locos de la asamblea, dijo alguien. Pero no, se presentó como un domador con su grupo de focas que no dejaban de aplaudirlo.

Los representantes de CORPOELEC, al iniciar su desfile se fue la luz y lo tuvieron que hacer en total oscuridad…bien hecho, fue la expresión más oída entre el público, para que vivan lo que vivimos a diario los venezolanos.

Un grupo de rusos, chinos, iraníes, sirios, árabes y cubanos hicieron su aparición disfrazados de oro, diamantes, uranio, petróleo y coltán representando a los chulos dueños de nuestras riquezas minerales.

La carroza adornada con el tema “Venezuela se arregló” no pudo arrancar porque se le espicharon los cauchos, se quedó sin gasolina y se le fundió el motor.

Para cerrar, se emplearon todos los recursos tecnológicos de última generación. Las luces de la avenida fueron apagadas y cuando todo estaba en oscuridad total, sonó una música sacra e hizo su aparición una imagen holográfica tridimensional, basada en el empleo de rayos láser, con la figura del Difunto Eterno acompañado de un sequito de fantasmas representando a Anderson, Lara, Ron, Escarrá, Serra, Tascón, Otayza, Muller, Ponce, Russian, Vivas, Isturiz y José Vicente. Con lúgubre voz, los fantasmas coreaban…bbbuuuuuu-bbbuuuu…. Chávez Vive.

Al ver aquella tétrica representación, la avenida quedó desierta, todos los presentes huyeron despavoridos.

Desesperado, Momoduro gritaba ¡¡¡No se vayan que esto se pone bueno!!! Y se puso a bailar …. pero que va, el público lo dejo solo con su salsa.

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Instituto Casla

RESUMEN EJECUTIVO

La situación en Venezuela sigue siendo caótica, la crisis humanitaria continúa a pesar de los intentos que hace el Estado venezolano para tratar de normalizar la situación, mostrando una imagen irreal de bonanza y prosperidad al mundo, cuando la pobreza alcanza el 81,5% de la población que no tiene para cubrir la canasta básica, y el 53,3% vive en la pobreza extrema, sin poder adquirir los alimentos básicos según IIES-UCAB. El informe «Panorama Regional de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de América Latina 2022» elaborado por agencias de Naciones Unidas, reveló que cerca de 6,5 millones de personas padecen hambre en Venezuela y que el 4,1% de los niños menores de 5 años sufren de desnutrición aguda, siendo una de las formas más críticas de malnutrición en la primera infancia.

Mientras tanto, en Caracas y en otras ciudades se observa una burbuja ostentosa y vulgar, con zonas llenas de restaurantes de lujo, bodegones, boutiques y centros nocturnos, vehículos costosos y deportivos, autos y camionetas último modelo blindadas que llegan en flotas, sobre todo para uso gubernamental y de los altos jerarcas de la FF.AA. Esto no compagina con la pobreza que se refleja en los cordones de miseria en barrios y otras ciudades del interior del país, donde la gente vive con la ausencia total o parcial del Estado, en abandono, sin seguridad, haciendo largas colas para adquirir varios litros de gasolina, con barrios y municipios a los que escasamente llega la luz, el agua, el gas para cocinar, donde los hospitales no tienen insumos para atender a la gente y se les exige llevar los medicamentos o material sanitario básicos para ser atendidos, son cientos las personas que deambulan por las calles con hambre, sin trabajo, sobre todo niños y jóvenes abandonados y personas de la tercera edad.

El éxodo masivo continua. Según la Plataforma Regional de Coordinación Interegencial, para noviembre de 2022, ya había más de 7,1 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela en todo el mundo, de los cuales, al menos el 84,9% se habían establecido o estaban en tránsito en 17 países de América Latina y del Caribe.

Según el comisionado de la OEA para la crisis migratoria David Smolansky, 50 mil personas salen mensualmente de Venezuela, aproximadamente 1.700 venezolanos huyen diariamente del país. Y se van, por la falta de servicios públicos, por la inseguridad, por la falta de servicios médicos, por la crisis económica, por la persecución política.

Los grupos subversivos como las FARC, el ELN y el Ejército Popular de Liberación (EPL), y otros movimientos paramilitares, incluyendo sindicatos y colectivos, se han hecho dueños de territorios en el interior del país, donde predomina el secuestro, los enfrentamientos entre ellos o con organismos de seguridad, ocasionando el desplazamiento forzoso de poblaciones enteras, trata de personas, reclutamiento de niños y jóvenes, demostrando así la complicidad por un lado y la incapacidad por el otro del Estado venezolano, de no tener control territorial ni intención real de poner orden. En las zonas mineras, el Estado ha logrado desplazar a los pequeños mineros y pueblos indígenas, para controlar a su antojo la producción y distribución, y ha entregado el tema de la seguridad al DGCIM y FF.AA. además de grupos guerrilleros como las FARC y el ELN.

Estos «guardianes» se lucran de forma inimaginable con la «vacuna» que cobran en la zona, de donde sacan en maletas oro o dinero en efectivo que se reparten desvergonzadamente dentro de las distintas cadenas de mando del régimen. Lo peor, la indiscriminada destrucción de las Tierras Ancestrales de los estados Bolívar y Amazonas, uno de los pulmones más grandes del mundo, devastado por la explotación, que incluso ha llegado a la cima de los tepuyes, las formaciones montañosas más antiguas del planeta. Además de CASLA, otras organizaciones no gubernamentales dedicadas a documentar lo que está ocurriendo en esta zona, como SOS Orinoco y FundaRedes, han denunciado la presencia activa de oficiales o funcionarios rusos e iraníes en dicho territorio minero, cuyo propósito es lucrarse de las riquezas aprovechando la apertura que el régimen les ha dado sin control. Según la organización Transparencia Venezuela, entre el 70% y el 90% del oro venezolano sale ilegalmente del país en operaciones que involucran a funcionarios del alto gobierno y familiares cercanos al entorno presidencial.

El Instituto CASLA documentó, en el período que comprende este informe anual (a saber, enero del 2022 a enero del 2023) 19 incidencias nuevas, donde las víctimas fueron sometidas a crímenes establecidos en el Estatuto de Roma, en el marco de la represión sistemática que las autoridades del Estado venezolano ejecutan por motivos políticos. Los organismos de seguridad involucrados fueron la DGCIM y el SEBIN, con la participación de oficiales de Alto Rango de la FF.AA. en la entrega de oficiales subalternos al organismo de inteligencia militar sin orden de aprehensión, y de otros organismos de seguridad como el FAES y la PNB.

En al menos 2 incidencias, las víctimas narraron cómo estaban siendo torturadas con otras personas, sometidas a las mismas torturas al mismo tiempo o por turnos, en una de ellas, un total de 25 personas, civiles, sin importar la edad y su condición física y en la otra, un total de 9 oficiales miembros de la FF.NN. En 3 incidencias, las víctimas reflejaron haber sido llevadas a los distintos centros de detención o centros de torturas clandestinas con otras personas, pero sin conocer la cifra exacta por estar encapuchados.

En el Capítulo 3, describiremos los distintos métodos documentados de las torturas físicas, psicológicas y blancas, así como la violencia sexual y los tratos crueles, inhumanos y degradantes. Víctimas que fueron sometidas a extremos de dolor inimaginables para el ser humano, y víctimas que aún continúan encarceladas sometidas diariamente a torturas psicológicas y torturas blancas que buscan desquiciarlos y desequilibrarlos y llevarlos incluso al punto de querer atentar contra su vida.

Torturas como el desprendimiento de uñas de las manos y pies, la extracción con alicates o ruptura de piezas dentales, cortaduras en las plantas de los pies con navajas, descargas eléctricas mientras la víctima permanecía acostada o sentada en esterillas u objetos metálicos, atados de pies y manos, luego de ser continuamente mojados; azotes con látigos, correas o cables de electricidad; ahogamiento en pozos de agua natural o en pipotes de almacenamiento; fracturas en el rostro por golpes con armas o patadas para provocar heridas permanentes, personas que fueron arrastradas desnudas por bosques y/o lanzadas varias veces por precipicios llenos de arbustos cortantes estando encapuchados y atados de pies y manos, colgamiento por los brazos atados a la espalda para electrocutarlos, asfixiarlos, azotarlos y golpearlos con palos, varas o puños; víctimas que fueron atadas de pies y manos a arbustos o columnas por horas o días recibiendo distintos tipos de torturas físicas y psicológicas; simulación de ejecución o sometidos a la ruleta rusa, o amenazados con cortarles dedos, manos o piernas con una sierra que podían escuchar cerca de ellos en pleno funcionamiento mientras permanecían atados a un objeto fijo y encapuchados, víctimas que fueron orinadas por los funcionarios mientras eran torturados, fueron varios de los métodos de tortura física que documentamos en este periodos.

Al menos en 6 incidencias de distintas épocas, las víctimas narraron como personas, agentes o funcionarios extranjeros intervinieron en sus torturas, bien sea dando órdenes o ejecutándose. En 4 de ellas, las víctimas identificaron a personas con acento colombiano, a quienes la DGCIM entregaba por tiempo determinado simulando una venta de rehenes. En una incidencia, la víctima reconoció entre los funcionarios captores, a personas con acento colombiano y cubano, y en 3 incidencias las víctimas involucran directamente a agentes cubanos. Podríamos pensar, luego de analizar la narrativa de las víctimas y los métodos de tortura utilizados, que personas de grupos subversivos colombianos tuvieron involucrados en las torturas de las primeras horas o días de las personas detenidas por la DGCIM.

El Instituto CASLA obtuvo con exclusividad y confidencialidad el «Manual de operaciones especiales de la DGCIM» o «la Constitución», tal y como se refieren a dicho manual los funcionarios y oficiales pertenecientes a ese organismo de Inteligencia, e hicimos referencia a su aplicabilidad directa en la inducción, conducción y ejecución de crímenes de lesa humanidad.

Reproducimos los puntos de interés para la mejor comprensión de cómo se ejecuta en Venezuela, la planificación de la represión y persecución sistemática, uno de los principales temas de interés del Instituto, ya que el régimen venezolano niega dicha planificación y sistematización, y es uno de sus principales argumentos ante la Corte Penal Internacional.

El manual expone claramente, cómo la sociedad civil y los miembros de la FF.NN. son «el enemigo interno a vencer», ese del que tanto hablaba Hugo Chávez y cómo, a través de esta consideración, se ha instalado un sistema de Inteligencia y Contrainteligencia para espiar a todos los ciudadanos y oficiales de la FF.AA. e incluso a los mismos funcionarios de cuerpos de seguridad de los que sospechan, a familiares, amigos y conocidos.

Para el Instituto, el punto más importante de este manual, el de mayor interés para la determinación de las responsabilidades en la comisión de crímenes con competencia de la CPI, está comprendido en el Capítulo 2, Letra A denominado «Niveles de aprobación de las principales medidas operativas que rigen a la DGCIM», que como él mismo título indica, describe como se reparte el Gobierno la responsabilidad de la persecución, acusación y encarcelamiento de sus víctimas, personalizando los distintos niveles según la importancia, rango y características de las personas, teniendo el «privilegio» del Primer Nivel, el mismo Presidente y Comandante en Jefe de las FF.AA, Nicolás Maduro Moros.

Además, reproducimos como planifican el control de los ciudadanos a través de la implementación de una estructura de espías y acusadores que lo vigilan día a día, para tratar de controlar el malestar social o cualquier indicio de disidencia que genere protestas colectivas, como cualquier persona o actividad realizada puede ser sospechosa y considerada peligrosa para los intereses de la revolución, y como hacen viral la intimidación a través del miedo, la amenaza, el encarcelamiento y la tortura, el sometimiento para la sobrevivencia del día a día, o el exilio forzado, y como son reclutados civiles y militares a través de distintos mecanismos, para ejecutar esta función.

CONCLUSIÓN

La persecución sistemática contra la población civil que protesta, que denuncia, que informa sobre lo que sucede en ese país sudamericano continua. No hubo un sector activo, incluyendo partidos políticos, parlamentarios, movimientos universitarios, organizaciones no gubernamentales y defensores de DD.HH. medios de comunicación y sus trabajadores, que no fueran perseguidos, intimidados, encarcelados, censurados o cerrados.

En este informe reflejamos cómo funciona la cadena represiva y su planificación, desde el más alto responsable, el mismo presidente y comandante en jefe de la FF.AA, y cómo se implementa y se ejecutan los planes de represión, intimidación, acoso y vigilancia, donde todos los Altos Responsables de los Poderes del Estado están implicados, especialmente el Poder Judicial y sus instituciones.

Mientras la Fiscalía de la Corte Penal Internacional continúa recibiendo denuncias y haciendo su propia investigación interna de los crímenes de su competencia, al menos desde febrero del 2014, y pide a la Sala de Jueces de Asuntos Preliminares que le permitan continuar con la investigación pública, el gobierno venezolano continúa afanosamente cometiendo los mismos crímenes y en el caso de la tortura aplicada a nuevos casos del 2022 y a los presos políticos que mantiene detenidos en los organismos de inteligencia, continúan utilizando sistemáticamente la tortura psicológica y la tortura blanca, además de renovar o remodelar celdas de torturas para castigar a los detenidos por motivos políticos, y mantener decenas de centros clandestinos donde las victimas pasan los primeros momentos de su detención. La aplicación de esta clase de torturas en la DGCIM, provocó al menos dos intentos de suicidios entre los detenidos, ataques de pánico y de ansiedad, depresión y angustia que se reflejan en la situación física y mental de quienes se encuentran enterrados en los 3 sótanos en Boleíta, Caracas, tal y como lo reflejamos en el contenido de este informe.

El retardo procesal de casos emblemáticos de presos políticos continúa siendo utilizado para castigar a los oponentes; la detención preventiva pasa a ser una condena anticipada de personas que tienen entre 3 y 7 años detenidos sin que se cumpla el debido proceso y sin que se haya respetado su derecho a la defensa, ni haya habido sentencia.

El gobierno venezolano tiene protegidos a los altos y medios responsables de los crímenes denunciados ante la CPI. Vicepresidentes, ministros, directores de organismos de seguridad e inteligencia, siguen en sus puestos o fueron cambiados a otros cargos, varios fueron ascendidos y condecorados, pero ninguno ha sido puesto a la orden de la Justicia y mucho menos se le ha abierto una investigación. Hemos tenido conocimiento de cómo fiscales que llevaban casos reconocidos, como asesinato de manifestantes, por ejemplo, fueron obligados a cambiar resultados de las pesquisas, varios fueron destituidos o investigados, incluso acusados penalmente, por orden directa del fiscal general de la República, Tarek William Saab.

Mal puede el fiscal dirigir investigaciones serias e imparciales, al contrario, tratará siempre de encubrir su responsabilidad directa y a todos sus compañeros del partido PSUV del cual es militante, además de la estructura represiva del cual es un alto responsable.

Es evidente, que al gobierno de Nicolas Maduro Moro, no le interesa que la Corte Penal Internacional avance, al contrario, busca aplazarlo, tratando de obstruir la investigación, pues la estructura represiva la encabeza el mismo, tal y como queda demostrado en el Manual de Operaciones del DGCIM que ha llegado a nuestras manos, así como el mismo Reglamento Orgánico del DGCIM, la Constitución venezolana en su artículo 6 que le otorga el cargo Militar de Comandante en Jefe y máxima autoridad jerárquica de la FF.AA, así como la propia ley orgánica de dichas fuerzas.

Nuestra recomendación está dirigida directamente a la Sala de Jueces de la Corte Penal Internacional y al Fiscal Jefe Karim Khan, para que el proceso de investigación se reanude y avance, puedan identificar a los altos responsables de la planificación y ejecución de los crímenes de lesa humanidad cometidos por el gobierno venezolano en el marco de la represión sistemática que por motivos políticos ejecutan contra la población y realicen las acciones que sean necesarias para asegurar su enjuiciamiento y las víctimas y sus familias puedan conseguir justicia y reparación.

Este informe (que se inserta como archivo adjunto) fue enviado al momento de su publicación, 14 de febrero de 2023, a la Corte Penal Internacional, como respaldo de las denuncias hechas por el Instituto Casla ante esta instancia jurisdiccional.

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Eddie A. Ramírez S.

El régimen tiene la voz cantante sobre la elección presidencial. La fecha y las condiciones dependerán de las decisiones del grupo de malandros que usurpan el poder. Evidentemente, la presión de la gente en la calle y la de algunos países democráticos podrían obligarlos a realizar ese mandato constitucional comme il faut, o sea como debe ser. Sin embargo, en este momento está un poco rueda libre y por lo tanto impondrá la fecha y las restricciones que le convengan. En el caso de las primarias, corresponde a la dirigencia democrática decidir si se van a efectuar y en qué condiciones. Los electores tendremos la responsabilidad de votar por el que nos parezca mejor.

Tanto para las presidenciales, como para las primarias no debemos caer en la falacia del Nirvana o de la solución perfecta. Esta figura la postuló el economista Harold Demsetez a finales de la década de los años sesenta del siglo pasado. Básicamente, consiste en el error de querer comparar una solución ideal, pero inviable, con otra menos buena pero real. Dicho en otros términos, lo ideal es enemigo de lo bueno.

En las primarias, algunos precandidatos quieren imponer condiciones que consideran ideales, algunas de las cuales no parecieran ser reales. Es necesario confiar en la Comisión designada para conducirlas. Todos son ciudadanos honorables que no se prestarán a que el CNE ejerza influencia. Por ejemplo, es imprescindible que haya un número apropiado de centros de votación, para lo cual se requiere autorización para utilizar muchos de ellos. Lo ideal sería que la Fuerza Armada no participe a través del Plan República, pero hay que considerar que los paramilitares rojos tendrían la libertad de robarse las urnas y de agredir a los votantes. Cierto que en el estado Barinas, en la elección de gobernadores del 2008, la Fuerza Armada se apropió de las urnas para desconocer el triunfo de Andrés Velásquez. Sin embargo, esa fue una excepción, al igual que el abuso de autoridad de algunos efectivos militares el día de elecciones. Las máquinas del CNE no son las que han alterado los resultados en pasados eventos, sino la ausencia de muchos de nuestros testigos. Sin embargo, son causa de desconfianza y no hay justificación para utilizarlas.

Ojalá que todos los precandidatos entiendan esto. Puede que algunos decidan no participar si no se aceptan sus condiciones. Unos lo harán porque están conscientes de que sus probabilidades de triunfo son bajas; otros, por pretender lo ideal, pueden caer en la falacia del Nirvana, lo cual sería lamentable.

En la elección presidencial lo ideal sería que se realice de acuerdo con todos nuestros derechos constitucionales, pero esto nunca lo aceptará Maduro. Por lo tanto, habrá que dar la pelea en condiciones de inferioridad y, además, expuestos a que el usurpador arrebate a lo Jalisco. Por ello, en las primarias debemos elegir al mejor candidato o candidata, al que tenga menos rechazo, y que esté dispuesto a defender su victoria.

Hay otras opciones mejores que acudir a una contienda electoral en la que el régimen hará lo posible por torcer la voluntad de los electores, tales como una insurrección popular que obligue a Maduro a salir de Miraflores o que la Fuerza Armada haga respetar la Constitución, `pero cifrar nuestras esperanzas en estas opciones es caer en la falacia del Nirvana. El expediente en la Corte Penal Internacional avanza más lento de lo que deseamos, pero más rápido de lo que le gustaría a Maduro. Lo real y lo que está en las manos de los ciudadanos es acudir a votar en las primarias mediante un sistema de voto múltiple. Luego, volcarnos masivamente a depositar nuestro voto en la presidencial.

Las utopías siempre han atraído a muchos desde que el hombre disfrutó de tiempo para meditar y filosofar. Casi todas, se quedaron en el tintero. La que más daño ha ocasionado es la del comunismo. Casualmente, hoy 21 de febrero se cumplen 175 años de la publicación del Manifiesto Comunista. Para imponerlo, sus líderes asesinaron a millones de personas. Hoy está demostrado que es inviable.

La dirigencia opositora debe crear un frente común. No es tiempo de predicar soluciones óptimas. Hay que salir del régimen con las herramientas que tenemos a mano.

Como (había) en botica:

Los editoriales de Gladys Rodríguez son una lección de civismo. Nuestros excelentes comunicadores sociales en el exilio son un baluarte en la lucha contra el régimen.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

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Benjamín Tripier

La inflación se ha convertido en la piedra angular de los problemas de los venezolanos. Porque no importa el nivel socio económico, a todos nos está afectando; tal vez la diferencia se encuentra en la capacidad individual para manejar el problema, y en las posibilidades económicas de cada uno.

Porque para todos, sin excepción, hace un par de años un carrito de supermercado se llenaba con 100 dólares, y hoy no se hace con menos de 250 dólares. Y con este comentario nos estamos refiriendo a las casi cinco millones de personas que cuentan con posibilidades para ir a un mercado. Y estamos dejando por fuera a los veintiún millones que no tienen los ingresos para hacerlo, y están viviendo de dádivas, ya sean públicas o privadas; pero que no tienen una fuente de ingresos que ellos puedan procurarse con su propio esfuerzo.

El tema es que nuestra economía está tan disminuida que se hace difícil asistir al desamparado. Me gusta el ejemplo del carro con 21 millones de personas bordo, que está siendo empujado por 5 millones, para el total de 26 millones de venezolanos que constituyen la población que aún vive fronteras adentro del país.

Siempre pensando en la pirámide como referencia, la parte de arriba tiene a los 5 millones y la parte de abajo a los 21 millones restantes. El piso de la parte de arriba podría asimilarse, socioeconómicamente hablando, al parquero de un restaurante; el que, a su vez, se constituye en la referencia para la parte de arriba de la parte de abajo, que es la parte de arriba de la base de la pirámide. Podría decirse entonces, que los problemas de inflación son, principalmente, para la parte de arriba.

La experiencia nos dice que, a la inflación para vencerla, primero hay que luchar frontalmente contra ella. No se puede ni convivir, ni basarse en extrañas teorías de que la inflación genera actividad y que es buena. La inflación nunca es buena; es tal vez el cáncer de las sociedades, y habría que tratarla como tal.

Si bien la teoría la enmarca en el campo de lo monetario, sus causas suelen estar en el lado real de la economía; el lado de la oferta de bienes y servicios. Especialmente en países, como el nuestro, donde durante décadas la inyección de recursos financieros a la economía provenía de un estado que los obtenía de la venta de un producto que había sido generado con muy poca agregación de valor nacional, distorsionando así las relaciones económicas internas, cuya evidencia más clara se reflejaba en el sistema de precios de referencia… que siempre subía por causas exógenas… siempre en el límite de los equilibrios, y siempre con equilibrios inestables.

Entonces uno se preguntaría, cómo es que ahora, cuando menos ingresos petroleros tenemos, la inflación es tan alta, y puede serlo aún más. Porque es que estamos en el límite de regresar a la súper híper inflación que supimos tener. Y la respuesta está en la distorsión del modelo, producida por un estado empresario que sigue interfiriendo en las relaciones económicas, esta vez sin aportar ingresos, pero sí contribuyendo al gasto desmedido que hace que siempre, y casi sin excepción, la capacidad para demandar, sea superior a la capacidad de producir y ofrecer los bienes y servicios que la economía demanda.

Y es por eso que tenemos un piso muy alto de inflación, porque la gente recibe dinero inorgánico, ya sea como en el pasado donde era genuino pero distorsionante, ya sea en el presente donde es fabricado por el propio Estado. En ambos casos es inorgánico.

Cuando les decía que hay que luchar frontalmente contra la inflación, me refería no a la lucha del gobierno (pese a que es quien debe liderar la batalla), sino de toda la sociedad, con un proceso de confianza y credibilidad, donde todos estén dispuestos a poner de su parte y asumir sacrificios; los cuales, si están dentro de un plan orgánico y confiable, la sociedad debería estar dispuesta a emprender el camino.

Y aquí es donde se mezcla con el aspecto político; porque la sociedad ha perdido la confianza en sus líderes, quienes tienen niveles de rechazo social muy altos y no generan ni la confianza ni la credibilidad como para recibir apoyo para un plan de esta envergadura.

Y es que los niveles de rechazo de la dirigencia política son tan altos, que el gobierno no podría intentarlo, y el candidato resultante de las primarias tampoco podría hacerlo.

Sin embargo, en el esquema de poder y gobernabilidad que tenemos ahora, con el chavismo con un poder casi omnímodo, y con la oposición desmembrada, el gobierno podría apelar a ese poder para avanzar en una apertura de la economía que profundice el camino que emprendió hace un par de años; y formalizar los avances, e ir más a fondo con la liberación de controles; permitir la libre flotación de la moneda, admitiendo al dólar como moneda de curso legal y traspasando al sector privado, o cerrando, las empresas públicas que hoy son una carga sin contrapartida para la sociedad.

Lo anterior sin perder la capacidad inherente al estado de la generación de políticas públicas, y la capacidad de hacer que se cumplan. Porque hoy, que el chavismo se ha ido separando de la ideología, es un buen momento para despolitizar las medidas y consolidar la estrategia de mercado. Y esta vez, sin ambigüedades.

Político

Según el DRAE la ambigüedad es la cualidad de aquel lenguaje “que puede entenderse de varios modos o admitir distintas interpretaciones y dar, por consiguiente, motivo a dudas, incertidumbre o confusión”.

Usar la ambivalencia como táctica política pudo haber resultado hasta ahora, en que siempre había dinero como para el engaño que luego se arreglaba con un bono o con una misión. Pero cuando se acaba la fuente de financiamiento, los discursos ambiguos comienzan a chocar contra la realidad, y devolviéndose como un boomerang en contra de quienes los emiten. Eso ya le está pasando al chavismo que recibe protestas diarias de su propia gente, y le ha comenzado a pasar a la oposición ambigua que no termina de definirse.

Y si bien no hay ninguna señal en el horizonte que pueda afectar la continuidad del chavismo en el poder, del lado de la dirigencia opositora, siguen con su juego de tronos, pero sin tronos a la vista y con la ambigüedad “mesita”, “alacranes” y últimamente “escorpiones”. Se trata de una dinámica donde los dirigentes juegan a la captura de cargos que nunca van a tener, muy alejados de la percepción que de ellos tiene la gente.

Porque creen que una primaria es la solución, cuando, por el contrario, es parte del problema. Porque cuando se ve la lista de los potenciales participantes, y cuando se ve la lista de los que se están quedando por fuera, porque no creen en primarias, uno se da cuenta de que se trata de revolver la situación, para que, cuando se asiente (porque se va a asentar) las cosas estén igual o peor que antes.

Porque todos los intentos de unidad de la oposición se estrellaron contra ellos mismos y sus ambiciones; tanto los triunfos como las derrotas, todos terminaron con enemistades nuevas… los mismos actores, pero cambiando sus roles… ah… y siempre atacándose con virulencia entre ellos mismos.

Como dicen en la calle, “tumbaron a Guaidó, en vez de tumbar a Maduro”. Es evidente la falta de consistencia y continuidad; el exceso de personalismo, y, tal vez lo más importante, la falta de memoria, para identificar errores y hacer propósito de enmienda.

Porque todo lo que pasa en la dirigencia opositora con o sin sus primarias, no tiene impacto en la vida actual o futura de la gente (opositores y chavistas) y menos que menos en el proceso de toma de decisiones del gobierno, para quien ellos son la distracción que a veces necesitan para que no se vea algo que está pasando en la realidad.

Es de esperar que de este impasse de anarquía organizacional opositora, surja alguien diferente capaz de interpretar el sentir de las bases y comience a actuar en consecuencia.

Social

La normalidad económica de un país debería admitir que tanto el lujo, como la clase media, y hasta la pobreza, convivan en armonía, y sin resentimientos. Claro que en situaciones como la nuestra donde hay alrededor de 400 mil personas en el lujo, 4,5 millones entre las clases medias, alta, media y baja, y 21 millones de pobres, el desbalance es tan fuerte que no se trata de resentimiento, sino de supervivencia.

La pirámide nacional podría resumirse en 400 mil personas que dan trabajo a 2 millones, los cuales a su vez dan trabajo a otros 2,5 millones, de los cuales permea, a veces, no siempre, algo a los 21 millones de pobres.

Las actividades de lujo como las súper tiendas o el estadio de La Guaira están destinadas a un público muy especial, pero que dan trabajo a lo largo de la pirámide, a veces, hasta a los que están abajo, rescatándolos, aunque sea transitoriamente.

Lo importante, socialmente hablando, es que no se invisibilice a los pobres, porque el encandilamiento que producen las “cosas lindas de la vida” puede hacer creer que esa es toda nuestra realidad, cuando estamos lejos de que la realidad sea así.

Somos un país muy pobre, y el primer paso para dejar de serlo, es reconocerlo. Para trazar un camino desde lo actual, hacia un futuro donde el bienestar sea general, y que la pobreza sea un estado transitorio del cual, con esfuerzo, estudio y trabajo se pueda evolucionar. Donde el crecimiento económico orgánico apoyado en empresas que crean valor, sea la cantera de las oportunidades para que cada vez haya menos pobres, y que alguna vez, llegue a no haber ninguno.

Porque hoy hay gente comiendo de la basura.

Económico

Las compuertas y los compartimentos estancos se convierten en muros de contención que distorsionan la actividad económica y fuerzan a tomar, o dejar de tomar, decisiones, en un momento donde, si hubiera confianza, podrían optimizarse los escasos recursos con los que contamos.

Tenemos un país con una infraestructura deteriorada de talla 38, para una economía que apenas llega a talla 30. Y, por la diferencia de talles es difícil que un sastre lo ajuste, porque al ser tan grande la diferencia, sería como hacer algo nuevo. Eso nos pasa con el sistema eléctrico, con la banca, con las empresas básicas, con Pdvsa y en general con todo el país.

La distorsión anterior, si operáramos con una lógica de mercado, tendería a corregirse haciendo que lo que no es autosustentable, termine cambiando de ramo, o cerrando. Es impresionante la cantidad de empresas privadas que terminaron cerrando porque no encontraron una vía razonable de sustentabilidad.

Mientras que, de las empresas del Estado, muchas de ellas en situaciones críticas y de quiebra, siguen abiertas como si estuvieran produciendo, y con trabajadores reclamando “reivindicaciones” como si estuvieran funcionando bien.

El mercado de capitales es una vía para reacomodar la plataforma patrimonial y accionaria, buscando optimizar el uso de recurso, de forma tal de ir adaptando nuestra infraestructura a las verdaderas y limitadas posibilidades de nuestro mercado.

Internacional

El jefe de la OTAN reconoció los dos errores estratégicos que cometió Putin en su decisión de atacar a Ucrania: uno fue subestimar la fuerza y valentía del pueblo y el ejército de Ucrania, y el otro fue también subestimar la determinación y la unidad de la OTAN y de sus socios.

Porque no cabe duda que Putin se creyó su premisa de la OME de 72 horas. La próxima semana se cumple un año de esa atroz invasión y el grado de deterioro de Rusia es muy grande. No solo en cuanto a pérdidas materiales militares en los frentes de batalla, sino pérdida de mercados, bloqueos en el flujo de productos, rechazo mundial a todo lo que tenga que ver con Rusia, y una pérdida de reputación y confianza que demorará décadas en ser recuperada.

El destino final, puede anticiparse que será la rendición incondicional, la desmilitarización y el desarme; además de la pérdida de control político institucional de su país, que será tomado y ejercido por las fuerzas vencedoras. Y el resultado, para ellos, será el opuesto al que motivó su operación, que era recuperar los territorios de la antigua “cortina de hierro”.

De allí que ahora esté amenazando con atacar a Polonia, y que las fuerzas militares en el Báltico estén en alerta. El ataque ruso logró además expandir los presupuestos de defensa de todos los miembros de la OTAN, y comenzar a contar con “invitados” como Suecia y Finlandia, en su proceso de adhesión. No solo invierten en equipos convencionales de blindados y de infantería, sino que están probando nuevas tecnologías para anticipar la etapa que puede llegar en el segundo semestre, en la cual la OTAN ingrese formalmente en la guerra, y que EE UU, antes o después, se involucre en lo que se reconoce el conflicto global post WWII.

Porque a la guerra fría la ganó EE UU con el desmantelamiento de la URSS y la incorporación de Rusia al mercado capitalista. Y esta segunda etapa, iniciada por Putin tratando de regresar a la Rusia de los zares y al águila bicéfala, tiene como objetivo volver a enfrentar a EE UU, tomando como excusa el caso de ucrania. Pero la diferencia en poder militar es tan, pero tan abismal, que prácticamente Rusia no tiene posibilidades de salir bien de esta guerra que ellos mismos comenzaron.

Recomendación

  • Al gobierno: que se aleje lo más que pueda de las actividades económicas, incluyendo a aquellas que por ley le correspondería. Ha llegado el momento de tomar decisiones acordes con las circunstancias actuales, que no solo incluyen cambios demográficos y tecnológicos, sino que deben considerarse como condiciones permanentes a las sanciones de EE UU. Y que imite la situación de los peruanos que han logrado desenganchar la política de la economía. O de los brasileros que tuvieron 0,5% de inflación mensual bajo un gobierno de izquierda.
  • A la dirigencia opositora: que reconozca que están alejados del afecto de las bases, que ya no los representan y que los objetivos comunes que tenían han perdido coincidencia. Que ha llegado el momento de que surjan nuevos liderazgos con un perfil de patriotismo que haya quedado evidenciado con sus actos, de los públicos y de los privados. Con un par de excepciones honrosas, todos los dirigentes que aspiran a ser presidentes, han jugado a la ambigüedad y han puesto en juego sus principios. La gente ya no cree en ellos… ni en las encuestas que impulsan a unos y a otros.
  • A la dirigencia empresarial: que aún no se ha logrado que los actores privados excedentarios de la economía, se alineen y complementen con los deficitarios para optimizar el uso y rendimiento de los negocios. Hace falta una campaña de concientización sobre los mercados de renta fija y renta variable para incorporar diferentes segmentos y proyectos. Renta fija para el corto plazo, y renta variable para el largo.

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Simón García

Y hay que seguirle la corriente para ver hasta dónde la lleva el buen viento que está recibiendo. Su incremento no es una sorpresa, la infla el declive de Guaidó. Los seguidores de una misma política se desplazan confortablemente de un nombre a otro. Pero no es sólo migración interna, se está conformando una referencia populista conservadora.

Hay que reconocer que María Corina quiere gobernar. Y esa voluntad la vive con persistencia y coherencia. Pero su elemento impulsor en este tramo de pre-campaña le pone un techo: su extremismo no se corresponde con el hartazgo de los venezolanos ante el conflictivismo, los radicalismos de carrusel y la política como maña para aniquilar al otro.

El ascenso de María Corina y el del Conde son efectos de un rebote. La política que ya no puede valerse de sus propios medios, intenta recomponerse por medios sociales y fuera del partidismo tradicional. Hay un país que no quiere ni al gobierno ni a la oposición, porque ambos lo dejan a un lado.

La encuesta Datincorp retrata tres situaciones: Una, que esta no es la hora para aspirantes que tienen muy baja aceptación. Dos, sólo María Corina, Benjamín Rausseo y Rosales permanecen de píe y con posibilidades de incorporarse, Capriles. Tres, que Fuenteovejuna espera un nombre.

La gran desilusión, rechazo y desconfianza hacia partidos y políticos es la crisis de un modo de hacer política. Pero su otra cara muestra la gran oportunidad para iniciar una nueva fase de desarrollo cívico del país, cuyo logro principal sería un acuerdo nacional para vivir con bienestar, convivencia y democracia. ¿Quiénes son los parteros de esa nueva era? Y ¿Cuál es el formato, tamaño y contenido de las transformaciones viables?

Las elecciones presidenciales son un proceso que permiten hacerse y despejar ese tipo de preguntas. Todos, opositores y chavistas, estamos ante la posibilidad de contribuir a una transición mediante una propuesta de cambios pausados y seguros. En ese horizonte, el nombre del conductor del proceso debe brindar confianza a las fuerzas opositoras, a las gubernamentales y al país.

Si en el 2024 un candidato claramente opositor logra una victoria electoral, objetivo que es posible, el poder actual no la reconocerá si significa una amenaza a su seguridad y a la de sus círculos. Una restricción de escenarios que hay que tener presente y comprender que los propósitos claros y la confianza son llaves de la transición.

Decidirse por un candidato o candidata es elegir una visión sobre la transición, un programa para la reconstrucción institucional, económica y afectiva de la sociedad y optar por una política de entendimiento para dejar atrás el ciclo del autoritarismo de Estado. Un entendimiento que pasa por actuar para ganar con grandeza.

Ese candidato no ha cuajado en la percepción colectiva, pero está en avance el debate sobre sus características y atributos, tomando en cuenta el entorno actual. Entre ellas, 1) consistencia ética y valores, 2) independiente no sujeto a disciplina partidista, un demócrata. 3) noción del rumbo común para enderezar a un país astillado, 4) voluntad de diálogo y persuasión, 5) Solidario con los más golpeados por la crisis y compromiso con los actores que pueden sacar del hoyo al país con estabilidad, 6) Alianza con los sectores productivos, del conocimiento y del trabajo.

La figura no ha aparecido, pero aparecerá y veremos. El país lo tiene en la punta de la lengua.

Twitter: @garciasim

Simón García es analista político. Cofundador del MAS.

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Fernando Mires

La mentira es un arma de la guerra, no lo vamos a descubrir hoy. El enemigo está ahí para ser derrotado y, para derrotarlo, hay que saber engañarlo. Esa es una de las diferencias que separan a la guerra de la política. Lo que no significa por cierto que la política sea una práctica destinada a buscar la verdad.

El político no es un apóstol de la verdad, como debe ser un filósofo o un científico. Los políticos mienten, y eso tampoco vamos a descubrirlo ahora. Pero a diferencias de la práctica militar, la política no puede convertir, como sucede en una guerra, a la mentira en un sistema. Quien lo hace está destinado a perder pues cuando un político es descubierto en mentiras, suele pagarlo caro, algo que nunca puede ocurrir a un mariscal de batalla, quien está obligado por su profesión a engañar a sus enemigos.

Quizás para explicarnos mejor, debemos recurrir a algunas ideas de quien dedicara muchas páginas a pensar sobre el tema de la mentira y la verdad en la política. Por supuesto, nos referimos a Hannah Arendt.

En su escrito sobre «la verdad y la mentira en la política», así como en el apartado final de su libro «Entre el pasado y el futuro», distinguía Arendt tres tipos de mentiras en la política: las mentiras de la razón, las mentiras que se deducen de las verdades de opinión y las mentiras que provienen de las verdades de hecho.

Las mentiras de la razón – dejemos de lado las equivocaciones de la razón, eso es otra cosa – son las que provienen de la no revelación de la verdad con el objetivo de alcanzar un objetivo que puede ser simbólico o real. Arendt pone como ejemplo la mentira de los gobiernos conservadores alemanes relativa a que Alemania era una sola nación durante el periodo de la Guerra Fría pese a que sabían, más aún, aceptaban, que Alemania del Este estuviera acreditada en la ONU como nación independiente (la versión socialdemócrata era más sofisticada: «una sola nación y dos estados»). En ese sentido la mentira de «una sola nación»(que jurídicamente no existía) estaba puesta al servicio de una verdad deseada por la mayoría de los ciudadanos: la reunificación de las dos Alemanias.

Ahora bien, Putin también ha dicho y escrito que Ucrania y Rusia constituyen una sola gran nación. Para reunificarlas –de acuerdo a su versión– ha invadido a Ucrania. ¿Pueden compararse entonces la consigna de la unión de Rusia y Ucrania con la de las dos Alemanias? No. En ningún caso.

En primer lugar, Ucrania existió como una nación independiente y soberana desde marzo de 1917 (La Rada Central Ucraniana). Lenin ratificó su independencia el 18 de enero de 1918. La reanexión de Ucrania a Rusia por parte de Stalin fue, en cambio, un acto de apropiación imperial, resultado del pacto nazi-soviético de 1939. En segundo lugar, la declaración de independencia de Ucrania de 1991 fue el producto de un referéndum nacional en el que los independentistas obtuvieron una victoria con más del 90 por ciento de los votos, algo que nunca habría podido suceder en el periodo de la dictadura comunista en Alemania del Este.

Sintetizando podemos decir que mientras la mentira de una sola nación estaba puesta en Alemania al servicio de una verdad histórica y política, la mentira de una sola nación elaborada por Putin está puesta al servicio de la anexión brutal de una nación independiente. Visto así, la mentira alemana era políticamente racional, mientras que la mentira rusa era y es, políticamente irracional. La primera apuntaba a la reunificación política. La segunda, a una invasión militar.

Siempre en relación con el tema de la verdad en la política, Arendt distinguía, además, dos tipos de mentiras que se deducen de dos tipos de verdades. A una la llama verdad de opinión y a la otra, verdad de hecho. Fácil deducir es que la verdad de opinión solo puede ser verdadera si se ajusta a los hechos. Decir por ejemplo, Stalin fue un gran hombre, es una opinión. Decir en cambio, Stalin mandó asesinar a millones de personas, incluyendo a toda la vieja guardia bolchevique, es una verdad de hecho. Del mismo modo, decir que Putin es una persona bondadosa, es una verdad de opinión. Decir en cambio que las tropas rusas enviadas por Putin han asesinado a miles de ucranianos civiles, incluyendo a muchos niños, es una verdad de hecho.

Las buenas opiniones son entonces las que se ajustan a los hechos. Las que no se ajustan, o no son verdades, o son verdades a medias, o son simplemente, mentiras. Ahora, la mayor perversión política, aduce Arendt, no aparece cuando las opiniones no están sustentadas en hechos, sino cuando sustituyen a los hechos. Convertir a las opiniones en hechos, es una de las principales características de los regímenes totalitarios, agregaba. Justamente esa perversión historiográfica del putinismo es la que detectó el politólogo e historiador alemán Herbert Münkler en un reciente artículo

Para demostrar la mendacidad de Putin, Münkler hace una disección del ominoso discurso que pronunciara Putin en Volvogrado con motivo del 80 aniversario de la guerra (02-02-2023) Münkler indica con razón que la batalla de Stalingrado como punto de inflexión de la guerra es una verdad subjetiva, pues para los aliados ese punto está marcado por el desembarco en Normandía en 1944. Pero suponiendo que hubiera sido así, Putin en su verdad, omitió otra verdad muy importante, a saber, que gran parte de los contingentes que lucharon en Stalingrado eran ucranianos. Hablar solo de tropas rusas puede ser considerado entonces como una mentira por omisión, u ocultamiento intencional de una parte de la verdad. Una verdad a medias no es verdadera. Esa verdad a medias – eso no lo precisó Münkler – sirvió a Putin para fundamentar tres grandes mentiras.

La primera mentira dice que la guerra que hoy emprende Rusia en contra de Ucrania fue concebida para liberar a Ucrania de un gobierno fascista. La segunda, tanto o más grande que la otra, es que la Alemania de hoy continúa la tradición de la Alemania nazi al enviar tanques a Ucrania. Y la tercera, la más horrible de todas, es que la guerra de invasión que Putin ordenó en Ucrania, tiene un carácter defensivo. Citemos a Putin: «Hoy vemos, desgraciadamente que la ideología del nacional socialismo en su moderna configuración representa nuevamente una amenaza para la seguridad de nuestro país. Nuevamente hemos sido forzados a defendernos de la agresión del Occidente colectivo».

En su capacidad de mentir, Putin ha terminado por superar al mismo Hitler. Desde que invadió a Ucrania, en 2014, efectivamente, no ha parado de mentir.

Mintió Putin cuando calificó de fascista a la revolución del Maidán en 2013, hecho en el que participaron todos los partidos democráticos de la nación, así como miembros de todas las confesiones religiosas de Ucrania. Mintió cuando afirmó, sin ninguna fundamentación geográfica ni política, que Crimea, Sebastopol y los territorios del Donbás, pertenecen a Rusia. Mintió cuando firmó los documentos de Minsk en 2015. Mintió en su tramposo artículo del 2021 al escribir que por razones naturales y sanguíneas Ucrania era solo un territorio de Rusia. Mintió en febrero del 2022 cuando comunicó que los cien mil soldados estacionados en los límites con Ucrania realizaban solo ejercicios militares. Mintió al calificar de guerra defensiva su ataque a la población civil de Ucrania. Ha mentido negando el envenenamiento a disidentes (Navalny es solo uno de una larga fila). Ha mentido cuando presentó a la OTAN como amenaza a la integridad de Rusia, en el mismo periodo en que la OTAN se comprometía a no integrar a Ucrania. Y hoy vuelve a mentir al comparar a la democrática Alemania de nuestro tiempo, con la Alemania nazi de Hitler.

De acuerdo a la partitura de Hannah Arendt, Putin miente en todos los registros. Sus mentiras son racionales, es decir, concebidas de acuerdo a un objetivo, en este caso, construir una legitimación que sea útil a la guerra de invasión. Son también mentiras de opinión, pues no están sustentadas en ningún hecho. Y finalmente son mentiras de sustitución, ya que su objetivo es sustituir hechos por opiniones.

Al final solo queda una pregunta. ¿Creerá Putin en sus propias mentiras? Si no cree en ellas, solo queda pensar que estamos frente a un desalmado sin límites, la representación del mal radical tal como lo entendió Kant (el mal situado más allá de toda ley o norma). Si en cambio cree en sus propias mentiras, estamos frente a un psicópata que ha logrado zafarse de toda contención legal y moral, un ser enloquecido actuando sin ningún control, sin más objetivo que destruir las evidencias para sustituirlas por sus visiones. Probablemente, como suele ocurrir, las dos posibilidades no se excluyen entre sí. Ahí reside precisamente el gran peligro.

Putin, al destruir a la verdad, intenta destruir a la realidad. Una realidad que comienza pero no termina en Ucrania. Probablemente, la destrucción de la realidad, por él sistemáticamente emprendida, conducirá alguna vez la destrucción de su propia persona, como ocurrió con Hitler y en cierta medida con Stalin. Si va a ser así, solo cabe desear que ocurra pronto.

Referencias:

Hannah Arendt – Zwischen Vergangenheit und Zukunft, Piper, Munchen 2000

Hannah Arendt – Wahrheit und Lüge in der Politik, Piper, München 1987

Herfried Münkler – EL MITO DE LA BATALLA DE STALINGRADO (polisfmires.blogspot.com)

Fernando Mires – LAS TRES GRANDES MENTIRAS DEl PUTINISMO (polisfmires.blogspot.com)

Twitter: @FernandoMiresOl

Fernando Mires es (Prof. Dr.), Historiador y Cientista Político, Escritor, con incursiones en literatura, filosofía y fútbol. Fundador de la revista POLIS.

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Alejandro J. Sucre

Para evaluar a los gobiernos de Venezuela desde 1960 en forma objetiva, debemos ver el crecimiento de la liquidez monetaria desde 1960 hasta el 2022. Ahí notaremos como los gobiernos han usado la liquidez monetaria para fines clientelares y para privilegiar a sus grupos sin cesar. Las cifras estadísticas quedarán a través de la historia para que se pueda evaluar el aporte o los daños que cada gobierno ha causado a la nación de manera objetiva. Revisando cada quinquenio dese 1960 hasta el 2022, podemos ver gobierno por gobierno el uso clientelar o tribal del gasto fiscal examinando el crecimiento de la liquidez monetaria, el PIB, la inflación, la devaluación y el crecimiento de la deuda externa.

Desde 1959 -1963, el PIB creció 24%, la liquidez monetaria solo 6% y la inflación el 4% acumulada en 5 años. Para el periodo 1964-1968, el PIB creció 18%, la liquidez monetaria 48%, y la inflación el 8 % acumulada. Para el periodo 1969-1973, el PIB creció 40%, la liquidez monetaria 108%, y la inflación el 14 % acumulada. Para el periodo 1974-1979, el PIB creció 21%, la liquidez monetaria 304%, y la inflación 124 % acumulada. Para el periodo 1979-1983, el PIB cayó -19%, la liquidez monetaria 172%, y la inflación 73 % acumulada. Para el periodo 1984-1988, el PIB cayó 5 -%, la liquidez monetaria +52% %, y la inflación 256% acumulada. Para el periodo 1989-1993, vemos que no hubo ningún gran viraje en cuanto a gasto fiscal improductivo: el PIB creció 5%, la liquidez monetaria 256%, y la inflación 244 % acumulada. Para el periodo 1994-1998, el PIB creció 11%, la liquidez monetaria 469%, y la inflación 358 % acumulada. Para el periodo 1999-2003, nada nuevo trajo la revolución en cuanto a efectividad del gasto fiscal: el PIB cayó -11%, la liquidez monetaria 218%, y la inflación 248 % acumulada.

Para el periodo 2013-2020, el PIB cayó -70%, la liquidez monetaria subió 560.200%, y la inflación 600.000 % acumulada. Para el periodo 2021- 2022, el PIB creció 11%, la liquidez monetaria 1.000%, y la inflación 1.000 % aproximada y acumulada.

Vemos ajustes tras ajustes, devaluación tras devaluación es lo que sigue a gobiernos que usan el gasto fiscal para repartirse entre sus privilegiados como botín y no para desarrollar el conjunto de la nación. Gobernantes piden sacrificios al pueblo para continuar un gasto fiscal clientelar, financiado con emisión de dinero inorgánico por el BCV e imponiendo ajustes tras ajustes a la población que no permiten el desarrollo de obras de infraestructura ni los incentivos de inversión privada para el futuro de la nación. Usar del dinero del fisco como premio a repartirse o “botín” del partido de gobierno de turno estimula la división social, creación de tribus, pugnacidad entre ciudadanos (los que guisan y los enchufados y los que no, los empresarios versus los trabajadores). Impide el trabajo en conjunto de loso ciudadanos y genera distorsiones en todos los sectores de la economía.

Una sociedad en pugna y con un gobierno que usa la liquidez monetaria con fines clientelares genera una economía tribal de continua devaluaciones, elimina el crédito por la inflación que genera la emisión de dinero inorgánico, genera especulación y altos precios de bienes y servicios, y no puede desarrollar inversiones de infraestructura de largo plazo para que el país logre desarrollar sus ventajas comparativas y posicionarse entre las naciones del mundo prósperamente. El gasto fiscal clientelar debilita a toda la nación y genera también divisiones geopolíticas innecesarias.

Vemos que los gobiernos desde 1970 al presente aplican ajustes solo a los ciudadanos, pero no a la eficiencia del gasto fiscal. Cuando había ingresos petroleros, los ciudadanos aceptaban el modelo de estado clientelar tribal, aunque el costo fuera alto para la nación, ya que se alternaban los grupos de privilegiados en el poder y había inclusión social en el reparto del botín fiscal. Cuando llegan las sanciones a la venta del petróleo en el 2019 se genera una fuerte caída en el PIB (70%) , altísima inflación y devaluación. Mayor exclusión social y menor inversión privada. Y gran caída en los sueldos. Sale a la luz las ineficiencias de todas empresas del estado que pierden dinero y colapsan los servicios públicos.

El gobierno del presidente Maduro debe acelerar el paso de las reformas si quiere aparecer en la historia con resultados positivos sobre la economía venezolana. Ya el presidente Maduro a mejorado instituciones como el Saime, parques nacionales, La Superintendencia de Valores, ha liberado la economía de muchas amarras burocráticas desde el 2020. Ahora debe acelerar el paso y volver a licitar el gasto fiscal en todos las instituciones centralizadas y no centralizadas. Debe rendir cuentas cada institución. Deben presentar estados financieros y objetivos alcanzados auditados anualmente por institución y empresa del estado. Debe acelerar el rescate de empresas del estado con participación ciudadana y negociar el levantamiento de sanciones. Así la economía crecerá por encima de $500.000 millones /año e irá a compararse con la de Texas que produce $2 trillones de PIB por año con la misma población y recursos naturales.
Twitter @alejandrojsucre

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