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José E. Rodríguez Rojas

Delicateses en un país dual

José E. Rodríguez Rojas

La desigualdad social de Venezuela se ha agudizado hasta convertirla en un país dual donde coexisten dos realidades contrastantes. Una se caracteriza por la proliferación de emprendimientos especializados en delicateses orientadas a satisfacer las necesidades de una minoría de privilegiados, que tienen la capacidad de compra para pagarlas. Con esta realidad coexiste otra, que involucra al 80% de la población, con una capacidad de compra menguada que le impide satisfacer sus necesidades básicas.

Como profesor jubilado, la gastronomía y la cocina se han convertido en un pasatiempo que ocupa parte de mi tiempo, aún en época de crisis. En este contexto escucho desde hace tiempo un programa de gastronomía que se transmite por Unión Radio los fines de semana. Buena parte de las ediciones del programa citado se focalizan en la entrevista a emprendedores en el área de la gastronomía que desarrollan sus actividades en la ciudad capital o en el interior del país.

En una de las ediciones más recientes del programa mencionado se entrevistó a un emprendedor cuya actividad se focalizaba en la elaboración de hamburguesas gourmet. Me llamó la atención que una de las hamburguesas que se incluía en el menú era una con queso azul.

Otro de los emprendedores entrevistados era un profesional especializado en el arte del corte de jamones de pierna curados, que llamamos también serranos. Es necesario acotar que a pesar de la crisis sobrevive al menos una empresa de calidad reconocida productora de piernas de jamón serrano. En la entrevista mencionada, el conductor del programa señaló que en épocas previas se acostumbraba traer de España a profesionales especializados en el corte de piernas de jamón a fin de realizar su tarea en fiestas familiares o de empresas. En la actualidad no es necesario hacer esto pues existen en el país profesionales especializados como el entrevistado. El emprendedor mencionado manifestó que normalmente cuando lo llaman para una reunión a practicar su arte, él lleva la pieza de jamón, pero puede darse el caso de que la persona pague el servicio del corte solamente.

En otro programa del mismo canal, especializado en tecnología, entrevistaron a un emprendedor que elaboraba ensaladas gourmet, las cuales ofrecía a través de los medios digitales ahora en boga y que pueden solicitarse a través de los mismos medios. Ellos garantizan que la ensalada llega en tiempo récord y en una estado de frescura como si estuviera recién elaborada. El conductor del programa señaló que él había solicitado una y esta llegó en media hora, en condiciones de frescura que lo impresionaron. Algunas de estas ensaladas van acompañadas de quesos madurados como parmigiano reggiano y otras delicateses similares.

La gran mayoría de los emprendimientos señalados se concentran en Caracas obedeciendo a un fenómeno de reciente data donde la capital es la que protagoniza el grueso de estos eventos. A pesar de ello en Maracay pueden encontrarse algunos de estos productos sin mayor esfuerzo.

En la charcutería donde suelo hacer mis compras me sorprendió ver una pierna de jamón serrano, de una marca de reconocida calidad, que en los buenos tiempos consumía con regularidad. Actualmente es un producto prohibitivo para un profesor universitario, ya que su precio asciende a 800.000 Bs el kilo, equivalente al sueldo de un mes de un profesor con categoría de titular.

Además de los emprendimientos citados existen otros en el área de las delicateses, la mayoría de ellos concentrados en la capital y que proliferan cada día mas. El economista Asdrúbal Oliveros, de la firma consultora Ecoanalítica, señaló en unas declaraciones recientes que la apertura de nuevos bodegones especializados en exquisiteces es una de las cosas que llama la atención en la actualidad. Según Oliveros estos bodegones se orientan a satisfacer las necesidades de un 20% de la población que tienen la capacidad de compra para pagar el precio de estas exquisiteces (Noticiero Digital. 2019).

La desigualdad social se ha agudizado en Venezuela hasta convertirse en un país dual donde coexisten dos realidades contrastantes. Por un lado observamos la proliferación de emprendimientos especializados en delicateses, como los que hemos descrito, orientados a satisfacer las necesidades de un grupo minoritario con capacidad de compra para pagar las mismas. Esta realidad coexiste con otra que involucra al 80% de la población con una capacidad de compra menguada que no le permite satisfacer sus necesidades básicas, llegando al extremo en algunos casos, de verse obligados a hurgar en la basura en procura de los alimentos que requieren. Además de ello deben enfrentar la crisis de los servicios públicos lo que hace más precaria su situación, en particular en el interior del país.

España y Ponce (2018) constataron esta situación en un trabajo publicado en Prodavinci. Es necesario destacar que Pedro Luis España dirige desde hace tiempo el laboratorio de pobreza de la Universidad Católica Andrés Bello, centro reconocido por su experticia en esta materia y que forma parte de las organizaciones universitarias que llevan a cabo la Encuesta de Condiciones de Vida (ENCOVI). El trabajo citado se focaliza en el análisis de la desigualdad social en Venezuela en el periodo reciente. En el mismo los autores señalados constatan que la desigualdad social en nuestro país se ha agudizado hasta convertirse en un país dual donde coexisten las dos realidades contrastantes que hemos expuesto en párrafos anteriores.

Referencias

España, P. L. y Ponce, M. G. 2018. Venezuela es el país más desigual del continente ¿Que pasará con la desigualdad social después del 17A?. Prodavinci, 22, 08, 2019.

Noticiero Digital. 2019.Asdrúbal Oliveros: tenemos un terrible sistema de desigualdad que cada vez se profundiza más. 16 de octubre.

Profesor UCV

Líderes sin ideas

José E. Rodríguez Rojas

Las últimas décadas han constituido un escenario de debate y confrontación, donde líderes sin ideas han terminado por bloquear las iniciativas que se han planteado para reducir la dependencia de la renta petrolera. Uno de los más relevantes ha sido Hugo Chávez, quien asciende al poder con un libreto escrito por Luis Miquilena; luego del 2002 rompe con Miquilena y abraza el socialismo del siglo XXI, que obedece a una agenda para prolongarse en el poder, cuyos detalles lo elaboran los cubanos. No es una agenda para el desarrollo, por el contrario, nos embarcó en una ruta que al final condujo a la debacle económica y social que atravesamos. El chavismo al igual que su líder es un movimiento sin ideas, lleno de retórica, la cual es una mampara que ha buscado ocultar los propósitos reales de sus líderes.

Manejar un Estado es un asunto complejo, por ello los líderes políticos que aspiran a dirigir el mismo deben tener una formación básica que les permita formular planes económicos para enfrentar los retos que plantea la globalización a los Estados modernos. Así lo entendieron los dirigentes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México y enviaron a sus jóvenes presidenciables a formarse en las mejores universidades de los Estados Unidos en gerencia y economía. Un miembro de esta generación fue Carlos Salinas de Gortari quien llegó a presidente de México a inicios de la década de 1990. En su administración se discutió y aprobó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), mediante el cual México estrechó sus nexos con la economía de los Estados Unidos e impulsó al país petrolero a disminuir su dependencia de la producción de crudo y tomar la ruta al desarrollo que la convertiría en la onceava economía mundial (Rodríguez Rojas, José. E.2019. La exitosa ruta de México hacia un país no dependiente del petróleo. Digalo Ahi, n° 7, julio 23).

Una de las limitantes de nuestro país es que una parte de la elite política venezolana ha estado constituida por políticos lampiños de ideas, que han bloqueado las iniciativas que se han tratado de implementar para disminuir la dependencia de la renta petrolera. Ese fue el caso de los comisarios políticos de AD en la llamada “cuarta república” quienes torpedearon la propuesta de reformas económicas planteada por Carlos Andrés Pérez en su segundo gobierno. La propuesta del equipo de CAP incluía un conjunto de reformas dirigidas a incrementar la competitividad de la economía venezolana e impulsar las exportaciones no petroleras. Pero incluía también reformas orientada a fortalecer la democracia venezolana y disminuir la dependencia del poder ejecutivo central. Entre ellas figuró la elección directa de alcaldes y gobernadores. Como lo plantea la periodista Mirtha Rivero en su libro la Rebelión de los Náufragos, esta propuesta arruinó el negocio de los secretarios generales de AD, que en el viejo sistema tenían aseguradas las gobernaciones en cada región y con ello el acceso a los recursos públicos provenientes de la renta petrolera. De allí su reacción negativa a las reformas planteadas por CAP en su segundo gobierno.

Otro miembro de esta especie fue Hugo Chávez, el fundador del movimiento que lleva su nombre. Chávez andaba como un alma errante, después de salir de prisión, deambulando de pueblo en pueblo, denunciando a la democracia venezolana como corrupta y pregonando la abstención, a la espera de que dicho discurso alentara otro golpe de estado.. De este peregrinaje lo sacó Luis Miquilena quien lo convenció de participar en las elecciones y elaboró la agenda del movimiento que ambos lideraron. El proyecto de Miquilena hacía énfasis en consolidar la democracia venezolana y los elementos que le son característicos, como la separación de poderes, el fortalecimiento de las instituciones que garantizan el ejercicio de los derechos civiles, como la libertad de expresión; así como el control de la corrupción un tema que obsesionaba al veterano político izquierdista. El tema de la pobreza y las desigualdades no aparecía como un tema prioritario. Un planteamiento que cualquier persona sensata suscribiría.

Con esta agenda. Miquilena y Chávez convencen a buena parte de la élite del país de acompañarlos en su aventura. Una vez que ganaron las elecciones, Chávez y Miquilena lo que hicieron fue prolongar la Agenda Venezuela colocando en el ministerio de economía a un competente economista Felipe Pérez Martí, quien se encargaría de los detalles del programa económico. Pérez Martí continuó la agenda antiinflacionaria de Teodoro Petkoff conocida como la Agenda Venezuela que retomaba en términos gruesos las reformas económicas impulsadas por CAP previamente. El Banco Central continuó controlando la masa de dinero y el dólar siguió desplazándose en una banda como lo había hecho previamente. La inflacion continuó sus ruta descendente y la capacidad adquisitiva de los trabajadores y la clase media mejoró. La pobreza no aparecía como un tema prioritario.

A partir de la crisis del 2002 Chávez da un giro de 180 grados y abraza el socialismo del siglo XXI, asumiendo una agenda inspirada en la Cuba de los Castros. La relación con Miquilena se rompe cuando éste le advierte de la corrupción en su familia y discrepa de la ruta socialista. Miquilena, un experimentado revolucionario de izquierda, trata de convencerlo de que el ideario cubano no funciona, ni siquiera en Cuba, y busca la colaboración de Fidel Castro para convencer a Chávez de su desatino. Sin embargo el anciano dictador lo que hace, según Miquilena, es utilizar el enorme ego y vanidad de Chávez, lo halaga y lo continúa manipulando para continuar parasitando las arcas públicas venezolanas.

Se conforma la alianza con los cubanos y estos escriben el libreto de la nueva ruta para permanecer en el poder sin control institucional alguno: poíitica del terror contra la disidencia, control de las instituciones, estatización de la economía y manipulación de los pobres, a través de los programas sociales. En su alianza Chávez aspira beneficiarse de la aureola de Fidel Castro en América Latina y aprender del maestro como prolongarse indefinidamente en el poder sin contrapesos institucionales, como lo afirma Enrique Krauze en su obra “El poder y el delirio”. Un proyecto contrario al de Miquilena quien lo critica abiertamente. El nuevo libreto no es una agenda hacia el desarrollo pues, los cubanos carecen del capital humano para elaborar una agenda de esta naturaleza. El nuevo ideario nos embarca en la ruta hacia la debacle económica y social que atravesamos.

El extraordinario incremento de los precios del petróleo proyecta a Chávez como un líder regional, basado en el billete y los maletines que lo contenían. En un viaje a un congreso de mi especialidad celebrado en Quito, en el año 2007, un editor de una revista académica me comentó: °si no hubiera sido por los precios del petróleo, Chávez hubiera sido un personaje intrascendente en la historia reciente de América Latina y de Venezuela”.

La agenda adoptada por Chávez, diseñada por los cubanos, no es una agenda de desarrollo, al contrario contiene dos elementos que lo impiden. Por un lado la relación conflictiva que plantea con los Estados Unidos, y por otro el permanente hostigamiento hacia la iniciativa privada. Va en línea totalmente opuesta a la orientación liberal de las agendas que se han implementado en los paises mas exitosos de América Latina. La agenda busca como propósito prioritario eternizarse en el poder a través de un mayor control de la sociedad por el Estado y una sistemática política del terror, para anular la disidencia interna. Como una mampara se desarrolla una retórica revolucionaria donde las palabras pierden su contenido, donde las ideas son sustituidas por una retórica vacía y hueca que trata de esconder el propósito real de los que se esconden tras de ella. El chavismo tiene varios retos como movimiento político, uno de ellos es sustituir esta retórica por ideas que permitan conformar una agenda de desarrollo; personalmente no creemos que pueda hacerlo pues el peso muerto de su liderazgo fundacional lo impide.

Profesor UCV

La reivindicación de CAP

José E. Rodríguez Rojas

Carlos Andrés Pérez (CAP) en su segundo gobierno (1989-1993), implementó un conjunto de reformas orientadas a superar el modelo rentista, incrementando la competitividad de la economía venezolana a fin de insertar la misma en el proceso de globalización, como lo hicieron México, Colombia y Chile. Las reformas de CAP generaron la oposición de buena parte de la elite local, quienes deseaban continuar beneficiándose del reparto de la renta petrolera. Ello propició la defenestración de CAP e hizo naufragar el proceso de reformas, abriendo el camino a un liderazgo que profundizó el modelo rentista y sentó las bases de la crisis que nos agobia. Desde hace varios años se viene planteando la reivindicación del ex presidente, un político excepcional y visionario.

Diversas individualidades han planteado la necesidad de reivindicar al ex presidente Carlos Andrés Pérez y su malogrado intento de reformular el modelo rentista. Uno de ellos ha sido el cineasta Carlos Oteyza quien llevó a cabo dos documentales a fin de analizar la obra de sus dos gobiernos en forma desapasionada. Según un reportaje publicado en el diario español El País los documentales de Oteyza son parte de un ajuste de cuentas con el pasado, pues previo a estos documentales el cineasta había producido en el 2012 “Tiempos de dictadura”, un film que ensalzaba a los civiles que contribuyeron al derrocamiento de Pérez Jiménez. Según Oteyza “CAP tuvo la valentía de cambiar cuando el país no lo entendía”. Al final el país y sus élites no entendieron la necesidad del cambio que Pérez proponía, pues “a Pérez lo tumbaron las élites económicas y los partidos políticos” que se resistieron a las nuevas reglas de juego impuesta por una economía libre y competitiva. El film deja muy claro que CAP se confió demasiado en su influencia personal y no construyó un piso político para las reformas (El País. 2017).

Un segundo intento de reivindicar la obra de CAP fue emprendido por la periodista Mirtha Rivero en su obra “La rebelión de los náufragos” donde analiza los diversos factores que llevaron al derrocamiento de CAP. Trata de reconstruir el proceso que llevó a la defenestración de CAP recurriendo a entrevistas con los diversos actores, en particular con los actores políticos entre ellos miembros de su partido Acción Democrática y Copey. Algo que queda en evidencia en el libro, es la contribución de Rafael Caldera quien, movido por sus ambiciones personales justificó en el parlamento el golpe dado por los militares. Otro aspecto destacado es la oposición del partido de gobierno, el cual se opuso a las reformas debido a que los secretarios generales de AD fueron perjudicados por las mismas, en particular por la que llevó a la elección directa de gobernadores. Los secretarios generales de AD tenían aseguradas las gobernaciones cuando su partido ascendía a la presidencia y utilizaban las mismas para derivar recursos hacia los empresarios cercanos a su entorno, en un proceso poco transparente. La elección directa de gobernadores dio al traste con este mecanismo de reparto de la renta petrolera y provocó la reacción airada de los comisarios políticos de AD contra CAP y su gobierno (Rivero.2011).

Más recientemente, el filósofo y articulista de El Nacional, Antonio Sánchez García planteó la necesidad de revisar la historia reciente de Venezuela y el rol que han desempeñado líderes como CAP, Caldera y Chávez. En su perspectiva el ex presidente Pérez intentó modernizar el país y abrirlo al futuro buscando el desmontaje de los pesados lastres burocráticos que limitaban, dificultaban e impedían el emprendimiento"...tomando “medidas que al descentralizar la vieja y pesada carga del estatismo acicateaba a la gerencia, la producción y al desarrollo de la libre competencia; superando y trascendiendo la dependencia petrolera”, posibilitando así la superación de la Venezuela agraria y petrolera para alcanzar la Venezuela moderna y desarrollada. Mientras Pérez fue el líder orientado al futuro, Rafael Caldera “representó... voluntaria o involuntariamente a los viejos y anquilosados poderes que vivían de los favores del Estado” rentista. “Pérez fue el caudillo orientado al futuro y Caldera el caudillo tradicional orientado al pasado”. Según Sánchez García la crisis que nos agobia es el resultado de este conflicto entre líderes que apostaban al pasado rentista y los que se volcaban hacia un futuro que superara la dependencia petrolera. . Buena parte de la elite criolla apostó al pasado rentista y se opuso radicalmente a las reformas de CAP, entre ellos “un empresariado rentista, que no le perdonaba la apertura económica al libre mercado … y la superación del estatismo mercantilista”(Sánchez García. 2019). Entre estos últimos es necesario destacar el rol de la cúpula de los empresarios agrícolas organizados en FEDEAGRO, que no le perdonaron a CAP el haber culminado con la política de subsidios implementada por Lusinchi en un gobierno previo, que dio lugar a lo que se denominó como el milagro agrícola.

Otra contribución que destaca el singular papel jugado por CAP es la de la asesora de CEDICE y articulista de El Nacional Isabel Pereira quien señala que la sociedad venezolana estaba dominada por la acción de un Estado hipertrofiado que manejaba la principal fuente de riqueza generada en el país. En este contexto CAP realizó un gran viraje en el marco del cual se promovieron reformas para limitar el poder del Estado, como la elección directa de alcaldes y gobernadores. Era de esperar la reacción de los agentes económicos ya que la economía estaba tomada en parte por grupos dependientes de los subsidios estatales. Pero además se produjo la radical oposición de los empresarios, propietarios de medios, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil que no entendieron la trascendencia del viraje. A juicio de Pereira con el derrocamiento de CAP se comenzó a profundizar la tragedia y se abrió la puerta a los simpatizantes del “socialismo del siglo XXI” que confiaban en la intervención del Estado para labrar el futuro económico del país. En este contexto Chávez y luego Maduro tomaron la alternativa y destruyeron la economía y el país (Pereira. 2019).

Carlos Andrés fue un político excepcional, formó parte de la generación fundadora de la democracia venezolana y como lo plantea Alexis Ortiz, un político venezolano exiliado en Miami, se impone en la actualidad la reivindicación de Pérez. Fue un político visionario que trató de apuntar al futuro y superar el rentismo petrolero, reto que todavía sigue pendiente.

Referencias:

El Pais. 2017. La pantalla reivindica a Carlos Andrés Pérez, El Pais, 2 de enero del 2017.

Ortiz, Alexis. 2019. La reivindicacion del presidente Carlos Andrés Perez. El Nuevo Herald, 13 de junio.

Pereira, Isabel. 2019. Un balance del ultimo trimestre. Noticiero Digital. 6 de octubre.

Sánchez García, Antonio. 2019. Carlos Andres Perez. La historia pendiente. El Nacional, 29 de septiembre.

Rivero, Mirtha. 2011. La rebelión de los náufragos. Editorial Alfa. 2a reimpresión.

Profesor UCV

La izquierda latinoamericana se distancia del régimen de Maduro

José E. Rodríguez Rojas

El informe de Bachelet tuvo un fuerte impacto en la izquierda latinoamericana. Los partidos más influyentes y relevantes decidieron distanciarse del régimen venezolano. En este contexto, se desmarcaron de las intenciones del régimen de utilizar el Foro de Sao Paulo para descalificar a la expresidente chilena y cuestionar su informe. La mayoría no asistieron, convirtiendo el Foro en un evento débil y deslucido. Parte de los que participaron no acompañaron al régimen, lo que impidió un pronunciamiento alineado con las aspiraciones del gobierno del presidente obrero.

El informe de la expresidente chilena fue demoledor para el régimen, en primer lugar por la contundencia del contenido y crudeza del mismo, en relación a la violación de los derechos humanos, y en segundo lugar por el prestigio de la autora del informe dentro de la izquierda latinoamericana. El gobierno en lugar de conciliar con Bachelet y hacer concesiones, procedió a su descalificación, presentándola como una aliado de la derecha y del imperialismo. Como lo expresó Diosdado Cabello recientemente: “Ese informe no lo hace ella, ella lo que hace de manera irresponsable es firmarlo (…) ese informe es realizado, hecho, redactado por el imperialismo norteamericano y se lo ponen en su escritorio.”. En este contexto decidió utilizar la reunión del Foro de Sao Paulo para desacreditar a Bachelet y su informe, esperando contar con el apoyo de los delegados al evento. Para el éxito de su estrategia el gobierno confiaba, no tanto en el prestigio de sus integrantes frente a los antecedentes de la expresidente chilena, sino en la ayuda financiera que ha estado repartiendo a diestra siniestra en apoyo a la izquierda, en Uruguay, Argentina, Managua, Brasil y pare usted de contar.

Sin embargo el gobierno venezolano no sopesó debidamente la contundencia del informe en la izquierda democrática de la región, fue algo cercano a una explosión lo que detonó en las oficinas de Partido Socialista Chileno, en el Frente Amplio de Uruguay o el Partido de los Trabajadores de Brasil. Lo que se ve a estas alturas, es que en la relación del gobierno de Maduro con la izquierda democrática latinoamericana el informe marcó un punto de inflexión, a partir del cual la izquierda latinoamericana comenzó a distanciarse del régimen venezolano.

Según información divulgada por diversos articulistas, proveniente del portal de noticias Venezuela Redinformativa el informe de Bachelet disuadió a varios de los partidos de izquierda democráticos de la región de no participar en la convocatoria, a fin de no retratarse con un régimen violador de los derechos humanos. Entre los que decidieron no asistir estuvo el Partido Socialista de Chile en respaldo a uno de sus miembros, la ex presidenta Bachelet. Igual hicieron el Partido por la Democracia del ex presidente Ricardo Lagos. De México el histórico PRD decidió no asistir para no avalar a Maduro. En Ecuador tres partidos de larga presencia en el FSP decidieron lo mismo: Proyecto País del presidente Lenin Moreno, Movimiento Pachacutik de filiación marxista y representante de grupos indígenas e Izquierda Democrática (ID). La lista la completa el PRD de Panamá y República Dominicana. Todas son sensibles bajas que se han producido como consecuencia del proceso de distanciamiento de la izquierda democrática que se desmarca del régimen de Maduro.

La mayor evidencia de la fractura la muestra la actitud de Bolivia que decidió no participar como Estado, producto de un caculo electoral de Evo Morales que no quiere empañar su imagen, dada la cercanía de las elecciones que se celebrarán en octubre. La desbandada que se produjo dejó al Foro con una asistencia raquítica que lo convirtió en el más débil que se ha producido en muchos años. La asistencia se estimó en 150 personas entre delegados e invitados, muy lejos de los 800 señalados por Diosdado Cabello.

A pesar de la escasa participación de partidos y personajes de relevancia de la izquierda, todo hacía predecir, a la hora de iniciarse el Foro, que el gobierno lograría sus objetivos. Sin embargo en la medida que las reuniones se fueron desarrollando quedó claro que algunos de los asistentes venían con instrucciones claras, como fue el caso de los representantes del Frente Amplio de Uruguay, a quienes el gobierno de su país les exigió no acompañar ninguna declaración contra la ex presidenta de Chile o el informe presentado por ella. El Partido de los Trabajadores (PT) de Lula Da Silva también se desmarcó de la intención del régimen. Esta última posición fue muy influyente dado que el PT fue la organización que auspició al FSP en sus inicios. Adicionalmente a ello la disidencia del chavismo venezolano que asistió al Foro se unió a las críticas de los delegados de la izquierda democrática. En la medida que las sesiones del Foro se fueron llevando a cabo los desacuerdos se hicieron evidentes, así como la imposibilidad de lograr una declaración final alineada con los propósitos del régimen.

Al final del Foro usualmente se firma y se hace público un documento, en el cual los asistentes al mismo afirman sus compromisos y solidaridad con sus camaradas y su rechazo a lo que considera sus enemigos históricos, el neoliberalismo y el imperialismo yanqui. Así lo hicieron esta vez emitiendo una declaración final donde se solidarizaron con sus camaradas cubanos por su histórica lucha contra el imperio. Igualmente lo hicieron con los regímenes de Ortega y Maduro. Extendieron su solidaridad a la expresidente Kichner perseguida por la justicia argentina, al ex presidente Lula quien, permanece tras las rejas en Brasil, acusado de corrupción. Igualmente expresaron su apoyo a Evo Morales en su lucha por la presidencia de Bolivia. Sin embargo la declaración no contempló, como aspiraba el gobierno, el cuestionamiento de Bachelet y su informe. La declaración se produjo sin mucha fanfarria, al igual que una escuálida reunión de clausura con los más incondicionales en el palacio de Miraflores. Aparentemente el gobierno, al darse cuenta del estrepitoso fracaso de su estrategia, quería finiquitar el evento sin mucha bulla.

Profesor UCV

La alianza con Estados Unidos es clave en la ruta al desarrollo

José E. Rodríguez Rojas

El antiamericanismo forma parte de nuestro ADN cultural. Ello se ha reflejado en la relación conflictiva que el régimen chavista ha mantenido con los Estados Unidos. Paradójicamente, las evidencias apuntan a que una alianza con los Estados Unidos ha sido un elemento clave de la ruta al desarrollo de los países latinoamericanos que más logros han obtenido. Juan Guaidó está construyendo una alianza con el gobierno de los Estados Unidos, que retoma esta idea. Esto nos coloca en una posición muy ventajosa para impulsar el proceso de recuperación.

En su libro “Redentores” el historiador mexicano Enrique Krauze revisa el ideario de varios personajes claves en la historia de latinoamérica y concluye que una idea que nos identifica a los latinoamericanos es el antiamericanismo, el reconcomio frente a los Estados Unidos. Usualmente se cita una frase de Simón Bolívar para justificarlo. El Libertador señaló en una carta al coronel Patricio Campbell que “Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad”. “Las Venas Abiertas de América Latina”, del periodista uruguayo Eduardo Galeano, es una obra muy bien escrita que ha alimentado esta idea. Una reseña del libro señala que “es un ensayo periodístico que contiene crónicas y narraciones que dan prueba del constante saqueo de recursos naturales que sufrió el continente latinoamericano a lo largo de su historia a manos de naciones colonialistas, del siglo XV al siglo XIX, e imperialistas, del siglo XX en adelante”.

Cuando habla de imperialistas obviamente se refiere a los Estados Unidos. La obra es un panfleto propagandístico con una precaria fundamentación; Galeano reconoce, en declaraciones recientes en una feria del libro, que no tenía los conocimientos en economía y política necesarios para hacer algo mejor, marcando distancia con su obra.

El régimen cubano y su conflicto constante con los Estados Unidos ha influido en el ideario de la izquierda jurásica latinoamericana agrupada en el Foro de Sao Paulo, que acusa a los Estados Unidos de un comportamiento imperial en relación a los países de la región, con la intención de someterlos como colonia y explotarlos. Esta ideología ha marcado la agenda del régimen chavista en su relación con los Estados Unidos, que se ha mantenido desde un inicio en una retórica antiamericana, a pesar de ser el coloso del norte nuestro principal cliente, retórica que progresivamente ha ido minando nuestra relación con la economía del norte.

Paradójicamente cuando examinamos los casos de tres de los países de América Latina que han logrado avances económicos considerables y algunos de ellos sociales, en las últimas décadas, constatamos que la alianza que han llevado a cabo con los Estados Unidos lejos de ser perjudicial los ha beneficiado, a tal punto que ha influido de manera determinante en su ruta hacia el desarrollo

La ruta hacia el desarrollo implicó en el caso de Chile un golpe militar por parte de la derecha que impidió el establecimiento de un régimen procastrista en el país austral. Aunado a ello la dictadura militar forjó un acuerdo con los economistas de la corriente monetarista de la Universidad de Chicago, una de las mejores instituciones académicas en los Estados Unidos. Producto de este acuerdo surgió la agenda de reformas liberales, que sería la base del legado económico de la dictadura que dio lugar al milagro económico chileno. A la larga, los partidos democráticos, como el socialista de Bachelet, incorporaron estas reformas a su agenda haciéndolas más inclusivas. (Rodríguez R., José E. 2019. Liberalismo y desarrollo en el Cono Sur. Dígalo ahí, 12 de julio).

En el caso de Colombia, el país hermano estuvo cerca de constituir un Estado fallido cuando las FARC se enfrentaron al gobierno colombiano, llegando a controlar buena parte del territorio, atentando contra la infraestructura productiva del país y limitando el desplazamiento de personas y empresas, forzando a cientos de miles de colombianos a emigrar. Gracias al fuerte liderazgo del presidente Álvaro Uribe y el apoyo financiero, militar y tecnológico de Estados Unidos, a través del Plan Colombia, se pudo derrotar a las FARC. Ante la posibilidad real de ser eliminados físicamente la guerrilla aceptó la sugerencia de su aliado, el régimen cubano, y acordaron negociar un proceso de paz con el gobierno de Santos, que ha contribuido a la recuperación económica del hermano país.

Colombia y Chile han firmado acuerdos de libre comercio con los Estados Unidos que han impulsado su comercio e inversiones. Igualmente lo hizo México, que firmó un acuerdo de libre comercio con los Estados Unidos y Canadá, denominado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), a inicios de la década de 1990. El tratado ha potenciado el comercio y las inversiones extranjeras, lo que ha modificado la composición de las exportaciones mexicanas, convirtiendo en minoritarias las provenientes del petróleo. El incremento del comercio y de las inversiones ha devenido en un crecimiento de la economía que se ha ubicado en el onceavo lugar por encima de la de España, Corea del Sur y Australia (Rodríguez R., José E. 2019. La exitosa ruta de México hacia un país no dependiente del petróleo. Dígalo ahí, 22 de julio).

Los logros llevados a cabo por Chile, Colombia y México han posibilitado su ingreso en la OCDE llamado el “club de los países ricos” donde se codean con las naciones más desarrolladas del mundo como Estados Unidos, Canadá, los países europeos, Japón y los gigantes de Asia como la India y China.

De estos tres casos se concluye que una alianza con Estados Unidos es clave para encaminarse y avanzar en la ruta del progreso económico. Esto avala la gestión de Juan Guaidó quien ha nucleado a su alrededor a un grupo de expertos en petróleo, economía, finanzas y diplomáticos que lo han ayudado a elaborar un plan económico y construir una alianza con los sectores anticastristas del congreso de los Estados Unidos y el gobierno de este país; logrando su apoyo para defender los intereses de PDVSA en el extranjero. Creando las bases para lograr el apoyo de los Estados Unidos a un paquete de ayuda del FMI, que permita resolver el tema de la deuda y aliviar la crisis humanitaria, así como la apertura de la industria petrolera a la inversión extranjera.

Esta alianza constituye un avance invalorable que nos coloca en una posición sumamente ventajosa para impulsar la recuperación de la economía, una vez que el usurpador abandone el poder.

Profesor UCV

La izquierda jurásica se reúne en Caracas

José E. Rodríguez Rojas

El Foro de Sao Paulo (FSP) es concebido, en teoría, como un espacio para fortalecer el debate entre las distintas vertientes de la izquierda latinoamericana, pero ha mutado en una organización de tarifados, parte del aparato de propaganda del movimiento bolivariano y de los regímenes más atrasados que éste incluye, como el de Maduro y el de Ortega. No ha incorporado los avances de la izquierda democrática, por el contrario repiten una retórica antiliberal y antiimperialista que los ha llevado a ser el parque jurásico de la izquierda.

Después de la caída del muro de Berlín y el desplome del régimen soviético, se produjo un vacío y desmoralización en la izquierda latinoamericana que requirió un esfuerzo de renovación y motivación, para reivindicar la fe en el antiguo régimen comunista, presentándolo ahora como socialismo. En este contexto surge el Foro de Sao Paulo auspiciado por el Partido de los Trabajadores de Brasil, toma el nombre de la ciudad donde se llevó a cabo la primera reunión. En estas fases iniciales surge como una respuesta a las reformas liberales de Pinochet, que califican de neoliberalismo, y a las acciones y políticas de los Estados Unidos que ellos califican como imperialismo norteamericano.

Formalmente se trata de un foro para debatir las ideas de la izquierda latinoamericana en sus diversa vertientes. Allí cohabitan dos tendencias básicas, por un lado la izquierda democrática de Pepe Mujica y Bachelet y por otro la izquierda autoritaria representada por los regímenes de Maduro, Ortega y los Castros. Si bien esto es cierto en teoría, en la práctica, una vez que el movimiento bolivariano se expande por latinoamérica financiado con los petrodólares y la corrupción del gobierno de Chávez, el FSP pasa a ser una organización de tarifados, parte del aparato de propaganda del movimiento bolivariano y de los regímenes más atrasados de éste, como el de Maduro y Daniel Ortega, sin olvidarnos de la satrapía cubana.

Un testigo de excepción, es el escritor Sergio Ramírez quien en un artículo en el diario El País, a mediados del año pasado, cuestionó la defensa que el FSP hizo del régimen de Ortega, quien a juicio de Ramírez ha decidido eternizarse en el poder como un autócrata, aliándose con la derecha local y aplicando una política del terror similar a la del régimen cubano. Señala el escritor: “Defender el régimen de Ortega como de izquierda, es solo defender su alineamiento dentro de lo que queda del ALBA, que no es mucho, tras el fin de la edad de oro del petróleo venezolano gratis…” . El Foro convocado en Caracas se alinea en este propósito propagandístico y de defensa del régimen de Maduro. A tal efecto Diosdado Cabello se trasladó a la Habana en días pasados a fin de afinar los detalles de los preparativos del foro con los funcionarios de la isla.

La izquierda latinoamericana ha aprendido y avanzado en su derrotero. Uno de los frentes donde se ha dado un proceso de aprendizaje es el de la democracia y los derechos humanos. El FSP no ha incorporado este aprendizaje en su agenda. El año pasado se produjeron protestas en Nicaragua contra la intención del régimen de Ortega de reformar la seguridad social y reducir las pensiones. La respuesta del régimen, fue desatar una brutal represión contra los manifestantes que produjo al menos 500 asesinatos, cientos de heridos y más de 600 prisioneros políticos, impulsando a parte de la población a huir hacia los países vecinos.

En ese momento el FSP reunido en la Habana, haciendo caso omiso de la carnicería provocada por Ortega, hizo una acalorada defensa de su régimen acusando a los manifestantes de ser parte de un “golpe suave” de la ultraderecha local, organizado y dirigido por los Estados Unidos, con el propósito de derrocar a un gobierno soberano que no responde a los designios imperiales. La retórica antiimperialista del FSP para defender a un régimen violador de los derechos humanos, revela una organización que se quedó atrapada en el pasado y que repite mecánicamente una cartilla de la izquierda de otros tiempos. Así lo señaló Sergio Ramírez al referirse a las declaraciones del FSP: su “diatriba no tiene que ver con la realidad de Nicaragua. Es retórica hueca, lejana de todo contacto con la verdad, que se quedó perdida en las elucubraciones de una ideología fosilizada. En el parque jurásico no hay pensamiento crítico”… Ramírez cuestionó incluso la condición de izquierdistas de los organizadores del FSP pues a su juicio “el oficio ético de la izquierda fue siempre estar del lado de los más pobres y humildes con sentimiento y sensibilidad”.

Otra área donde la izquierda latinoamericana ha evolucionado es en la relacionada con las reformas económicas de orientación liberal. Estas han sido incorporadas a la agenda de política económica de la izquierda, dando lugar a lo que se llama la izquierda liberal, de la cual han formado parte Teodoro Petkoff en Venezuela y Fernando Henrique Cardoso en Brasil. Ello ha incluido tanto las políticas para el control de la inflación, como los acuerdos de liberalización del comercio, algunos de los cuales se han firmado con los Estados Unidos y han impulsado el desarrollo de las economías latinoamericanas que lo han instrumentado; como es el caso del TLCAN de México; cuyo presidente forma parte de una organización política que figura como uno de los miembros del FSP. Sin embargo el FSP sigue afincado en una retórica antiliberal y antimperialista propia de la izquierda de inicios de la década de 1960. Como lo señala Ramírez sus ideas son parte del parque jurásico de la izquierda.

Nota: Sergio Ramírez fue compañero de lucha de Daniel Ortega en el movimiento sandinista, cuando se percató del derrotero autoritario del ex guerrillero se convirtió en uno de sus más agudos críticos. Es escritor y obtuvo el premio Cervantes por su obra, el galardón más prestigioso otorgado por el gobierno de España, el cual le fue entregado por Felipe VI. El artículo a que hacemos referencia se denomina “Parque Jurásico” y fue publicado en el diario El País el 25 de julio de 2018.

Profesor UCV

La exitosa ruta de México hacia un país no dependiente del petróleo

José E. Rodríguez Rojas

México ha avanzado en su camino al desarrollo a través de estrechar sus relaciones con el primer mundo. Ello lo ha hecho mediante un Tratado de Libre Comercio con sus vecinos del norte (TLCAN) que le ha permitido incrementar su comercio e inversiones en forma sustantiva. El TLCAN ha convertido al país azteca en el octavo exportador de automóviles a nivel mundial. La composición de las exportaciones se ha modificado, reduciéndose el peso de las exportaciones petroleras que son minoritarias. Esto ha derivado en un incremento del tamaño de la economía que ha desplazado a España como la mayor economía de hispanohablantes del mundo y ha posibilitado el ingreso del México en la OCDE conocido como el “club de los países ricos”.

Entre la década de 1970 y 1990 se desarrollaron diversos eventos que fueron clave en la transformación de México en una economía no petrolera. Durante esos años gobernaba en México el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el cual era heredero de la tradición de la revolución agraria mexicana. El PRI mantenía el control del Estado desde 1930, conformando un régimen autoritario de largo aliento qué si bien recurría a la represión, también emprendió reformas que lo conectaron con amplios sectores económicos, académicos y culturales. Evidencia de ello es que un intelectual de la talla de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura, se desempeñó como embajador en la India de uno de los gobiernos de este partido.

El PRI era un partido de Estado en el sentido de que se consideraba comprometido con la gestión del Estado mexicano en el largo plazo y la necesidad de pensar ésta más allá de las circunstancias del momento. La dirigencia del partido concluyó que manejar el Estado era muy complejo, en consecuencia, envió a sus jóvenes dirigentes presidenciables a formarse en economía y gerencia en las universidades de los Estados Unidos; con el propósito de construir una generación que fuera capaz de enfrentar los retos que planteaba la globalización a la economía mexicana, aunado al reto de convivir con su vecino, el coloso del norte, y sobrevivir en el intento.

Un miembro de esa generación, formado en los Estados Unidos, Carlos Salina de Gortari, llegó a presidente de la nación a finales de la década de 1980. Salinas era economista y obtuvo un master en Administración Pública en la Universidad de Harvard y luego un PHD en la escuela de gobierno de la misma universidad. En su administración se inició la discusión de un Tratado de Libre Comercio con sus vecinos, Estados Unidos y Canadá (TLCAN), el cual recogía una idea lanzada por Ronald Reagan en su campaña a la presidencia de Estados Unidos en 1980, que dio lugar a un acuerdo previo entre éste país y Canadá, que luego se extendió al país azteca. Los esfuerzos del PRI habían dado frutos ya que sus jóvenes dirigentes habían contribuido a la concepción de un acuerdo, que no solo era una respuesta a la globalización sino que intentaba formalizar, para provecho mutuo, una agenda de convivencia con el coloso del norte que fuera más allá del conflicto migratorio que todavía consume la discusión entre ambos.

El acuerdo comercial fue firmado a inicios de la década de 1990 por Salinas, el presidente H.W.Bush y Brian Mulroney primer ministro de Canadá. El TLCAN buscaba potenciar el comercio con los Estados Unidos y Canadá así como las inversiones extranjeras. El PRI culminó su larga estadía en el poder en el año 2000 con el ascenso de Vicente Fox a la presidencia, sin embargo, Fox al igual que los demás presidentes de México, que sucedieron a Salinas, continuaron la instrumentación del TLCAN, a pesar de las múltiples dificultades que se plantearon y que sería largo de enumerar en estas líneas.

Casi 30 años después una evaluación del acuerdo comercial evidencia que ha sido exitoso, si se le examina en función de los objetivos que se propuso, centrados en el tema del comercio y la inversión extranjera. Ha logrado incrementar de manera sustantiva las exportaciones hacia los Estado Unidos, así como las inversiones extranjeras de sus socios en el país del mariachi y del tequila. En particular en la industria de producción de automóviles México ha logrado integrarse en la cadena de producción. Las empresas automovilísticas americanas fabrican las autopartes en suelo estadounidense y luego las exportan al país azteca, donde se fabrican los vehículos, aprovechando el bajo costo de la mano de obra. Luego de fabricados son enviados a los Estados Unidos para su venta. Empresas europeas de fabricación de autos también se han instalado en México para luego exportar el producto final hacia el mercado americano. Como consecuencia de ello México se ha transformado en el octavo exportador mundial de vehículos. La estructura de las exportaciones ha variado, petróleo y derivados representa solo un tercio de las mismas, mientras la gran mayoría son exportaciones no petroleras que abarcan productos agroalimentarios, electrodomésticos, autopartes y vehículos entre otros items.

El crecimiento de las exportaciones y de la inversión se ha reflejado en un aumento del tamaño de la economía mexicana, medido por el Producto Interno Bruto (PIB) a precios de paridad del poder de compra (PPC), que es el indicador usualmente utilizado para ello. Para esta estimación se utiliza un tipo de cambio de equilibrio que corrige las distorsiones que corrientemente sufren los tipos de cambio, el cual permite la comparación entre los países en términos más reales. De acuerdo con esta estimación, hecha por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el tamaño de la economía del país azteca se ha incrementado a tal nivel que en 1998 desplazó a España, como la economía de hispanohablantes de mayor tamaño del mundo, según reporta el diario EL País de España. En el año 2012 el FMI confirma sus estimaciones colocando a México como la onceava economía del mundo por encima de Corea del Sur, Canadá, España, Turquía y Australia. Los avances del país azteca han posibilitado su ingreso en la OCDE conocida como el “club de los países ricos”. Según la unidad de investigación de la revista The Economist la expansión continuará en el futuro convirtiendo a México en una de las economías de mayor dinamismo del mundo.

El impacto del TLCAN se ha focalizado en algunas regiones principalmente la central y las más cercanas a los Estados Unidos. En otras, más rezagadas, la vida de los habitantes es agobiada por la violencia y el narcotráfico. La pobreza sigue siendo un tema pendiente. México es un caso paradigmático en el cual se evidencia que la pobreza es un problema de largo plazo difícil de resolver. A pesar de los esfuerzos que se han hecho, con la colaboración de los organismos internacionales, todavía involucra al 43% de la población.

Profesor UCV

Liberalismo y desarrollo en el Cono Sur

José E. Rodríguez Rojas

Mientras, su vecino Argentina está todavía atrapado en los dilemas propios de un país latinoamericano dominado por el populismo, Chile ha logrado mantener una agenda de reformas económicas de orientación liberal por más de 40 años, que lo han llevado a las puertas del desarrollo. Esto ha sido posible gracias a un programa económico que surgió del deslinde con la vía revolucionaria, llevado a cabo por la dictadura de Pinochet, y la alianza entre ésta y los economistas de la Universidad de Chicago.

Luego fue determinante el consenso político para mantener dicha agenda en el largo plazo. La reforma chilena tuvo un fuerte impacto en la agenda económica y política de América Latina, generando lo que dio en llamarse la izquierda liberal.

Argentina continúa dominada por el populismo, el cual primero asumió el ropaje de peronismo y en el periodo más reciente de bolivarianismo. Es un movimiento carcomido por la corrupción de su élite dirigente. La reciente presidente Cristina Kirchner amasó, con su difunto marido, una fortuna estimada en más de 12 millones de dólares de forma oscura. En su gobierno impulsó la inflación hasta niveles cercanos al 60%.

El actual presidente Mauricio Macri, en el marco de un acuerdo con el FMI, está tratando de controlar el flagelo inflacionario, sin embargo, las duras medidas implementadas han incrementado la pobreza y su impopularidad. El populismo peronista ha impedido el avance hacia el desarrollo, en particular en lo referente al logro de instituciones independientes, un Banco Central autónomo que controle la inflación y un sistema judicial independiente que ponga coto a la corrupción de la élite dirigente (Rodríguez Rojas, J. E. 2019. El retorno de los bolivarianos. Dígalo ahí, n 3, 9 de julio).

Al lado, su vecino Chile ha dejado atrás los problemas de un país latinoamericano más como Argentina. Su inflación es de 2% anual, similar a la de cualquier país desarrollado. La indigencia o pobreza extrema es insignificante y sobrevive una población bajo la línea de pobreza que involucra al 8% de la población. Su Índice de Desarrollo Humano (IDH), que incorpora tanto al Producto Interno Bruto (PIB) per cápita como los logros en educación y salud, es cercano al de Portugal. El Índice Global de Paz que mide la inseguridad y otros aspectos relacionados, revelan que Chile es mas pacifico que algunos países europeos, como España e Italia.

La patria de Neruda tiene más de 40 años con una agenda de reformas liberales las cuales se han orientado a restringir la intervención del Estado en la economía, controlar la inflación e incentivar la iniciativa individual y la competitividad de la economía. Esta agenda la han transformado en una de las economías más competitivas del continente, volcada a la exportación de productos de manufactura y logística compleja como el vino, el salmón cultivado y tradicionales como el cobre. Paralelamente a ello ha mantenido programas contra la pobreza orientados hacia los sectores más vulnerables de la población. El cuadro lo completan un sistema judicial que ha puesto límites a la corrupción y una policía respetada y admirada por la población llamada Los Carabineros.

Chile estuvo a punto, a inicios de la década de 1970, de errar el camino; cuando la izquierda chilena acarició la idea de seguir la vía revolucionaria iniciada por Cuba. Ante esta situación la derecha chilena le dio una patada al tablero e inició una dictadura que se deslindó de la ruta iniciada por los Castros. Además de separarse de la vía revolucionaria, la derecha chilena elaboró su propia propuesta económica.

Llevó a cabo una alianza estratégica con la escuela económica en boga, los monetaristas liderados por Milton Friedman, que hacían vida en la Universidad de Chicago una de las mejores universidades de los Estados Unidos. Producto de esta alianza surgió una agenda de reformas liberales, que se llevaron a cabo orientadas a volcar a la economía chilena hacia la exportación y a insertarla en el proceso de globalización, lo cual a la larga constituiría el legado económico de la dictadura. Pinochet se integró de esta manera en el giro conservador que se dio en ese momento a nivel global, liderado por Margaret Thatcher y Ronald Reagan, que cuestionó el rol del Estado y de los sindicatos en la economía.

El otro factor que influyó en el milagro chileno, es que una vez finalizada la dictadura, los partidos de izquierda reconocieron su error y evolucionaron hacia una política económica consensuada con la derecha, que tomó el legado económico de la dictadura como columna vertebral, haciéndolo más inclusivo. Al final, esta agenda de reformas es la que ha servido de núcleo a la política económica de Chile por más de 40 años. Este es el último factor que explica el éxito chileno: la constancia en el largo plazo.

Habrá quien intente vender gato por liebre y presentar el éxito chileno como parte de un consenso político, pero la realidad es que no se puede entender el éxito chileno sin el deslinde de la vía revolucionaria y la alianza entre la dictadura de Pinochet y los economistas de la Universidad de Chicago, liderados por el nunca bien ponderado y genial Milton Friedman. El que visite Chile notará que la figura del anciano dictador todavía está presente y su aporte es reconocido por muchos de sus paisanos como parte de una polémica que todavía perdura.

La izquierda pro castrista se deslindó de la reforma económica chilena llevando a cabo una campaña de descrédito contra ella. Sin embargo, al igual que en Chile, buena parte de la izquierda latinoamericana se desplazó hacia el centro político y terminó aceptándola, al igual que los planteamientos de la escuela monetarista de Milton Friedman, surgiendo lo que daría en llamarse la “izquierda liberal”, de la cual formó parte Teodoro Petkoff.

Otro de los representantes de esta izquierda fue Fernando Henrique Cardoso, quien incorporó los planteamientos liberales en su agenda económica, para controlar la hiperinflación en Brasil a inicios de la década de 1990. El Plan Real implementado por Cardoso fue luego continuado por Lula Da Silva quien previamente había discrepado de éste por su orientación “neoliberal” (Rodríguez Rojas, J.E.. 2016. Lula “neoliberal”. Dígalo ahí, 14 de junio ). El Plan Real se convertiría en un patrón de referencia que influiría en los programas económicos de los países que se desplazan en la órbita de influencia de Brasil y en la Agenda Venezuela liderada por Teodoro Petkoff.

Nota: las cifras de IDH son tomadas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en su más reciente informe. Las de pobreza corresponden al Banco Mundial. El Índice Global de Paz es elaborado por la Universidad de Sidney y la Unidad de Inteligencia de la revista The Economist.

Profesor UCV

El retorno de los bolivarianos.

José E. Rodríguez Rojas

Argentina sigue atrapada por el populismo, disfrazado en un momento de peronismo y en el periodo más reciente de bolivarianismo. La ex presidente Cristina Kirchner dejó un legado de corrupción e inflación que el actual presidente Mauricio Macri está tratando de corregir. Sin embargo, sus medidas han incrementado su impopularidad y es probable que los bolivarianos retornen al poder y continúen haciendo de las suyas.

Recientemente leo en la prensa internacional que dos personas han muerto en Buenos Aires, por la oleada de frío que ha traído consigo el invierno. Son dos indigentes que integran la gran masa de pobres que pululan en Buenos Aires y otras ciudades argentinas. La solidaridad se ha hecho presente pues uno de los grandes equipos de fútbol, el River Plate, abrió su estadio para servir como refugio de la población que no tiene donde guarecerse. Les entregaron mantas y comida caliente para que pasen el mal momento.

La Argentina no ha logrado enrumbarse en la senda del desarrollo como lo ha hecho su vecino Chile y permanece atrapada en las garras de la corrupción, como Brasil, Venezuela y otros países latinoamericanos. El último episodio de esta historia lo protagonizaron los Kirchner La reciente presidenta Cristina Kirchner dejó un legado de corrupción e inflación. Su fortuna asciende a más de 12 millones de dólares, acumulada en forma oscura.

Uno de los mecanismos más usados fue el de adquirir terrenos cerca de los cuales se construirían obras públicas, información que obtenían por sus contactos en el gobierno. Una vez que las obras se construían vendían, beneficiándose de la valorización de los terrenos. La élite corrupta argentina también se benefició del despilfarro y corrupción impulsado por Chávez, en su aspiración de convertirse en un líder regional.

Los maletines conteniendo cientos de miles de petrodólares circularon por los aeropuertos de Buenos Aires, La Paz y Managua enriqueciendo a las élites gobernantes afines al prócer de Sabaneta.

La Kirchner impulsó la inflación a un nivel que se aproximó al 60% anual, casi 30 veces la de su vecino Chile. Su mejor estrategia para combatirla fue presionar al Banco Central y al instituto de estadísticas oficiales para que la maquillara. Esto fue motivo de conflicto con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La debilidad del peso ha generado una crisis de confianza en la moneda nacional que ha obligado a la clase media argentina a ahorrar en dólares, por lo que la divisa americana ha potenciado su valor así como su rol en la alicaída economía argentina.

El populismo sigue pendulando sobre el país austral, una vez como peronismo y en su fase más reciente como parte del movimiento bolivariano liderado por Chávez. El país de Gardel ha hecho varios intentos de introducir reformas económicas para controlar sus males, pero dichos intentos han fracasado.

El último de estos ha sido llevado a cabo por el actual presidente Mauricio Macri, quien tras un acuerdo con el FMI ha tenido que instrumentar una política de ajuste para bajar la inflación. Una de las medidas fue la de elevar la tasa de interés a niveles del 70%, lo que ha deprimido el consumo y generado una recesión que ha incrementado el desempleo y la pobreza, la cual ha involucrado al 32% de la población.

La ayuda del FMI contempla un gasto social mínimo que el organismo financiero insiste que debe cumplirse, para suavizar el impacto del ajuste y darle sostenibilidad política al mismo. Sin embargo, la dureza del ajuste ha elevado la impopularidad del mandatario.

El electorado argentino no valora mucho la ética de los funcionarios públicos. Cuando Perón era su líder gritaban: ¡Con Perón aunque sea ladrón! En los actuales momentos una importante parte del electorado añora al gobierno de la Kirchner, a pesar de estar a la puerta de un juzgado por la elevada corrupción de su gobierno.

Si bien la gestión de Macri está logrando disminuir la inflación, el incremento de la pobreza que ha generado sus medidas puede llevar al electorado a elegir al equipo peronista integrado por la Kirchner, la cual volverá a la casa de gobierno argentina a hacer de las suyas.

Del otro lado de la frontera, los chilenos atónitos observan las tribulaciones de sus vecinos, sin embargo no tienen mucho tiempo para entretenerse en ello; pues deben atender sus problemas que son los propios de un país desarrollado: cambio climático, envejecimiento de la población, y sobre todo una oleada de inmigrantes que se aglomeran en su frontera deseosos de disfrutar de los logros del modelo económico chileno.

¿Porque ambos países, a pesar de su cercanía geográfica y cultural, tienen tan contrastante comportamiento? Una explicación, en relación a la Argentina, es que en este país el populismo peronista ha penetrado profundamente a la sociedad civil y a la elite política. Si bien se han hecho esfuerzos para deslastrarse del mismo, el peronismo sobrevive hasta el presente, impidiendo las reformas necesarias para avanzar en el camino al desarrollo; en especial en el logro de instituciones independientes, como un Banco Central que mantenga la inflación bajo control o un sistema judicial que ponga un freno a la corrupción de la elite política.

Profesor UCV

La ONU ha contribuido a legitimar al régimen cubano

José E. Rodríguez Rojas

El régimen de Maduro espera que la comunidad internacional le confiera el mismo tratamiento que le han dado al régimen cubano. Ciertamente la comunidad internacional, y la ONU en particular, han contribuido a legitimar al régimen cubano, dando por ciertas sus estadísticas que reflejan logros en educación y salud, que son parte de la propaganda del régimen. A pesar de la sistemática violación de los derechos humanos que se ha producido en la isla, Cuba forma parte del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Esta organización ha hecho caso omiso hasta el presente de las solicitudes de numerosas ONGs que plantean la necesidad de revisar la situación de los derechos humanos en la nación caribeña. La aspiración del régimen venezolano de prolongarse en el poder contando con la complicidad de la ONU no es infundada.

En las negociaciones que se llevaron a cabo en República Dominicana, Jorge Rodríguez declaró que ellos aspiraban a recibir el mismo tratamiento que la comunidad internacional le había conferido al régimen cubano desde sus inicios. En efecto, buena parte de la comunidad internacional contribuyó a legitimar al régimen cubano y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) desempeñó un papel relevante en esta tarea. El sistema de Naciones Unidas se ha desarrollado cohabitando con los regímenes más despóticos del mundo, que violan sistemáticamente los derechos humanos, que la misma organización promulgó en sus inicios. Uno de ellos es Cuba, país donde el régimen castrista, durante el inicio de la revolución, llevó a cabo una carnicería. Según la directora del programa Archivo Cuba María Werlau, los casos de fusilamiento y ejecución extrajudicial para los primeros tres años y medio del régimen de los Castros, exceden la cifra total de muertos durante la dictadura de Pinochet.

Encarcelaron de por vida a uno de los dirigentes fundamentales de la revolución, Huber Matos, por el solo hecho de discrepar de la deriva comunista de la misma. Fue liberado después de veinte años de encarcelamiento por la presión internacional. No hay libertad de expresión ni medios independientes del gobierno, el cual controla la totalidad de los medios de comunicación masivos. Han encarcelado a muchos por el delito de disentir de la orientación socialista del régimen o protestar contra los Castros. Han intimidado a intelectuales simpatizantes del proceso revolucionario, obligándolos a realizar confesiones amañadas en la cual han admitido haber cometido delitos contra el Estado, una de las mayores transgresiones en la nación caribeña.

Han sometido a la población a un régimen de carencias sistemáticas en todo los órdenes de la vida: alimentos, electricidad, gasolina. Los cubanos tienen un ingreso medio que se ubica por debajo de la línea de pobreza internacional establecida por el Banco Mundial. La población no puede organizarse en partidos diferentes al Partido Comunista o en organizaciones sindicales independientes para demandar mejores ingresos, pues ello está prohibido y si presionan son reprimidos y encarcelados después de un juicio amañado a puertas cerradas.

A pesar del régimen de carencias que sufre la población, una buena parte de la intelectualidad de izquierda y países gobernados por simpatizantes de esta tendencia, han contribuido a crear una imagen de la nación caribeña como un enclave de bienestar. La ONU también ha coadyuvado a esta labor propagandística, presentando los logros en el sistema sanitario y de educación como un modelo a imitar. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) elabora un Índice de Desarrollo Humano (IDH) que considera los aspectos económicos a través del PIB per cápita y los logros en salud y escolaridad, recurriendo a la esperanza de vida y los años de escolaridad. El PNUD presenta a Cuba como un país con un IDH elevado debido a sus logros en materia de salud y escolaridad, que aparentemente compensan las carencias de la economía. Esto pudo ser cierto en sus inicios debido al subsidio soviético pero a lo largo del tiempo estos servicios se han deteriorado y el PNUD no lo refleja en su Índice, debido a que da por legítimas las prefabricadas estadísticas que genera la burocracia cubana. Sin embargo el consenso entre los analistas y conocedores de la realidad cubana es que ha ocurrido un sostenido deterioro de los servicios de salud y de educación como lo ha señalado la bloguera cubana Yoani Sánchez.

En el cuadro siguiente insertamos el IDH de Cuba y de varios países latinoamericanos. De acuerdo con estas cifras Cuba tiene un IDH superior al de los países latinoamericanos citados en el cuadro. Lo absurdo de las cifras del PNUD se refleja en el hecho de que Venezuela, en plena crisis humanitaria, tiene un IDH superior al de Colombia, Ecuador y Perú. Según esto los migrantes venezolanos tienen un comportamiento irracional, pues huyen despavoridos de un país con una economía pujante y con un sistema de salud y de educación modélico, a otros con un nivel de desarrollo humano inferior. El caso extremo es el de Colombia que aparece con un IDH 14 puntos por debajo del de Venezuela. La realidad es que el PNUD da por ciertas las estadísticas cubanas y venezolanas, que son parte de la propaganda de los regímenes autoritarios que los gobiernan y no pueden ser comparadas con las estadísticas de los países democráticos, que reflejan la realidad de sus carencias. Esto último es así, pues las instituciones generadoras de estadísticas están sometidas al escrutinio de las organizaciones de la sociedad civil y la prensa libre, en la dinámica normal de una sociedad democrática.

Cuadro 1. IDH de varios países latinoamericanos, año 2017.

IDH

País

0.777

Cuba

0,774

México

0.761

Venezuela

0,759

Brasil

0.752

Ecuador

0,750

Perú

0,747

Colombia

Fuente: PNUD

A pesar de la sistemática violación de los derechos humanos Cuba figura en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. En diversas oportunidades numerosas ONGs se han dirigido al Consejo a fin de exigir un proyecto de resolución sobre la situación de los derechos humanos en Cuba. La más reciente fue este año, planteada por 75 organizaciones de derechos humanos de 35 países que abarcan África, Asia, Europa y las Américas. La coalición llamó la atención sobre la falta de elecciones libres y justas en el país, la situación de un régimen que ha posibilitado la permanencia de los militares en el poder por 60 años en contra de la voluntad del pueblo cubano. Además denunciaron la práctica cotidiana del gobierno de encarcelar a los opositores. La solicitud fue realizada por la dirigente política Rosa María Payá hija de un destacado dirigente de la oposición que murió en un accidente propiciado aparentemente por los esbirros del régimen. Hasta el presente no se ha producido ninguna decisión en torno a la solicitud realizada. El gobierno cubano ha respondido presentando la posición de una lista de ONGs oficialistas que son cajas de resonancia de la visión de la dictadura.

Profesor UCV